22.000 euros en Segre por un papel de José Guerrero
En la cita del martes 6, destacaron también las inesperadas subidas de los lienzos de Yturralde y Pepe Hernández, y la fotografía de Ballester
Por mucho tiempo que uno lleve en esto, viendo y escribiendo sobre subastas en España y en el extranjero, hay cosas que a uno le siguen sorprendiendo y que, en el fondo, no termina de comprender.
Podría hablar de bastantes cosas, pero la última ha sido la venta en Segre del óleo sobre papel de José Guerrero, Sin título, 1979 (63 x 48 cm; lote 234). Salía a pujas por 11.000 euros, un precio atractivo para el mercado por lo que le previsible era que subiese algunas pujas, como comentamos en nuestro artículo de previos (ver). Y efectivamente así sucedió, alternándose las pujas entre una coleccionista en sala y la defensa desde la mesa de una puja por escrito, hasta rematarse en favor de la de la sala por nada menos que 22.000 euros. Hasta aquí, nada extraño, ¿verdad? Pero, ¿y si recordase que esa misma pieza se ofreció en esta misma sala en octubre pasado por 13.000 euros y no hubo interesados? Sí, efectivamente, algunas veces –pocas- suceden cosas sorprendentes…
En este sentido hay que mencionar, sin duda, la inesperada subida del lienzo de José María Yturralde. Si en diciembre pasado su Galaxia, 1965 (O/L, 158,5 x 108,5 cm) se vendió en la postventa en Fernando Durán por 13.500 euros (por debajo de los 17.000 euros iniciales pedidos), los 15.000 euros que se pedían en Segre por Estructura roja, 1989 (Pintura y barniz/L, 220 x 220 cm; 251) parecían ajustados; pero el tamaño y la potencia de los colores entusiasmaron a más de uno, y las pujas se fueron a los 22.000 euros, la otra gran venta de la tarde.
Dos sorpresas más en la obra contemporánea. La primera, la espectacular fotografía de José Manuel Ballester, Golden Gate 4, 2008 (impresión digital sobre papel Hahnemülle, 1/3 (+1PA), 219 x 149 cm; 305), subió de 8.800 a 10.000 euros, adjudicados a una puja previa por escrito (lo mismo: en febrero pasado se había ofrecido por 9.500 euros y no había habido interesados). La segunda, una alegría, pero más sorprendente aún: el lienzo de José Hernández, Alma malvada, 1973 (O/L, 81 x 65 cm; 220), con su extraña figuración habitual, subió de 10.000 a 11.000 euros. Y en menor medida, los 19.000 euros pagados por Au le jardín, 1973 (O/L, 73 x 92 cm; 187), de Emilio Grau Sala, que no dejan de ser una cantidad importante, pero que están lejos de las cantidades pagadas por estas obras antes de la crisis (no en vano, en mayo pasado se pidieron por ella 26.000 euros)…
En cuanto a las esculturas, que también habíamos mencionado en el artículo, debemos citas las ventas interesantes: Erasmo IV, 1988, el acero cortén de Amadeo Gabino de nada menos que 205 x 45 x 27 cm (233), se adjudicó por los 10.000 pedidos, lo mismo que sucedió con la resina de 120 x 130 x 40 cm (lote 224), del santanderino Manuel Raba, Sin título, 1975, pero por los 6.000 euros iniciales.
En pintura de cambio de siglo, el regionalista Mujer con canasta (O/L, 69 x 99 cm; 175), del valenciano Teodoro Andreu, subió hasta los 6.500 euros. Y en pintura antigua, un tapado… ¡De 400 a 4.000 euros subió el San Jerónimo (O/L, 61 x 44 cm; 53), de Escuela genovesa del siglo XVII! Daniel Díaz @Invertirenarte
