José Gutiérrez Solana. Procesión en Ávila, 1943-1945, detalle. Salida: 130.000 euros
UNA IMPRESIONANTE PROCESIÓN DE SOLANA EN BALCLIS
La cita del 15 de marzo se completa con piezas de Anglada Camarasa y Ramón Casas, y un dibujo de Keith Haring.
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No deja de ser gracioso que en el marasmo que vivimos estos días, entre los robos porcentuales y los deportivos de la actualidad, una obra del madrileño José Gutiérrez Solana (1886-1945) sea la pieza más destacada de la licitación catalana por excelencia, Balclis, de la próxima semana. Hay que reconocer que hace tiempo que no salía al mercado nacional una tan espectacular como Procesión en Ávila (O/L, 142 x 116 cm; lote 1780), todo un magnífico ejemplo de su visión de la España negra, profunda, típica de Castilla, metáfora de alguna manera de la sociedad y las creencias españolas de aquel momento. Realizada al final ya de su carrera, entre 1943 y 1945, titulada y localizada en Ávila, muestra dos cofradías en diferentes planos, con las imágenes de Cristos y Vírgenes dolientes de Semana Santa, y los cofrades, hombres silenciosos que miran y portan velas, todo plagado de negros y tonos que consiguen introducir la tristeza sin palabras hasta los rincones más profundos del alma.
La última obra similar, Procesión en Santander (O/L, 104 x 80 cm), se vendió en Durán allá por diciembre de 2004 por la salida, 150.000 euros, pues por su mejor Procesión de Semana Santa (O/L, 103 x 146 cm) se pidieron en Sotheby’s Londres en junio de 2010 nada menos que 300,000 GBP (357.900 euros) y quedó sin encontrar comprador. Recordemos que recientemente, en octubre de 2015 para ser exactos, el Reina Sofía compró en Balclis La murga gaditana (O/L, 100 x 80 cm; ver) por los 130.000 euros pedidos, en la línea de los 120.000 euros pagados en Segre en diciembre de 2011 por un más colorista Máscaras (murga). Músicos, 1938 (O/L, 46 x 38 cm). Y aunque alguno pueda pensar que no son tiempos buenos para este tipo de pintura, tan radical y quizá incluso confesional –el Bodegón de la coliflor (O/L, 63 x 72,5 cm) se vendió la semana pasada en Setdart por apenas 30.000 euros (ver), por debajo de las 30,000 GBP pedidas en Sotheby’s Londres en diciembre pasado-, lo cierto es que obras de esta calidad y calibre son (o eran) más habituales en el mercado londinense y, por tanto, parece claro que es una verdadera oportunidad que más de uno intentará aprovechar.
Si avanzamos hacia la actualidad, hay que mencionar sin duda el papel realizado por el famoso grafitero Keith Haring con tinta sumi-e sobre papel: Sin título (57,2 x 72,5 cm; 1887). Fechado en 1982 en el reverso, y con etiqueta de las galerías Barbara Farber de Ámsterdam y René Metras de Barcelona, es pieza característica de su mano. Gamberro y transgresor en los asuntos, trasladó el dibujo a una categoría superior, ya fuese pintado en el metro, en una pared o en un papel, haciendo de la línea que bucea en lo esencial algo típico del final del siglo pasado y que, de alguna manera, ha recogido Julian Opie, más comercial y alegre. Lo único malo son los 90.000 euros pedidos, que no será una venta fácil. Y es que dos de Phillips vendidos en esos precios, por poner dos ejemplos, de la conocida serie Subway Drawing, son bastante más grandes: por 85,000 GBP (ver) y por 86,500 GBP (ver).
