Un tapado de Artemisia Gentileschi
En su próxima subasta del 27 de abril, la casa italiana Bertolami, con sede en Roma, ofrecía con el lote 109 un pequeño cobre atribuido a la escuela romana de la primera mitad del XVII. Titulado Niño dormido (Fanciullo dormente), partía con una estimación de salida de 2000 euros. Sin embargo, lo que parecía una pintura sin más podría esconder una obra perdida de la italiana Artemisia Gentileschi. De momento, el cuadro ha sido retirado de la venta.
Es habitual la aparición de algún tapado en el mercado del arte. Ahora le ha tocado a Artemisia Gentileschi, aunque aún tenemos en mente el Maíno de Isbilya o, en años anteriores, los Desposorios de santa Catalina de Sofonisba Anguissola. En su página web, la casa de subastas romana Bertolami ofrecía (lote 109) un pequeño cobre de 13 x 18,5 cm considerado de escuela romana.
Fechado en la primera mitad del siglo XVII, representa presumiblemente a un niño dormido, aunque en realidad se trata de una Alegoría de la muerte. La obra en cuestión despertó tanto interés que fue retirada de la venta. No es de extrañar, pues lo que se ofrecía como anónimo por 2.000 euros podría ser en realidad una pintura de la Gentileschi, algo que multiplicaría exponencialmente su valor.
Además de obras de gran formato, Artemisia pintó pequeños cobres para clientes particulares. En Nápoles realizó por ejemplo una Alegoría de la muerte conocida solo hasta fechas muy recientes a través de varias estampas, como las conservadas en el Rijksmuseum de Ámsterdam, grabada por Pieter de Jode (que debió conocer directamente la pintura); o las del British Museum de Londres de Jean Ganiére (1640) y John Oliver (1680). Estas dejan patente la difusión de la que gozó la pequeña composición.
A todo ello se suma la reciente aparición de un cobre en 2015 y vendido en Christie’s en 2022 que compró el Museum of Fine Arts de Boston (ver aquí). Firmado en el ángulo inferior izquierdo «Arte. GentilescA / fecit Napo», debió ser pintado tras su llegada a Nápoles en 1630. Muestra la misma composición que las estampas, pero falta la calavera que alude a la vanitas. Mide 12,4 x 17,5 cm.
El cobre de Bertolami presenta unas dimensiones prácticamente idénticas al anterior, pero no parece estar firmado. Tampoco cuenta con la calavera que sí está presente en las estampas. Varía el color del almohadón sobre el que reposa la cabeza del Niño, que en este caso es rojo frente al verde del cobre de Boston. También difiere de este, así como de los grabados, el paño sobre el que reposa el cuerpo, más desarrollado que en el resto de composiciones.
Sí existe referencia documental, y esto es importante, a un pequeño cobre de Artemisia con «un puttino che dorme posando il capo nel coscino rosso ed un panno bianco, che lo cinge per traverso, opera d’Artemisia Gentileschi» en los inventarios de la colección Orsini en Roma de 1698 y 1707. Es posible que la obra que se iba a subastar el próximo 27 de abril fuera la misma que perteneció a los Orsini. Algo más que un tapado de Artemisia Gentileschi.