La parábola del hijo pródigo de Murillo, por primera vez en Estados Unidos

La parábola del hijo pródigo de Murillo, por primera vez en Estados Unidos

LA PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO DE MURILLO, POR PRIMERA VEZ EN ESTADOS UNIDOS

El único ciclo iconográfico del pintor andaluz que se mantiene completo puede verse desde el domingo pasado en el Museo Meadows de Dallas, junto a otras escenas del artista procedentes de sus propios fondos y de entidades americanas como la National Gallery de Washington o la Hispanic Society.

Los seis lienzos en los que Bartolomé Esteban Murillo (1617-1682) representa la parábola del hijo pródigo y que pertenecen a la National Gallery de Irlanda viajan a Estados Unidos desde Madrid. El Museo Meadows, entidad que más obra del artista sevillano posee en el país, presenta este ciclo en Murillo: retratos del hijo pródigo, tras haberse podido ver en el Prado, en una muestra en torno al arte de narrar en el Barroco andaluz.

Murillo fue un gran pintor de temática religiosa; también mostró mucha pericia a la hora de representar la narratividad de las escenas. Así queda patente en cada uno de los seis lienzos que componen el conjunto irlandés: pueden contemplarse de manera independiente, por sí solos; al tiempo que sugieren una lectura secuencial de todos ellos.

En esta ocasión, y al igual que ocurrió en el Prado en 2021, las pinturas que componen el eje central de la exposición se acompañan de otras dos obras en las que maestro volvió a representar la misma temática. Se trata de préstamos temporales procedentes de la National Gallery de Washington y de la Hispanic Society de Nueva York.

Bartolomé Esteban Murillo, El regreso del Hijo pródigo, década de1660. Óleo sobre lienzo, 104.5 x 134.5 cm. National Gallery of Ireland. Donado, Sir Alfred and Lady Beit, (Beit Collection). Foto © National Gallery of Ireland.
Alberto Durero. "El Hijo pródigo", c. 1496. 24.61 x 18.89 cm. National Gallery of Art, Washington.
Bartolomé Esteban Murillo, "El hijo pródigo expulsado", década de 1660. Óleo sobre lienzo, 104.5 x 134.5 cm. National Gallery of Ireland. Donado, Sir Alfred and Lady Beit, 1987 (Beit Collection). Foto © National Gallery of Ireland.

Como la representación del hijo pródigo no era muy común en España —al menos en el ámbito pictórico, porque en el literario Lope de Vega o José de Valdivieso escribieron autos sacramentales atraídos sobre el tema—, la muestra del Meadows ofrece también varios trabajos en papel del Barroco, en los que Murillo pudo inspirarse para realizar su trabajo. Cabe mencionar, por ejemplo, los aguafuertes de Durero, Jacques Callot y Pietro Testa que permiten apreciar la variedad temática con la que se ilustró esta parábola.

También pueden observarse varias pinturas del maestro sevillano procedentes de los fondos de la colección americana, como es el caso de Jacob pone las varas al ganado de Labán, así como Cuatro figuras en un escalón prestada por el Museo Kimbell.

Resulta importante destacar el hecho de que algunas de las obras han sido sometidas a procesos de limpieza y restauración, por ejemplo la tela de Jacob que, tras liberarse del barniz envejecido, permite apreciar mucho mejor la pincelada del artista.

Del mismo modo, las seis obras principales de la muestra, recientemente restauradas por la National Gallery de Irlanda, arrojan  luz sobre algunos aspectos de la técnica pictórica de Murillo que se detallan en el catálogo de esta exposición. Dicho volumen está dedicado a Mark A. Roglán, director del Meadows durante dos décadas que falleció de cáncer el pasado mes de octubre y coeditó este catálogo.

Murillo: retratos del hijo pródigo podrá contemplarse en el Museo Meadows hasta el 12 de julio de este año. Sofía Guardiola

Bartolomé Esteban Murillo . "El hijo pródigo entre los cerdos", 1656–65. Óleo sobre lienzo, 161.5 x 104.5 cm. The Hispanic Society of America,