117.000 euros por los lienzos de Sorolla y Regoyos en Ansorena

Darío de Regoyos. Marina (San Vicente de la Barquera), 1910. Salida: 28.000 euros. Remate: 48.000 euros

117.000 euros por los lienzos de Sorolla y Regoyos en Ansorena

Muy gratamente sorprendidos por las cifras obtenidas en la subasta online


 

Expectantes estábamos por los resultados de la primera subasta tras el confinamiento. La de Segre del 6 de mayo, con afanes solidarios y apenas 28 lotes, había recaudado 288.000 euros (ver). Lo sorprendente es que la de Ansorena, pospuesta desde marzo, regrese a sus cifras mensuales, como si nada hubiera ocurrido entretanto… Veremos qué sucede la próxima semana con la de Durán (ver).

En nuestro artículo de previos (ver), señalamos la importancia de dos piezas que podríamos definir como clásicas del inicio del siglo XX. La primera era la de Joaquín Sorolla, un autor que cada año interesa más al mercado nacional e internacional y cuyos precios, por tanto, continúan subiendo. Se trataba de Hombre con casco (O/L, 77 x 55 cm; lote 443), una composición sencilla y sin demasiadas pretensiones que, con el certificado de Blanca Pons-Sorolla, partía de unos atractivos 38.000 euros y que, como se esperaba, subió finalmente hasta los 48.000 euros de remate. Más interés despertó entre los coleccionistas la Marina, 1940 (O/L, 46 x 55,5 cm; 446) del asturiano Darío de Regoyos; adquirida directamente al artista, esta vista de la costa de San Vicente de la Barquera subió de los 28.000 euros iniciales hasta los más lógicos 48.000 finales.

En un segundo nivel, sin duda debemos mencionar las ventas de otros nombres que rondan a estos primeros, y cuyos remates no dejan de sorprender en estos inciertos tiempos. Me refiero a los 40.000 euros ofrecidos –los pedidos- por la Manola, c. 1915 (O/L, 83 x 65 cm; 445), de Ramón Casas; a los 28.000 euros, de nuevo los pedidos, por la atractiva Playa con barcas (O/L, 60 x 102 cm; 442), de Eliseo Meifrén; a la esperada subida del nacarado lienzo de Raimundo de Madrazo, Retrato de dama (O/L, 71 x 57 cm; 453), de 15.000 a 20.000 euros; y a los 19.000 euros ofrecidos, a cierta distancia de los 11.000 pedidos, por Marcha de infantería (O/L, 50 x 100,5 cm; 452), de José Cusachs. Menor importancia tuvo a la postre el lienzo del sevillano Manuel García y Rodríguez, Las aguadoras (O/L, 70 x 44 cm; 447), que subió ligeramente, de 14.000 a 16.000 euros.

En la segunda mitad del siglo XX también hubo buenas ventas. La más destacada fue la del lienzo del ecuatoriano Oswaldo Guayasamín, Máscaras. La crueldad. Serie Huacayñan, 1950/3 (O/L, 63 x 89 cm; 506), que forma parte del tríptico sobre la configuración de Ecuador como Estado; de 40.000 a 42.000 euros, comprado quizá por un coleccionista más internacional. Algo de ello hubo quizá también en la lógica subida, hay que reconocerlo, hasta los 15.000 euros, del aguatinta con carborundum de Joan Miró, L’Oustachi, 1978 (47/50, 138 x 96,5 cm; 596), que partió de 8.500 euros.

Si por una parte debo reconocer mi alegría por los 27.000 euros en que se remató la buena tabla de Eduardo Naranjo, Mujer soñando el mar, 1983 (O/T, 92 x 72 cm; 622), no puedo tampoco ocultar mi desilusión por los cinco táblex de Juan Barjola de alta calidad (lotes 615 a 619; 50,5 x 38,5 cm), preparatorios para la carpeta de serigrafías Tauromaquia y destino; por 5.500 euros se ofrecía cada uno y sólo se vendió el último, por 6.500 euros. Y manifiesto mi sorpresa por los 18.000 euros en que se adjudicó la acuarela con grafito de Óscar Domínguez, Composición, c. 1950 (40,5 x 52,5 cm; 629).

Terminamos con la pintura antigua y las compras del Estado. Lo más destacado fue el  tapado que partía de apenas 2.000 euros y que tras unas cuantas pujas llegó hasta los nada menos que 34.000 euros; me refiero a la Vanitas, 1702 (74 x 61,5 cm; 161), firmada y fechada por Edwaert Collier, con etiqueta de la Sala Parés. La tabla de Santa Lucía y Santa Catalina (O/T, 66 x 70 cm; 152), atribuida al palentino Maestro de Benito, se adjudicó por los 5.000 euros pedidos. Y por último, las compras del Estado: tres sencillas y pequeñas acuarelas de Valentín Carderera (lotes 86, 87 y 88, ver), que se adjudicaron por 300, 300 y 360 euros, respectivamente.

En resumidas cuentas, tras este parón de coronavirus, y para tranquilidad de más de uno, se sigue y se seguirá vendiendo. Como suele ocurrir, habrá coleccionistas compradores de lo importante que esté en un precio digamos un poco atractivo o no desorbitado, y para las oportunidades. No hay que olvidar que esto del mercado del arte hace referencia al lujo -en distintos niveles, claro-, y siempre hay gente no tan necesitada… Daniel Díaz @Invertirenarte

Joaquín Sorolla. El hombre del casco. Salida: 38.000 euros. Remate: 48.000 euros
Raimundo de Madrazo. Retrato de dama. Salida: 15.000 euros. Remate: 20.000 euros
Edwaert Collier. Vanitas, 1702. Salida: 2.000 euros. Remate: 34.000 euros
Darío de Regoyos. Marina (San Vicente de la Barquera), 1910. Salida: 28.000 euros. Remate: 48.000 euros
Oswaldo Guayasamín. Máscaras. La crueldad. Serie Huacayñan, 1950-53. Salida: 40.000 euros. Remate: 42.000 euros
Ramón Casas. Manola, hacia 1915. Salida y remate: 40.000 euros
Eduardo Naranjo. Mujer soñando el mar, 1983. Salida: 25.000 euros. Remate: 27.000 euros