Un gran lienzo de Úrculo en Durán
Pintado en 1984, saldrá a pujas por 18.000 euros en la cita de los días 24, 25 y 26 de junio
Eduardo Úrculo (1938-2003) fue, en su día, hace ya algunos años, uno de los más valorados dentro de la figuración española como, Cristóbal Toral o Eduardo Naranjo, por citar sólo dos nombres especialmente relevantes de los setentas y de los ochentas y salvado, como parece evidente, el caso de Antonio López. Me temo que casi todos han caído en un olvido, cuando no en un rechazo expreso, por parte de los coleccionistas, verdaderamente llamativo. Cambio de gusto, diríamos, pero también un cierto hartazgo localista, añadiría yo, por no haber podido traspasar nuestras fronteras.
Del bilbaíno Úrculo, Durán ofrece un decorativo lienzo Sin título, 1984 (O/L, 120 x 140 cm; 345), por 18.000 euros. Pintura sencilla y amable, con ciertas reminiscencias del pop y del puntillismo, lo cierto es que sus personajes de espaldas terminaron por ser, como sus sombreros y sus referencias eróticas, todo un signo de identidad personal, pero que terminó agotándose en su propia simplicidad.
De ese mismo año, 1984, en enero de 2020, la sala adjudicó por 12.000 euros Sillas en Villa Mundi, 1984 (A/L, 140 x 162 cm; ver), que había iniciado las pujas desde 8.000; en diciembre de 2021, El beso, 1997 (O/L, 90 x 90 cm; ver), subió de 4.500 a 9.000 euros, a cierta distancia de los 18.000 euros ofrecidos, en septiembre de 2017, por New York. El abrazo, 1997 (O/L, 162 x 140 cm; ver). De 1984, Segre adjudicó por 14.000 euros Abrigos y sombrero (O/L, 145 x 125 cm), allá por octubre de 2019, por debajo de los 17.000 euros en que se adjudicó en febrero pasado su Sillón, 1979 (A/L, 140 x 120 cm; ver).
De la segunda mitad del siglo XX, me parece especialmente interesante la sección de obra gráfica que la sala viene ofreciendo puntualmente cada mes. Para los amantes del papel es una verdadera oportunidad, aunque tantas veces son atractivos precios de inicio son superados con creces por los distintos coleccionistas, con la consiguiente decepción de los no ganadores…
De 1977 es el colorido y simplificado ya lienzo de Benjamín Palencia, Palacio de la Roda (O/L, 60 x 73 cm; 457); sin ser obra que vaya a ser recordada, los 7.000 euros de inicio sí podrían ser atractivos para algún coleccionista de su mano.
En la pintura finisecular debemos mencionar el lienzo de José Navarro Llorens, con una enternecedora escena de Primeros pasos en la playa de Valencia (O/L, 66,5 x 80 cm; 550); con su colorido habitual, a base de pequeñas pinceladas especialmente presentes en el primer plano, se piden ya 18.000 euros, no fáciles. En línea cercana, también por lo valenciano, se proponen dos lienzos de José Benlliure: Aldeano valenciano. El tío Millares (O/L, 51 x 61 cm; 551), por 3.000 euros, y la tablita más abocetada Valencianos en el patio de la posada (O/T, 22 x 32 cm; 552), por 4.500 euros. Y de José Pinazo Martínez, el hijo del poco valorado aún Ignacio, Joven valenciana con abanico y mantilla (O/L, 94 x 70 cm; 553), con evidentes ecos de Zuloaga, por 6.000 euros. Y una paleta de Mariano Bertuchi, con tres Escenas marroquís, 1899 (O/T, 46,5 x 64 cm; 1611), y una cuarta de Carlos Moreu; salida, 7.000 euros.
Para terminar, el siglo XVIII. De la colección del pintor Ángel Oliveras y ofrecidos el día 26, no se olviden de los dos bocetitos con bastante calidad de Francisco Bayeu: San Mateo y San Lucas, c. 1791 (O/L, 36,5 x 16,5 cm y 36 x 14 cm, 1609), “modelettos” al óleo de los frescos del oratorio de Carlos IV, en el Palacio de Aranjuez, por 20.000 euros; no son baratos, pero su calidad… Y de Vicente López, una atípica pero muy interesante Inmaculada, c. 1848 (O/L, con marco de época imperio, 68 x 54,5 cm; 1610); José Luis Díez, en el tomo II de su Catálogo razonado, recoge con el número P-76 (p. 784), una bastante semejante. Su salida: 12.000 euros. Daniel Díaz @Invertirenarte