El esplendor de la escultura en Venecia (1450-1600)
Coincidiendo con la apertura de la 59 edición de la Bienal de Venecia, la Galería Giorgio Franchetti en la Ca’ d’Oro exhibe De Donatello a Alessandro Vittoria 1450-1600: 150 años de escultura en la República de Venecia, que incluye más de medio centenar de piezas de los grandes artistas italianos del Renacimiento como Donatello, Lombardo o Rovezzano, seleccionadas por los comisarios Toto Bergamo y Claudia Cremonini. La exposición organizada y financiada por la Fundación Patrimonio Veneciano en colaboración con los Museos del Véneto y con Colnaghi. Permanecerá abierta hasta finales de octubre.
En la presentación Toto Bergamo Rossi, director de la Fundación Patrimonio Veneciano, dijo: «Esta es la primera gran exposición en Venecia dedicada a la escultura del Renacimiento en la República de Venecia. Organizada con el objetivo de promover este arte figurativo, demasiado a menudo infravalorado, la muestra ilustra la evolución estilística de la producción escultórica en el área del Véneto desde el primer Renacimiento hasta el manierismo, con obras de Donatello -que estuvo activo durante nueve años en Padua- para concluir con algunos bustos manieristas de Alessandro Vittoria».
Por su parte, Jorge Coll, CEO de Colnaghi, afirmó que estaba satisfecho de llevar algunas esculturas de la galería a este espacio en Ca’ d’Oro y de colaborar con los Museos del Véneto y Patrimonio Veneciano. «Estamos unidos en los objetivos de promover y difundir la preservación de la cultura, la belleza y el conocimiento del arte». Y añadió que Franchetti también era un buen conocedor del arte del Renacimiento y un coleccionista apasionado. «No puedo pensar en un entorno más adecuado para este proyecto que el palacio que albergó su colección, la Ca’ d’Oro, museo público desde 1927».
La muestra está instalada en la planta noble de Ca’ d’Oro y los comisarios han optado por un diálogo entre las obras de los maestros presentes, que bien eran venecianos o trabajaron en los territorios que eran de la República de Venecia, desde el siglo XV hasta casi el siglo XVII, como fueron Donatello, Antonio Rizzo, Andrea Mantegna, los Lombardo (Pietro, Tullio y Antonio), Sansovino, Rovezzano o Alessandro Vittoria, de los que se presentan esculturas conocidas junto a otras que no se habían mostrado anteriormente al público.
El recorrido permite que los aficionados al arte y los visitantes puedan acercarse y percibir diferentes técnicas escultóricas y materiales, lo que subraya tanto el valor estético en un contexto histórico-artístico que muchas veces había elegido sobre todo la pintura en el arte veneciano. Encontramos diferentes tipologías pero sobre todo una gran calidad a la hora de esculpir o modelar. Además esta exposición ejerce de guía para que los visitantes a Ca’ d’Oro puedan continuar la visita en diferentes iglesias y museos venecianos, admirando lo que allí se expone después de disfrutar del conjunto expuesto en este palacio gótico que alberga la muestra.
Una de las mejores piezas es San Lorenzo, una terracota de Donatello, realizada hacia 1440 y que entra en diálogo con el busto de Andrea Briosco, Madonna en trono. Y más adelante se pueden observar un relieve en mármol de San Sebastián cerca de una pintura con el mismo santo de Andrea Mantegna, uno de los símbolos de la colección de Giorgio Franchetti expuesto en Ca’ d’Oro.
Posteriormente, ya en el siglo XVI una escultura en mármol de Antonio Lombardo, La muerte de Lucrecia, datada hacia 1508-1516, que fue descubierta en una colección europea en 2020 y que se expuso en Colnaghi Nueva York el pasado año. En ella se representa a Lucrecia, flanqueada por una mujer y un hombre mayor, quizás su padre. Y cerca un Apollo de Antonio Minello y Cleopatra de Giammaria Mosca, de comienzos del siglo XVI.
El clasicismo está presente en las esculturas sagradas de Giovanni Battista Bregno su Cristo resucitado, algo que también comparte la figura alegórica de Antonio Rizzo, antes de pasar a otra de las piezas maestras, San Juan Bautista, una terracota que esculpió Benedetto da Rovezzano en Florencia durante el tiempo que Leonardo, Miguel Ángel y Rafael trabajaron en la capital toscana y que revela su magisterio con este material para conferir a esta composición una gran belleza. Y por último, una serie de bustos patricios en bronce, que expresan un nuevo modo de entender el retrato conmemorativo en una sociedad como la veneciana, tan oligárquica y republicana, que en el caso de Alessandro de Vittoria terminó inspirándose en los ideales de Roma, fijando la imagen de importantes prohombres de la República de Venecia como Marino Grimani, Tommaso Rangone, y Francesco y Domenico Duodo, ambos datados en 1596.