Dos tablas de Gregorio Martínez en Fernando Durán
Fechadas en 1596, se ofrecen por 100.000 euros en la subasta de los días 11 y 12 de junio
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Gregorio Martínez (Valladolid, 1547-1598) es un pintor del que apenas se conocen datos (ver y artículo de Martín González, aquí) pero, gracias a sus pocas pero magníficas obras documentadas, los especialistas lo consideran como la personalidad más importante del último renacimiento en Valladolid. De hecho, la web del Museo del Prado no tiene una pequeña biografía suya y sólo comenta el único lienzo de su mano que posee, un impresionante Ticio encadenado (ver).
Las dos tablas que ofrece Fernando Durán, Adoración de los pastores y Adoración de los Reyes Magos (69 x 84 cm c/u; lote 596), fechadas en 1596, aparecen documentadas en el contrato que firma el pintor con el banquero Fabio Nelli el 14 de mayo de 1596, por el que se compromete a hacer un retablo dedicado a la Anunciación (firmada, actualmente se encuentra en el Museo de Escultura de Valladolid, ver, resto del artículo, con otra tabla de Gregorio Martínez, aquí, y más documentación sobre la capilla, aquí), además de pintar las paredes de su capilla dentro del convento de San Agustín de Valladolid. En la parte inferior de ese retablo, habría cuatro escenas de la infancia de Cristo, dos de las cuales son las que se presentan ahora. Y al decir de Jesús Urrea, que recoge la ficha de catalogación de estas obras, “presentan un excelente dibujo y sus figuras acusan una marcada monumentalidad resolviendo sus actitudes con una sutil delicadez que se ve acompañada por un colorido dulce, y al mismo tiempo, frío”.
La calidad de las mismas, el hecho de estar fechadas, documentadas y de haber pertenecido a uno de sus mejores conjuntos, quizá hagan que se interese el Estado por su compra… En el mercado, para poder valorar los 100.000 euros pedidos, sólo apareció en mayo de 2007, un San Bruno (O/T, 45,5 x 30,5 cm), adjudicado en Ansorena por 12.000 euros, la salida, y en marzo de 2013, Millon & Associés SAS vendió por 5.200 euros un bello dibujo atribuido a su mano, La imposición de la casulla a san Ildefonso (15 x 19 cm; ver).
Los otros destacados en pintura antigua serían una tabla de roble con San Jerónimo penitente (86 x 64,5 cm; lote 567), de Ambrosius Benson, que se ofrece por 30.000 euros -una similar y ligeramente más pequeña fue vendida en esta sala en mayo de 2014 por 60.000 euros, la salida-; y dos paisajes de Ignacio de Iriarte, Esaú vendiendo la primogenitura a Jacob y Jacob recibiendo la bendición de Isaac (O/L, 97 x 125 cm c/u; lotes 543 y 544), por 5.000 euros cada uno.
La gran apuesta de la pintura de los maestros clásicos, por decirlo de alguna manera, es el lienzo tardío del filipino Fernando Amorsolo, que firma en 1961 La vendedora de frutas (O/L, 60 x 80 cm; lote 818). Ya conocemos cómo se las gastan los coleccionistas filipinos con este tipo de piezas, y más cuando representan un modo de vida tradicional filipino ya desaparecido; por eso las pujas deberán partir desde los 50.000 euros. Un similar Under the tree, 1961 (O/L, 51 x 66,5 cm), se vendió en Sotheby’s Hong Kong en octubre de 2017 por 67.768 euros (ver éste y otros). Leon Gallery vendió en diciembre de 2016, La siega, 1961 (O/L, 61 x 81 cm; ver) por 70.752 euros, y en septiembre de 2015, Under the mango tree, 1958 (O/L, 62 x 87 cm; ver), por 75.840 euros.
Pasamos al siglo XX, la gallina de los huevos de oro de Fernando Durán, donde hay dos piezas especialmente importantes. La primera: un bronce con las típicas suaves formas ya cercanas a la abstracción del zamorano Baltasar Lobo: Femme assise, 1986 (6/8, 94 x 63 x 28 cm, con sello de la fundición “Marque Bonvicini, Verona”; lote 65). Pieza importante de sus últimos años, con la experiencia de lo ya sabido, expuesta en París en la galería Daniel Malingue (Lobo, 1988) y en Caracas en la galería Freites (Baltasar Lobo, 2005), se piden 80.000 euros. Un ejemplar 8/8, (83 cm; concebida en 1968 y fundida en 1989) se vendió en Sotheby’s Londres en junio de 2008, poco antes del estallido de la crisis, por 79,250 GBP (100.227 euros; ver), a cierta distancia de los 59.750 euros pagados en Christie’ Madrid en octubre de 2004 (ver). Un ejemplar como el que sale ahora (95,2 cm altura), pero 2/8 (concebido en 1968 y fundida en 1988), se vendió en Christie’s Nueva York en diciembre de 2014 por 173,000 USD (ver).
La segunda: un impresionante óleo sobre soporte semiesférico giratorio de madera de la alemana Katharina Grosse: Disc-painting, 2008 (111 cm diámetro; lote 101). Procedente de Marlborough Fine Art, de Londres, con unos trazos mucho más amplios que los habituales, pero con sus mezclas características, se piden también 80.000 euros. Si no recuerdo mal, Fernando Durán ha vendido ya tres piezas suyas: en noviembre de 2015, por 45.000 euros (ver), en abril de 2007 por 35.000 euros (ver), y en marzo pasado por 130.000 euros (ver), así que ésta tiene todos los visos de venderse igualmente.
En este apartado internacional, vean Forms, 1987 (gouache, 38 x 57 cm; 100) de Sol Lewitt, por unos no fáciles ya, 23.000 euros (Sin título, 1985 se vendió en Alcalá en octubre de 2017 por los 18.000 euros pedidos; ver).
Por último, no se pierdan el lienzo de Juan Genovés, Fuego III, 2004 por 16.000 euros (ver), el atractivo Cosa cierta que nos mienta, 1998 de Luis Gordillo por 40.000 euros (ver), y la Red Flower, 1987 de José María Sicilia por 15.000 euros (ver), en otras. Les recomiendo ver también la amplia oferta de atractivos y buenos papeles de Chema Cobo, de Guillermo Pérez Villalta, de Gordillo, etc. La oferta es grande y atractiva, pero el espacio limitado. Daniel Díaz @Invertirenarte