Esteban Vicente, Sin título, 1995, detail

Segre, entre Valdés Leal y Esteban Vicente

En la cita del 17 de septiembre se ofrece un Ecce Homo del sevillano por 30.000 euros y un lienzo del segoviano de 1995 por 33.000 euros


Segre es la primera sala en comenzar la nueva temporada, con su cita apenas dos semanas después de la vuelta al tajo, con el rumor de las olas y de las escapadas aún en el recuerdo.

En su cada vez más amplia oferta (500 lotes en esta licitación), del mundo de los maestros antiguos sobresale un Ecce Homo (O/L, 108,5 x 85 cm; lote 125), del sevillano Juan de Valdés Leal (1622-1690). Se trata de un lienzo que muestra a un casi estoico Jesucristo, con la corona de espinas clavada, la túnica sobre su espalda, una suerte de rama por cetro y sin apenas rasgos de haber sido flagelado, que es mostrado al pueblo por Pilatos, con la conocida expresión de Ecce homo (Aquí tenéis al hombre). Encima de su cabeza, unas palabras latinas escritas ‘Dum spinis pungi tolerat’, hacen referencia al suplicio sufrido sin culpa. Son palabras extraídas del himno de la fiesta de la corona de espinas (eliminada posteriormente), compuesto por el maestro de capilla de la catedral de Sevilla (entre 1617 y 1642), el portugués Francisco de Santiago. Obviamente, algún devoto que conociera ese himno debió encargar la pintura al sevillano.

Más allá de estas interesantes consideraciones, la obra de gran calidad -el informe de Valdivieso habla del momento de “total plenitud creativa”- se ofrece por 30.000 euros, cifra en torno a la que se han movido sus últimas ventas en esta misma sala. Así, en julio pasado, su Visión de san Francisco en la Porciúncula, c. 1672/1680 (O/L, 63 x 47 cm), se adjudicó por los 25.000 euros ofrecidos (ver); en diciembre pasado, su Calvario (O/L, 106 x 75 cm), se adjudicó también por los 20.000 euros pedidos (ver), mientras su Piedad (O/L, 159,5 x 111 cm), subió de 30.000 a 70.000 euros en julio de 2023 (ver). Y en diciembre de 2002, su Aparición de Cristo a san Ignacio camino de Roma, 1662 (O/L, 129 x 99 cm; ver), que se terminó adjudicando por 44.000 euros.

Si avanzamos en el tiempo, del siglo XVIII se ofrece un lienzo de Pierre Jacques Auguste Volaire, Justa en el puerto de Toulon celebrado con motivo de la coronación de Luis XVI en junio de 1775 (O/L, 91 x 138 cm; 68), por 17.000 euros, por debajo de los 25.000 euros en que se ofreció en mayo pasado (ver). Y así llegamos a la pintura finisecular, a 1899 en concreto, cuando el no especialmente conocido gijonés Buenaventura o Ventura Álvarez Sala pintó su Herradores (O/L, 170 x 225 cm; 160), presentado con La rifa de la xata a la Nacional de Bellas Artes de ese año, obteniendo este último medalla de tercera clase. El que nos ocupa, los Herradores, obtuvo la medalla de oro en la Exposición regional de Gijón de 1899 y fue escogido para cartel del certamen. Con ecos velazqueños, un especial interés por lo social y reseñado por Javier Barón en su libro sobre el pintor de 2021, la obra se ofrece por 85.000 euros, a bastante distancia de su mejor venta hasta el momento: Campesinos del Lacio en el estudio del anciano pintor, 1901 (O/L, 111,5 x 150 cm), vendida en esta misma sala en diciembre de 2017 por 20.000 euros.

Y llegamos al siglo XX, con varios platos fuertes, pero donde sobresale el lienzo de 1995 de Esteban Vicente: Sin título (O/L, 126 x 106 cm; 378), con certificado de procedencia de The Harriet & Esteban Vicente Foundation de Nueva York. Pintura a base de campos de color, y más en esa época más tardía, el juego de los distintos tonos verdes y otros campos hace que la mirada se mueva del primer plano al fondo -más desvaído, con colores más claros-, creando así la profundidad buscada. Los 33.000 euros de inicio de las pujas son los mismos pedidos en febrero pasado por Radiant space, 1995 (O/L, 91 x 122 cm), que terminó adjudicándose por 44.000 euros (ver). Fuera de nuestro país, en Larsen Art Auction, en Scottsdale, Estados Unidos, Radiance, 1994 (O/L, 127 x 106 cm; ver), se vendió por 39,000 USD (35.524 euros) en abril de 2023, y Untitled, 1998 (O/L, 132 x 106 cm; ver), por 34,375 USD (34.940 euros), en octubre de 2022.

Me parecen especialmente atractivas otras dos piezas. La primera y por 19.000 euros, una malla de Manuel Rivera, Tiritaña XIII, 1975 (81 x 65 x 6,5 cm; 367) que, dada su calidad, estuvo presente en cuatro muestras -dos de ellas itinerantes por medio mundo, como quien dice. Y un lienzo de 1985 de Soledad Sevilla, Oscuras flores de duelo, 1985 (O/L, 133 x 146 cm; 383), procedente de la galería Soledad Lorenzo donde se expuso, por 16.000 euros. Si nos atenemos a ambas calidades, merecerían subir.

Por último, los papeles. El más espectacular, el de Jaume Plensa, de 1991, inmenso, arrugado y con esos tonos oscuros característicos de esos años: Continents XXVI (pintura, carboncillo, collage y esmalte, 202 x 186 cm; 403), por 19.000 euros. De Pablo Palazuelo, dos: Sin título, 1999 (tinta y lápiz, 45,5 x 22,5 cm; 381), en blanco y negro, por 13.000 euros, y Circino II, 2001 (gouache en negro y amarillo, 50 x 35 cm; 382), por 15.000 euros. Y de Esteban Vicente, un buen collage, colorido y luminoso de 1970: Sin título (25,5 x 30,5 cm; 366), por 4.800 euros, que subirán. Daniel Díaz @Invertirenarte

Juan de Valdés Leal, Ecce homo. Salida: 30.000 euros
Juan de Valdés Leal, Ecce homo. Salida: 30.000 euros
Manolo Rivera, Tiritaña XIII, 1975. Salida: 19.000 euros
Manolo Rivera, Tiritaña XIII, 1975. Salida: 19.000 euros
Ventura Álvarez Sala, Herradores, 1899. Salida: 85.000 euros
Ventura Álvarez Sala, Herradores, 1899. Salida: 85.000 euros
Soledad Sevilla, Oscuras flores de duelo, 1985. Salida: 16.000 euros
Soledad Sevilla, Oscuras flores de duelo, 1985. Salida: 16.000 euros
Esteban Vicente, Sin título, 1995. Salida: 33.000 euros
Esteban Vicente, Sin título, 1995. Salida: 33.000 euros
Pablo Palazuelo, Circino II, 2001. Salida: 15.000 euros
Pablo Palazuelo, Circino II, 2001. Salida: 15.000 euros