Durán ofrece una Lucrecia del Maestro de las medias figuras
Saldrá a pujas el jueves 25 y por apenas 4.000 euros en una licitación con otras obras para el mercado extranjero
(Si quiere ver los resultados de la subasta, pulse aquí)
La pasada semana, en nuestro artículo sobre el cuadro del joven Ribera que se vendió en Francia por 1.820.0000 euros (ver), comentamos la existencia de un desconocido Maestro del Juicio de Salomón al que se le fueron atribuyendo obras de calidad hasta que, años más tarde, Papi demostró que se trataba de la producción del joven José de Ribera, el Españoleto.
En un terreno relativamente similar se mueve el autor escondido aún bajo el nombre del Maestro de las medias figuras (femeninas), llamado Master of the Female Half-Lengths. La voz del Museo del Prado no aporta gran cosa (ver), más allá del origen de su nombre, por su habitual manera de presentar a sus estereotipadas jóvenes, de medio cuerpo, su cercanía por su dulzura a la última pintura de Brujas y de Adriaen Isenbrandt y Ambrosius Benson en particular, y su intento de relacionarlo con más o menos éxito con los pintores Lucas de Heere, Hans Vereycke e incluso con el pintor francés Jean Clouet.
Sin más datos, poco pueden avanzar siquiera los especialistas. Lo cierto es que salen al mercado piezas suyas con una notable variedad de calidad y, consecuentemente, sus precios oscilan con demasiada holgura por lo que más de uno piensa en un maestro y en otros que podrían ser seguidores, copistas, etc. de calidad variable. En este sentido, puede ser clarificador ver el listado de obras de su mano ofrecidas en los últimos años en Sotheby’s (ver) y en Christie’s (ver), por citar sólo a las dos más importantes salas. Sus dos piezas mejor pagadas hasta el momento fueron las 866,500 GBP pagadas en julio de 2014 en Sotheby’s Londres por un exquisito María Magdalena sosteniendo el bote de ungüento (ver) y las 479,650 GBP de julio de 2002 en Christie’s Londres por La Magdalena tocando el laúd (ver).
Pues bien, como de este Maestro de las medias figuras Durán ofrece en portada una atractiva tabla con Lucrecia (53 x 40,5 cm; lote 47), comprada en febrero de 1989 en Sotheby’s Londres. La calidad es evidente, pero también la necesidad de una buena limpieza que quite los repintes y barnices recogidos a lo largo del tiempo, devuelva las carnaciones originales y quizá consiga sacar a la luz la pintura original en el cabello, la mejilla y el ojo derechos, y restituir el volumen adecuado a las telas. Desde luego, la tabla promete por su calidad y por los apenas 4.000 euros pedidos de inicio, que deberían subir a cifras ya de más importancia.
Quizá de la misma colección sean otras tablas y lienzos de una calidad superior. Me refiero a una sencilla tabla de regusto antiguo de Kerstiaen I de Keuninck, Paisaje con peregrino en oración (46 x 34 cm; 48), comprada en Sotheby’s Montecarlo en diciembre de 1988 (lote 621, pág. 31), que se ofrece por 2.000 euros y que no sería tampoco extraño que subiese algunas pujas. Más interesante me parece la del belga Mathys Schoevaerdts, Paisaje con personajes (O/T, 23 x 34 cm; 49), comprada también en Sotheby’s Mónaco, y que saldrá desde los 7.000 euros. Dorotheum Viena ha adjudicado varias escenas similares (ver), pero ésta presenta una cantidad de personajes gracias a la especie de carroza real y su séquito y una composición sobresalientes; lógico será también que suba sin problemas a las cinco cifras…
Del holandés Thomas Wyck, un lienzo de tamaño importante (106,5 x 91,3 cm; 50) y comprado en Sotheby’s Londres en 1991, titulado Las tropas frente a la posada, que partirá desde los 12.000 euros. De Dirck van der Lisse, El baño de Betsabé (O/T, 37 x 28 cm; 52), más sencillo pero con interesante estudio de objetos, telas, etc. Y, para terminar, un grandioso Salomón y la reina de Saba (O/L, 82,5 x 125 cm; 51), de Escuela española del siglo XVIII, por 6.000 euros, que podría quizá subir también alguna puja.
Del resto de la licitación destacaría una acuarela sobre cartulina adherida a lienzo de George Wynne Apperley, Interior del Palazzo Bargello (Florencia) (61 x 97,5 cm; 97), que se ofrece por 1.500 euros. Y, también pensando en clientes extranjeros, parte del futuro inminente, un óleo sobre papel típico del cubano René Portocarrero, Catedral de La Habana, 1971 (57 x 77 cm; 125), por 10.000 euros. Daniel Díaz @Invertirenarte