Casi 225.000 euros por los Maella en Abalarte
Vendidos los siete óleos de su mano y los dos cobres atribuidos a Pourbus, la venta más importante de esta memorable cita con la colección de Barrero y Blanco fue, sin embargo, el del círculo de Trevisani
Con nuestros dos artículos de previos, uno dedicado a los óleos de Mariano Salvador Maella (ver) y el otro al resto de la subasta (ver), ya anunciábamos de alguna manera que la subasta de Abalarte era algo más que interesante. Y la realidad lo ha demostrado.
La figura principal finalmente fue, como era de esperar, Maella. Se ofrecían seis bocetos para los Reales Sitios y una Inmaculada; y los siete se vendieron, cinco en la subasta del martes con ligeras subidas y los dos últimos en la postventa nada más terminar, por el mismo precio de salida. Es cierto que no se esperaban cifras millonarias, por lo que se ofrecía, porque la situación tampoco está para tirar demasiados cohetes, con una crisis en ciernes, y porque los coleccionistas de esta pintura disminuyen casi cada día. La sorpresa fue, en cambio, la pasividad del Estado que ni apareció por la sala, y que al día siguiente, martes ya, declaró inexportables todos los bocetos de Maella, con el consiguiente asombro primero, e incomodidad después, de los coleccionistas que habían comprado esas piezas. Imagínese su reacción, si usted -por poner un ejemplo, que vive en Londres y compra, uno de esos bocetos por 40.000 o 30.000 euros, más comisiones e impuestos, para ponerlo en su casa-, recibe al día siguiente una llamada de la sala explicándole que el Estado ya no le va a dejar sacar su flamante compra del país… Un desastre.
Vamos con las ventas. El número uno fue, al final, el modelo tridimensional para el Comedor o Sala de María Luisa de la Casita del Labrador de Aranjuez, La diosa Cibeles ofrece a Ceres sus producciones, 1797/8 (O/T, 47 x 56 x 10 cm; lote 76); perteneció a la colección de José Lázaro Galdiano y, como parecía lógico, subió de 40.000 a 45.000 euros. No es habitual que se conserven ese tipo de modelos sobre tabla y menos aún en tan buen estado; lo malo, como me comentó un coleccionista que no quiso pujar por este lote, es que no puede conservarse en sitios demasiado secos porque con la sequedad del ambiente la madera se abre y se puede estropear fácilmente…
El número dos fue La apoteosis de Apolo y Atenea, 1788/90 (O/L, 60 x 102 cm; lote 149), el segundo boceto de presentación destinado a la Pieza de colgadura de terciopelo de la Casita del Príncipe en El Pardo. Aunque había habido interés en el extranjero por la obra, y fue publicada en prensa, porque no se conservan más bocetos para este espacio y porque perteneció al Marqués de Soto Aller, finalmente hubo un solo pujador que se hizo con ella por los 40.000 euros pedidos. Por el tercero, Alegoría de la Aurora en su carro del Sol acompañada por la Mañana, 1803/7 (O/L, 53,5 x 54 cm; lote 181), preparatorio para el Dormitorio de Carlos IV en el Palacio Real de Aranjuez, sí hubo más interés: al tratarse del único modello para dicho espacio y que la bóveda desapareció durante las intervenciones de Isabel II en Aranjuez, subió de 30.000 a 37.500 euros.
Por el cuarto y el quinto, no hubo lucha y cada uno fue adjudicado por la salida al coleccionista al teléfono: Apolo con los Cuatro elementos, 1803/6 (O/L, 41 x 52 cm; lote 160), boceto de presentación –el único que se conoce- de la Sala de Billar de la Casa del Labrador de Aranjuez, por 30.000 euros, y La Paz asiste a Marte, 1804 (O/L, 34 x 48 cm; lote 200), alegoría para uno de los gabinetes de la biblioteca de Carlos IV en el Palacio Nuevo, por 12.000 euros. Y los dos de la postventa, por 10.000 euros cada uno: Alegoría de la Victoria y la Fama de la Monarquía Hispana, 1788 (O/L, 38 x 31 cm; lote 110), preparatoria para la Escalera principal de la Casita del Príncipe de El Escorial, tercera concebida por Maella, y la Inmaculada Concepción ante Dios Padre y acompañada del arcángel san Miguel, década de 1790 (O/L, 43 x 34 cm; lote 34).
Así pues, la venta de los óleos de Maella asciende a 184.500 euros, a los que se debe sumar el 21% de la comisión de la sala y los impuestos, 38.745 euros, que hacen un total de 223.245 euros.
Antes de pasar a otro bloque, mencionemos rápidamente los 20.000 euros ofrecidos por la Real Academia de San Fernando por el cuadro atribuido a Francesco de Mura, Escena de la vida de Alejandro Magno (O/L, 125,5 x 104 cm; 159), que no es sino el ejercicio definitivo para la obtención de la beca como pensionado a Roma en 1758 de José del Castillo (ampliar la información). Por 15.000 euros se adjudicó Jael (no Ester, como se sugería en la catalogación) (O/L, 33 x 26 cm; 56), de Vicente López, y en postventa la Alegoría del Amor a la Virtud (O/L, 130 x 94 cm; 129), de Felipe López, se adjudicó por los 20.000 euros pedidos.
