Una mirada al Romanticismo español

Una mirada al Romanticismo español

La galería Caylus presenta una exposición que reúne a los grandes nombres de la pintura decimonónica con los autores que coparon el panorama cultural nacional durante la primera mitad del siglo XIX. Casi medio centenar de obras de Madrazo, Tegeo, Esquivel o Pérez Villaamil, entre otros, componen este paseo por los Rostros y miradas del Romanticismo español.


Francisco Lameyer y Berenger. Caravana en el desierto. Hacia 1865-1870. Óleo sobre lienzo. 41 x 60 cm. Imagen cortesía de galería Caylus.

Se trata de una selección de obras –muchas de ellas inéditas– realizadas en nuestro país entre el segundo y el tercer tercio del siglo XIX. Son pinturas que reflejan algunos de los géneros más cultivados durante este periodo, con el retrato como protagonista indiscutible, pero sin olvidar el subgénero de la pintura infantil y otras categorías como el paisajismo, las composiciones mitológicas, escenas de batalla o el costumbrismo.

Entre los artistas presentes, nombres de sobra conocidos como José de Madrazo y su hijo Federico, Rafael Tegeo –a quien el Museo del Romanticismo dedicó una gran retrospectiva–, Genaro Pérez Villaamil o Eugenio Lucas Velázquez.

También otros que quizá estén menos representados en las colecciones públicas, pero no por ello desconocidos como Bartolomé Montalvo, discípulo de Zacarías González Velázquez; Miguel Parra, pintor de cámara de Fernando VII; o Manuel Castellano, a quien debemos buena parte de la colección de dibujos de la Biblioteca Nacional de España, que engrosan el mayor legado de dibujo antiguo de dicha institución.

Todos ellos ilustran la realidad de la pintura española durante el Romanticismo, ese periodo convulso que incluye la Guerra de la Independencia española, el breve reinado de José Bonaparte, el regreso al absolutismo de Fernando VII y el Trienio Liberal. Fueron unas décadas en las que la Academia de San Fernando marcó el estilo oficial, con un Federico de Madrazo como referente indiscutible y otros académicos como Gutiérrez de la Vega o Esquivel.

Vicente López Portaña. José Higinio Arche. 1841. Óleo sobre lienzo. 114,6 x 87,3 cm. Imagen cortesía de galería Caylus.

El recorrido, organizado en torno a varios salones y pasillos de la galería madrileña, tiene como eje principal el retrato y la evolución que este vivió a lo largo de las tres décadas que distan entre José Higinio de Arche (1841) de Vicente López y la figura de cuerpo entero de la mujer de Ricardo Balaca de 1873.

Nos encontramos así ante un paseo por la alta sociedad decimonónica, desde célebres personajes como el general Prim o José Zorrilla, hasta familias aristocráticas como Bertrán de Lis Espinosa de los Monteros.

Entre las telas inéditas, destaca La actriz María Escribano de José de Madrazo, pintura que podría ser la que el artista realizó en Barcelona entre finales de 1817 y principios de 1818, cuando hizo sendos retratos de busto de la actriz y su marido Manuel Gracia de la Prada.

Federico de Madrazo y Kuntz. Vicenta Beltrán de Lis Espinosa de los Monteros. 1845. Óleo sobre lienzo. 115 x 87 cm. Imagen cortesía de galería Caylus.

Varias composiciones religiosas y mitológicas demuestran que no todo fue retrato oficial durante el Romanticismo. De hecho, la obra más antigua es una Vista de Madrid con el Palacio Real desde el oeste de Bartolomé Montalvo, conocido sobre todo por sus paisajes (precisamente Fernando VII le nombró pintor honorario de cámara en este género, cargo que le permitió viajar por Valencia, Murcia y Cataluña). Frente a estas vistas representadas con tanta fidelidad, Genaro Pérez Villaamil supone el contrapunto perfecto al apostar por imágenes más evocadoras y literarias. Y fuera del arte canónico, cabe mencionar las escenas populares y costumbristas donde Leonardo Alenza brilló con luz propia. Aunque el autor que mejor supo aprovechar el legado del maestro aragonés fue, sin duda, Eugenio Lucas Velázquez, cuya Pareja de majos (1861) ilustra todo ese mundo de flirteo y galanteo castizo.

Rostros y miradas del Romanticismo español podrá verse hasta el 8 de abril. Sol G. Moreno

Francisco Lacoma y Fontanet. Niño con perro. 1828. Óleo sobre lienzo. 47 x 37 cm. Imagen cortesía de galería Caylus.
Valeriano Bécquer. Muchachos comiendo fruta. 1862. Óleo sobre lienzo. 168 x 126 cm. Imagen cortesía de galería Caylus.
José Gutiérrez de la Vega y Bocanegra. La Reina Gobernadora vestida a la velazqueña. 1838. Óleo sobre lienzo. 142 x 112 cm. Imagen cortesía de galería Caylus.