Ya que estamos, no se pierdan el conjunto de doce técnicas mixtas sobre papel, Originales para el Llibre de fusta, 1984 (22 x 29,5 cm c/u; 1865) de Jaume Plensa por 8.000 euros, o el muy interesante óleo sobre papel pegado a tabla de Joan Ponç, Sin título, 1947 (68 x 48 cm; 1867), por apenas 5.000 euros. Y los dos lienzos de la búlgara Sultana Souroujon, Retrato de mi hermana Sophie con una flor, 1930 (O/L/cartón, 80 x 65 cm; 1757) por 15.000 euros, y su más tardío Desnudos femeninos (O/L, 73 x 63 cm; 1759) por 20.000 euros, que subirán como subió Una joven (O/L, 68,2 x 76 cm) en mayo de 2015, que pasó de 6.000 a 17.000 euros.
Pero retrocedamos ya por fin a la pintura que trajo la modernidad… De Hermenegildo Anglada Camarasa, la sala ofrece dos tablas interesantes: Olivera. Pollença (37,7 x 50,4 cm; 1679), con ficha de catalogación de Fontbona y Miralles, por 34.000 euros, por debajo incluso de los 42.191 euros pagados en marzo pasado en Hotel des Ventes de Geneve, titulado como Huerta de Pollensa. Mallorca. Y un típico aunque menor Paisaje desde Montserrat, entre 1937 y 1939 (23,7 x 33 cm; 1680), por 12.000 euros, comprado quizá en Lamas Bolaño en julio de 2015 cuando se ofreció por 8.500 (ver).
Y de Ramón Casas, tres buenas piezas, todo sea dicho. De la primera, Chula con pañuelo azul, 1898 (O/L, 73 x 46,5 cm), escribí en mayo de 2014, cuando salió a pujas en Sotheby’s Londres, lo siguiente: “pertenece a la pequeña serie de chulas, chicas procedentes de Madrid, pintadas entre 1896 y 1900. De tamaño medio, es un retrato de tres cuartos donde destacan la ligereza de las pinceladas, los matices de los blancos y el magnífico contraste con el azul del pañuelo. El único pero que se puede objetar es la alta estimación: 150,000 a 250,000 GBP (182.000-303.000 euros)”. Ahora partirá desde los 130.000 euros, más asequibles, indudablemente, para esta pieza soberbia, y con el aliento de su venta en esta misma sala en diciembre pasado de Joven con mantón (O/L, 76 x 66 cm), que subió de 100.000 a 170.000 euros, hasta hacer un total de 207.026 euros (ver).
De su mano también Galería de Sant Benet de Bages, c. 1929 (O/L, 67 x 76,5 cm; 1643), por 55.000 euros, cercanos a los 46.000 euros pagados en esta sala en octubre de 2013 por una buena Casa desordenada, c. 1890 (O/L, 55 x 46 cm). Y un papel con mucha calidad como Una joven (44 x 57 cm; 1628), carboncillo y pastel, pero que partirá de unos ya fuertes 18.000 euros.
Y, a vuelapluma ya, tres referencias más. La primera, sencilla, pues se vendió su pareja, una Vista del canal de Iztacalco o De Yndia y Español producen Mestiza (O/L, 49,3 x 81,4 cm), de Escuela mexicana del siglo XVIII, en diciembre pasado por los 65.000 euros (ver). Ahora, De Mestiza y Español produce Castiza (O/L, 48,6 x 81,4 cm; 1527), de Escuela mexicana del siglo XVIII, por otros 65.000 euros. Un gouache sobre vitela firmado por el toledano del siglo XVII Ambrosio de Salazar, que representa una delicada Anunciación (20,5 x 15 cm; 1483), que sigue los modelos escurialenses con gran calidad, por 10.000 euros. Y, por último, dos probables segundas ediciones de Los Proverbios (lote 1538; 25.000 euros), de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, ¿1875?, y Los Caprichos (1539; 20.500 euros), de la Calcografía Nacional, ¿1821-1836?, de Francisco de Goya. Vean con detalle el catálogo, porque Balclis siempre ofrece muchas obras interesantes… Daniel Díaz @Invertirenarte