La otra gran atracción eran los dos cobres atribuidos a Frans Pourbus el Joven, del Archiduque Alberto de Austria e Isabel Clara Eugenia (O/cobre, 11 x 8,5 cm; lote 84). Cualquiera que haya podido verlos al natural habrá disfrutado de su calidad y detalle, verdaderamente soberbios. Intercambio rápido de pujas entre dos coleccionistas al teléfono, y en un suspiro subir de los 40.000 euros de inicio hasta rematarse por 47.500 euros. Era como abrir una espita por la que fueron desfilando posteriormente grandes remates.
Veamos los más destacados. Por terminar con el cobre, Paisaje frondoso con las tentaciones de Cristo (14,5 x 19 cm; lote 210), del Círculo de Abraham Govaerts, pasó de 2.000 a 6.500 euros. De las esperadas vitelas: la primera, de Jacobo I de Inglaterra con sombrero negro y la insignia de la Orden de la Jarretera (4,2 x 3,4 cm; 77), atribuida a Nicholas Hilliard, duplicó su precio al pasar de 6.000 a 12.000 euros; la segunda duplicó también su precio, al pasar de 4.000 a 8.000 euros; me refiero a la Escena de la vida de Job (9 x 13,5 cm; 63), atribuida a Johan König; y la tercera, de Alessandro Guglielmi, Retrato de Carlos III de medio cuerpo (13,5 x 10,5 cm; 35), que se adjudicó por los 4.000 euros de la salida. Y las miniaturas propiamente dichas, sobre marfil: a 5.500 euros subió el Retrato de dama joven vestida con chal (8,5 x 7 cm; 49), de Luis de la Cruz, y a 4.250 euros el Doble retrato de Carlos IV y María Luisa de Parma de medio cuerpo, él con el Toisón y ella con la banda de la Orden fundada por ella, 1802 (8 cm de diámetro; 178), del pintor de cámara de SSMM como firma Jean-Jacques Guillaume Bauzil Koc.
Comentados estos dos amplios bloques, es hora de mencionar la mejor de las ventas y sus compañeras de viaje, porque a todo esto aún queda bastante adjudicado por comentar… Como decíamos al inicio, la obra mejor vendida fue ante el asombro de la sala un lienzo que se ofrecía como del Círculo de Francesco Trevisani, Escipión Emiliano (¿?) meditando sobre las ruinas de Cartago con la escultura de Marco Autilio Romulus sobre un pedestal (O/L, 87 x 114 cm; lote 16), que se ofrecía por 8.000 euros y fue subiendo poco a poco entre dos coleccionistas al teléfono hasta rematarse por unos sorprendentes nada menos que 65.000 euros. Se nos escapa el posible autor que debía ser bastante claro para lo que fueron subiendo las pujas hasta esas cifras.
Seguimos con pintura extranjera, primero francesa y luego italiana. Por los 40.000 euros de la salida se adjudicó el Entierro de Manon Lescaut, 1878 (O/L, 69 x 99 cm; lote 130), del francés Pascal-Adolphe Dagnan-Bouveret, reproducción autógrafa del original expuesto en el Salón de 1878; del también francés Pierre Dupuis, su gran desnudo femenino a modo de El rapto de Psique (O/L, 139 x 216 cm; 111), subió de 10.000 a 16.000 euros.
Respecto a lo italiano: por 20.000 euros se remató la Vista de Roma con el Panteón de Agripa (O/L, 72 x 110 cm; 128), del Círculo del Maestro de las Vistas de la fundación Langmatt; por 18.000 el Capricho de monumentos romanos con figuras y obelisco griego (O/L, 130 x 137 cm; 113), de Escuela de Giovanni Paolo Panini; y por 10.000 euros, la Vista del Gran Canal con la iglesia de Santa Maria della Salute (O/L, 46,5 x 70,5 cm; 127), del Círculo de Michele Marieschi.
Al día siguiente, fueron los 16.000 euros de la salida los ofrecidos por el Perseo liberando a Andrómeda (O/L, 64 x 81,5 cm; 662), del holandés de Breda, Dick van der Lise. En cuanto a lo español, que habíamos comentado en el artículo de previos con cierta largueza, dos ventas: la del Patio sevillano, 1908 (O/L, 45 x 30 cm; 764), de Manuel García y Rodríguez, que subió de 15.000 a 16.000 euros; y la de Regreso de la pesca (O/L, 100 x 80 cm; 845), de Enrique Martínez Cubells, por los 18.000 euros de la salida. El primero fue comprado en Sotheby’s Londres en noviembre de 2006 por 48,000 GBP (71.055 euros; ver), mientras por el segundo se pagaron en noviembre de 2005 en la misma sala, Sotheby’s Londres, la cantidad de 38,400 GBP (56.844 euros; ver). Como se deduce de forma rápida y sencilla, por decirlo de forma breve, quince años después no estamos ni de lejos en esas cifras…
Artículo largo y detallado para hacer justicia a una subasta que recordaremos así que desde aquí nuestra enhorabuena a la sala. Daniel Díaz @Invertirenarte