Las matrices de Goya recuperadas en la Academia de San Fernando
El Gabinete Francisco de Goya, presentado con su nueva iluminación el pasado viernes en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, muestra una selección de 41 matrices y otras tantas reproducciones digitales en alta calidad de las correspondientes estampas de Francisco de Goya (1746-1828), tras su proceso de desacerado. La Calcografía Nacional conserva 228 planchas de cobre, de las que 101 ya se han desacerado, para la conservación preventiva de las láminas de cobre, que ahora recuperan su esplendor tal y como las concibió el genio aragonés. Obras de arte en sí mismas.
El director de la Real Academia de San Fernando, Tomás Marco, celebró que se pudiera presentar esa selección de matrices tras su proceso de recuperación preventivo y recordó que tanto Goya, Durero y Rembrandt hacían las planchas ellos mismos y eso les confería un valor añadido. El proyecto de restauración cuenta con el patrocinio de la Fundación Ibercaja y el espacio que alberga el Gabinete Goya, diseñado por los arquitectos Correa y Milá, abierto en 1990, ha sido renovado con criterios museográficos gracias a la generosidad de M&G Investments.
El académico Juan Bordes ha dirigido el proyecto para la conservación de las matrices calcográficas de Goya, que ha contado con la asesoría científica de Lucia Ghedin, conservadora de matrices del Istituto Centrale per la Gráfica di Roma, que ha transferido los conocimientos técnicos para que el proceso haya sido un éxito, siguiendo el mismo criterio que ellos hicieron en Roma con las matrices grabadas de J.B. Piranesi.
Bordes calificó el proyecto como ‘Goya a cobre descubierto’ y hemos visto en esta recuperación la lucha con el material y mencionó que tanto en el Bobalicón, aguafuerte nº 4 de Los Disparates como en la plancha nº 37 de Los Desastres de la guerra notaron que ‘el efecto pila’, con la humedad o por los cambios de atmósfera, respectivamente, se empezaban a perder datos de las mismas y se veía un deterioro progresivo por lo que se decidió que era el momento de preservar las planchas para conseguir un efecto estético reparador.
El proceso de restauración comenzó a primeros de 2023 sobre las 80 planchas calcográficas de Los Caprichos, aunque previamente dichas piezas fueron analizadas por Laura Alba, restauradora del Museo Nacional del Prado, para ir viendo qué capas metálicas recubrían dichas matrices de cobre: niquel o cromo, entre otras.
Una vez analizados dichos estudios, la restauradora de la Real Academia de San Fernando, Silvia Viana, ha ido ejecutando el método de la conservadora italiana, para ir actuando sobre más de un centenar de matrices y las que restan hasta concluir el trabajo. Señaló que el estado de las planchas no es homogéneo y que una vez recuperadas las matrices con el desacerado, el objetivo es que se conserven mejor en el tiempo y que podamos admirarlas tal y como las concibió Francisco de Goya.
En la sala central del Gabinete Goya, con una cuidada iluminación, el recorrido comienza con tres planchas de Los cuadros de Velázquez (1778) con los retratos de Diego de Acedo, Sebastián de Morra y el bufón Barbarroja, y continúa con una selección de Los Caprichos (1797-1799), un período de madurez con ejemplos como Que viene el coco, están calientes, Aquellos polvos, El sueño de la razón produce monstruos, Ensayos o Mejor es holgar, entre otros.
De Los Desastres de la Guerra (1810-1815) hay nueve matrices con sus reproducciones digitales como el citado nº 47, de un gran verismo, verdadera reflexión y alegato contra la violencia; y concluye con nueve ejemplos de La Tauromaquia (1814-1816), una serie bastante estable que no será abordada totalmente en el proceso de recuperación por encontrarse en buen estado según Silvia Arana. Son imágenes que desconciertan por ese lenguaje de gran intensidad entre dos seres que se enfrentan a la muerte.