Una Mariana de Neoburgo atribuida a van Kessel II en Segre
Sale a pujas por 25.000 euros en la cita de los días 29 y 30 de octubre donde se subastan cuadros de la casa-palacio del Marqués de Viluma
Poder ver las obras en las casas donde llevan ubicadas generaciones y generaciones aporta un plus de interés a la subasta, hay que reconocerlo. Al lado de tapices y cortinajes, con muebles a su alrededor, paseando sobre alfombras… Probablemente en origen el cuadro con el Retrato de la reina Mariana de Neoburgo como viuda, 1701-1706 (O/L ovalado, 81 x 61,5 cm; lote 333 y ver), atribuido al pintor de Amberes Jan van Kessel II y procedente de una colección francesa, y que ofrece Segre, estuvo en otro palacio, junto a obras regias. De hecho, la reina aparece retratada de luto, en su exilio toledano, tras la muerte de Carlos II, su esposo, el 1 de noviembre de 1700 (ver).
Para la especialista Gloria Martínez Leiva @Investigart, del querido blog de los barrocos, posiblemente se trate de uno de los prototipos del pintor que, como tal, debió ser utilizado para la miniatura del Museo de Artes decorativas de Madrid. En la restauración se pudo apreciar, cuenta, que la fina cadena del cuello y del escote tapa un antiguo collar de perlas; se quería potenciar con este cambio la correcta imagen de sobriedad de la reina viuda para su difusión por las monarquías europeas… No hay abundantes retratos de Mariana, y menos vestida de luto, así que los 25.000 euros pedidos para iniciar las pujas pienso que lo hacen especialmente atractivo para una compra del Estado, que dio a conocer este mismo miércoles pasado su compra para el Prado por más de 500.000 euros de La procesión de gigantes en Bruselas el 31 de mayo de 1615, de David Noveliers, encargo de los archiduques Alberto de Austria e Isabel Clara Eugenia (ver y ver).
De Jan Peeter Brueghel y Gonzales Coques se ofrece una atractiva Orla de flores con retrato de caballero, c. 1660 (O/L, 110 x 83 cm; 213), adquirido en 1907 en Dorotheum, Viena, y posteriormente de la colección del anticuario H. M. Cramer, La Haya, 1947. Aunque no sepamos la identidad del retratado, de Gonzales Coques, la calidad de las flores habla de la mano de Brueghel. Su salida, 15.000 euros. Por 6.000 euros se ofrece también un interesante Retrato de noble dama neerlandesa, c. 1640-1660 (O/L, 46 x 35,5 cm; 278), de Cornelis Janssens van Ceulen, en opinión de Sabine van Beek, conservadora de la RKD (Instituto Neerlandés para la Historia del Arte).
En cuanto a nuestros artistas, lo más interesante es, sin duda, los tres óleos bajo cristal que se ofrecen del pintor mallorquín Pedro Cotto. Conocido y valorado en la Corte y familias importantes, saldrán a pujas tres decorativos caprichos arquitectónico con escenas bíblicas -firmados los tres, y dos de ellos fechados en 1695-, con ecos de Lorena y Giner. Importante adición a su catálogo, se trata de Capricho arquitectónico con Epifanía (54,5 x 71 cm; 51), Capricho arquitectónico con Visitación, 1695 (56 x 70,5 cm; 52), y Capricho arquitectónico con Huida a Egipto, 1695 (54 x 70 cm; 53), por 50.000 euros los dos primeros y 20.000 el tercero, por estar en peor estado de conservación.
Y un Retrato de Felipe V vestido a la española, c. 1701 (O/L, 76 x 60,5 cm; 399), con estudio de Gloria Martínez Leyva, que lo asigna a Antonio Palomino. Con etiqueta en el reverso de la Junta Delegada de Incautación (de la colección de la condesa de Floridablanca), sale a pujas desde los 15.000 euros de inicio.
Del siglo XIX, no se pierdan el gran Retrato de don Vicente Ferrer del Alcázar y Vera de Aragón, XII conde de Requena, 1845 (O/L, 217 x 140 cm; 331), de José de Madrazo. En pie, de cuerpo entero, es pintado ataviado con armadura medieval y con el manto capitular de la Orden de Alcántara, emulando a su antepasado Gómez Manrique de Lara, I Señor de Requena y Adelantado Mayor de Castilla, con la catedral de Burgos al fondo como cabeza de Castilla y del Adelantamiento. 18.000 euros pide la sala por él, ligeramente por encima de los 15.000 euros ofrecidos en esta misma sala, en mayo de 2022, por Retrato de caballero (O/L, 71 x 56 cm; ver y ver), que había estado expuesto en la Fundación Botín y en el Museo de Historia de Madrid. No sé si es pura ilusión mía, pero no me importaría que el Estado se hiciera con este espectacular retrato…
Del siglo XX, y en beneficio de la Fundación Aladina, se ofrecen tres piezas de calidad e interés. La primera, una construcción en chapa de acero pintado de Jorge Oteiza: Homenaje al estilema vacío del cubismo, 1996 (escrito por el artista B10/45, edición sin numerar de al menos 6 ejemplares, 25 x 29 x 38 cm; 1292), del que hay una variante en tamaño monumental Homenaje al estilema vacío del Cubismo/ momento espiritual, en el Parque Yamaguchi, de Pamplona. Su precio, 8.000 euros. La segunda, un temprano lienzo de Miquel Barceló: Sin título,1981 (O/L, 100,5 x 81,7 cm; 1293), pintado en abril de ese año, con sus típicas figuras zoomórficas de esos años, aunque sin el color estridente característico apenas un poco más tarde. Lo malo son los 35.000 euros pedidos, por una obra que sólo los muy coleccionistas del mallorquín podrían decir que es de su mano… Y la tercera, un papel de grandes dimensiones de Luis Gordillo: Mirada, 1987 (A/papel/T, 144 x 158 cm; 1504), con adelantadas para 1987 meándricas células que serán características en su obra posterior. Adquirido directamente al artista por el propietario actual, y expuesta en 1988 en la galería Joan Prats, de Barcelona, se piden 16.000 euros.
De 1958 no se pierdan un asombroso lienzo de Gustavo Torner, Pintura con graffitis, 1957-58 (látex, arena, óleo y graffitis infantiles/L, 114 x 87 cm; 1060), con evidentes ecos a la vanguardia europea al más puro estilo Brassai; comprado al artista por el propietario actual y sabiendo que no es una pieza más del conquense, deberá comenzar desde los 9.000 euros. De 1972, vean la tabla de Lucio Muñoz, Tum X (Tm/T, 81 x 100 cm; 1069); con etiqueta de la galería Juana Mordó, de Madrid, y expuesto en 1998 en la Fundación Barrié de la Maza, A Coruña (15 contemporáneos del Paso), se esperan al menos 15.000 euros. Y de 1974, apenas dos años después, una obra completamente diferente: Sin título. Serie figura imposible, 1974 (pintura sintética sobre madera, 100 x 100 x 5 cm; 1076), de José María Yturralde, por 14.000 euros.
En el ámbito más internacional, dos recomendaciones: el lienzo matérico del mexicano Bosco Sodi, Sin título, 2009 (Tm/L, 148 x 150 cm ; 1125), por 21.000 euros. Y de Dan Graham, una grandiosa composición con espejos, típica de su mano: Pavilion influenced by Moon Windows (Variation E), 2017 (acero inoxidable y espejos, 1/3, 124,8 x 102,48 x 91,5 cm; 1122), con certificado de galería Filomena Soares, de Lisboa firmado por el artista, 26.000 euros. Gran calidad. Daniel Díaz @Invertirenarte
