Durán, entre Zabaleta y Canogar
La cita del día 26 de enero presenta interesantes oportunidades de pintores regionalistas y de los años setenta
(Si quiere ver los resultados de la subasta, pulse aquí)
El diciembre pasado, el titular del artículo de remates de la cita en la sala fue que obtuvo “abundantes ventas de pintura antigua y del siglo XIX”. La que se presenta ahora a los coleccionistas parece que quiere repetir temática y éxito.
En diciembre, por comenzar a desgranar la cita, Durán adjudicó por los 22.500 euros pedidos el Bodegón: cerámicas y paisaje, 1949 (O/L, 50 x 61 cm; ver), de Rafael Zabaleta. Aunque algunos esperábamos alguna que otra puja más, dadas las circunstancias podemos dejarlo en que fue una venta, barata, pero venta al fin y al cabo, cosa que no había conseguido Segre la semana anterior con su Huerta y hortelanos, 1949 (O/L, 65 x 81 cm; ver), pieza “tardía y ya bastante deshecha, presente como el actual en el catálogo razonado de sus óleos realizado por María Guzmán Pérez (Instituto de Estudios Jienenses, 2010)”, que se ofrecía por 29.000 euros.
El turno ahora es para un muy colorista Bodegón (O/L, 50 x 61 cm; 224), por el que se piden 25.000 euros, en un intento por conseguir un importe ligeramente superior directamente del precio de salida. No será tarea fácil pues sólo sabemos que viene de una colección de Barcelona, pero no aparece publicado ni referenciado en ningún libro del autor ni se presenta con certificado.
En esa línea, digamos que de modernización de los modelos retardatarios regionalistas, se ofrece también un interesante Paisaje, 1971 (O/L, 65,5 x 81,5 cm; 194), del valenciano Francisco Lozano; lo bueno es que se piden 3.500 euros, lejos de las cifras que se pagaban hace no demasiado tiempos por piezas similares, y en lo que podría calificarse como una buena oportunidad para los coleccionistas de obras de su mano. Ya que estamos en el ámbito valenciano, citemos el óleo de José Mongrell, Esperando al esposo (O/L, 101 x 89,5 cm; 76), firmado en Cullera en 1920, que sale ahora a pujas desde los 8.000 euros, ligeramente rebajado respecto a los 10.000 pedidos en noviembre pasado. Merece la pena citar también la tabla de Ramón de Zubiaurre, La partida, c. 1920 (O/T, 24,5 x 36 cm; 141), descrita al dorso como “boceto de mi cuadro La partida existente en el Museo de Buenos Aires», adquirida en el año 1926 por el Museo de Bellas Artes de Buenos Aires (Inv. Nº #2596) tras la exposición en la sala Witcom; su precio, 3.000 euros. Y de su hermano, Valentín de Zubiaurre, Campesinos segovianos (O/L, 45 x 60 cm; 142), una pieza menor en calidad y precio por 2.500 euros.
En el siglo XX merece la pena detenerse en la obra de Rafael Canogar, El aplauso, 1972 (70 x 100 cm; 257), a base de poliéster y fibra de vidrio pintada al óleo sobre lienzo y pegada a tabla. Referenciada en la web del artista con el número 1972-021 (ver), es un buen ejemplo de esa investigación llegada a cabo por el toledano tras abandonar la abstracción de El Paso y dirigirse hacia una figuración con tintes de crítica social, cercana en ese sentido a la propuesta que esos años hacía también Juan Genovés… Los 8.000 euros están lejos de los 16.000 ofrecidos en Fernando Durán en mayo de 2009 por El maniatado, 1972 (49 x 94 x 27 cm), pero cerca de los 8,000, 8,500 y 11,000 USD en que se adjudicaron en junio de 2020 en John Moran (Monrovia, EEUU), El prisionero, 1968 (83 x 81 cm; ver), El soldado caído, 1967 (48 x 58 x 78 cm; ver) y Libertad encarcelada II, 1973 (78 x 111 x 43 cm; ver), pero a medio camino de los 17,500 USD (premium ya incluido) pagados en mayo de 2019 en David Rago por Vivir es caminar breve jornada, 1969 (78 x 168 x 50 cm).
Menos interesante me parece, en la siempre buscada relación calidad-precio, el Retrato imaginario de Felipe II, 1978 (pintura acrílica, gouache, tinta china y mina de plomo sobre papel, 49,3 x 37,7 cm; 259), de Antonio Saura, que se ofrece por 35.000 euros… Y no se dejen la pieza de madera tallada y betún de Judea de Mitsuo Miura, Sin título, 1979-1980 (237 x 18 x 16 cm; 275), expuesta en la muestra Preliminar. 1º Bienal Nacional de las artes plásticas, 1983 (Ministerio de Cultura, 1982, pág, 127), por 2.500 euros, y la buena aunque sucia de Gustavo Torner, Sin título, 1963 (feldespato y látex/T, 61 x 61 cm; 258), por 3.000 euros.
En pintura antigua veremos qué sucede con la Sagrada Familia con San Juanito (O/T, 81 x 74 cm, 34B), que se adjudicó en octubre de 2021 por nada menos que 65.000 euros (ver), pensando en mano de Machuca. Ahora se ofrece por 3.000 euros como copia de la Sagrada Familia, de la Catedral de Jaén, de Machuca, pero de Escuela Española del siglo XIX. La catalogación de ahora es bastante concluyente y explicaría el motivo de la devolución y su nueva salida: “según el informe del prestigioso estudio de restauración I & R, la representación de la Sagrada Familia con San Juanito es una obra realizada en el siglo XIX sobre una crucifixión del siglo XVI – XVII. El soporte es una tabla posiblemente castellana del siglo XVI. Tabla con deterioros y algunas faltas de pintura”… Daniel Díaz @Invertirenarte