Una tabla de Juan de Juanes con la Virgen de la Esperanza en Segre
Será ofrecida el 20 de marzo por 100.000 euros
(Si quiere ver los resultados de la subasta, pulse aquí)
La sorpresa por la grata noticia de la aparición en el mercado de una tabla con una magnífica Virgen de la Esperanza (O/T, 89 x 64 cm; lote 66) de Juan de Juanes (c. 1507-1579), saltaba a la prensa como importante primicia hace unas semanas y Ars Magazine se hizo eco rápidamente con un artículo dedicado a ella donde se daban algunos detalles como la procedencia, derivaciones y su relación con un dibujo del Museo Nacional del Prado de otra Virgen sedente, c. 1555 (ver).
Con el Evangelio de Lucas abierto en sus manos, narrando precisamente la Encarnación del Verbo, de donde derivaría el nombre de Virgen de la Esperanza, y una especie de arco iris al fondo, la pintura parece moverse entre la delicadeza en el dibujo y en el color de Rafael y su rotundidad habitual, con una composición eminentemente frontal y de cierta rigidez, que irá abandonando progresivamente a lo largo de los años.
Los 100.000 euros en que se ofrece en Segre son, sin duda, una cantidad ya importante. En este sentido, más que acudir a piezas de su mano que se han vendido en los últimos años a precios muy inferiores, debemos recordar la espectacular venta en mayo del 2012 en Alcalá Subastas cuando su Adoración de los Reyes Magos, c. 1540 (O/T, 67 x 58 cm), procedente de la colección Lacave, que había salido a pujas por 90.000 euros, se remató por nada menos que 400.000 euros; era, eso sí, una composición más atractiva y, al decir de la sala “excepcional por su complejidad compositiva, su dibujo correctísimo, la extraordinaria calidad en su ejecución y su prístino estado de conservación” (ver). Sus otras grandes ventas me temo que son de hace ya demasiados años: de noviembre de 1998, cuando Sotheby’s Madrid vendió por 48.052 euros San Miguel y el dragón (O/T, 170 x 140 cm), y de abril de 1999, cuando la misma sala adjudicó por 180.195 euros otra Adoración de los Magos (O/T, 91 x 61 cm).
Le acompañan en esa sección de pintura antigua otras dos piezas interesantes. Virgen de la Antigua en su advocación del Rosario (O/T, 219 x 159 cm; 65), de Escuela sevillana del siglo XVII, por otros ya importantes 40.000 euros, y un lienzo inédito de José Antolínez, que funcionaría no como obra terminada sino a modo de boceto de pieza terminada desconocida también, con la Magdalena penitente (O/L, 61 x 83,5 cm; 71), por 7.500 euros.
Si nos trasladamos al siglo XX, dos paisajes figurativos. El primero, una obra temprana de Rafael Zabaleta, Paisaje, c. 1931 (O/L, 54 x 65 cm; 190), procedente de la galería Biosca y expuesta en 1968 en Alicante y en 1971 en Barcelona, se ofrece por 19.000 euros, un precio nada fácil en los últimos tiempos incluso para sus últimas y típicas obras… Y Tierras rojas, 1976 (O/L, 60 x 73 cm; 185), de Benjamín Palencia, que salió varias veces en Durán desde los 40.000 euros en diciembre de 2016, y ahora aquí por 19.000 euros.
Me detengo, eso sí, con dos piezas sencillas y delicadas, que no son fáciles de ver en el mercado. La primera, un Autorretrato a tinta (25,3 x 18,4 cm; 239) de Marc Chagall; realizado en 1929 sobre la portada de la revista Sélection. Chronique de la vie artistique, nº VI, con certificado del Comité Marc Chagall y procedente de la galería Guillermo de Osma, por 7.500 euros; firmado y dedicado. La segunda, un dibujo a lápiz de Joaquín Torres García, Constructivo con pez y barco, 1943 /14,5 x 19,6 cm; 240), con certificado del nieto, Marcos Torres Andrada, por 6.500 euros.
Probablemente haya más interesados, como parece lógico, en tres obras relativamente importantes, realizadas entre 1966 y 1979. La primera, de 1966, es un Hombre caído (Tm/papel, 51 x 72 cm; 254) de Manolo Millares; comprado en febrero de 2010 en Christie’s Londres por 25,000 GBP (28.457 euros), se ofrece ahora a pujas con una salida desde unos 19.000 euros mucho más atractivos. De 1975 es una espectacular tela de César Manrique, Enterrado en jable (Insecto calcinado) (Tm/L, 200 x 165 cm; 268), que comenzará las pujas por 27.000 euros, una cifra a la que no ha llegado ninguna pieza suya en el mercado secundario. Recordemos en este sentido, que se remataron en Ansorena por los 20.000 euros de la salida 30.000 años después, 1977 (Tm/L, 165 x 200 cm) en noviembre de 2016, y por 19.000 euros, tras salir por apenas 5.000 euros, Burbuja roja, 1973 (Tm/L, 116 x 89 cm), en diciembre pasado. Y la tercera, de 1979, una pintura sobre cartulina, Crucifixión (70 x 100 cm; 255), de Antonio Saura; ofrecida en esta sala por 40.000 euros en diciembre pasado, ahora lo intenta por segunda vez desde 31.000 euros…
Por último, junto a las obras de Rafael Canogar (271, 8.500 euros), Bonifacio (276, 9.500 euros), Andres Nágel (287, 4.500 euros) o José Hernández (295, 6.000 euros), vean con cierto detenimiento el dibujo de Claudio Bravo, Paisaje (grafito, 31 x 40 cm; 330) fechado en 1977, por 1.600 euros, que debería subir, y la buena aunque nada complaciente fotografía de Alberto García Alix, Los Malheridos. Autorretrato, 1988 (8/10, 70 x 68,8 cm; 332), por ya 8.000 euros… Daniel Díaz @Invertirenarte
