25.000 euros por el Indio de Juan Luna en Goya
Junto a una Inmaculada de Escuela madrileña, destacó la venta de un lienzo de José Hernández
Una vez más, hemos visto que lo previsto se ha cumplido. Esta vez se trataba del lienzo Indio igorrote (lote 129) del filipino Juan Luna en Goya Subastas. En nuestro artículo de previos (ver), comentamos que “a pesar de sus apenas 24 x 18 cm, y por tanto con una definición no excesiva, no sería extraño en absoluto que subiese bastantes pujas pues ya conocemos el impulso y la fuerza económica de los asiáticos…”. Dicho y hecho; como nuevo rey Midas, todo lo tocado con el nombre de Juan Luna o con la etiqueta de filipino de cierta calidad, ha disparado su precio. En este caso, desde los atractivos 6.000 euros iniciales hasta los 25.000 finales, que siendo ya una interesante cantidad creo que habla más de las dudas de algunos compradores de otras piezas filipinas en esta misma sala que de la seguridad en su compra…
De época cercana, la colección de acuarelas preciosistas españolas se vendió sin grandes ventas. La mejor fue, como era de esperar, la de Martín Rico, Jardín de Granada (38 x 73 cm; 117), adjudicada por los 2.500 euros pedidos; lo mismo sucedió, pero esta vez por los 1.500 euros de la salida, con la de Arcadi Más y Fondevila, San Marcos de Venencia (73 x 43 cm; 124). En cambio, Pueblo costero napolitano (34 x 63 cm; 125), de José Moreno Carbonero, subió de 1.500 a 1.600 euros.
Si retrocedemos a la pintura antigua, debemos mencionar otros pocos remates interesantes. El primero, sin duda, el de una atractiva Inmaculada Concepción (O/L, 209 x 153 cm; lote 55), con unos putti muy característicos, y que apareció en el catálogo escrito como de Escuela madrileña del siglo XVII y que en la web fue corregida por Escuela granadina, del círculo de Juan Niño de Guevara, siguiendo una antigua atribución (errónea, en mi opinión). Pues bien, dada su calidad, colorido, tamaño, buen estado de conservación e indefinición en la catalogación, no fue extraño que pasase de 6.000 a 8.500 euros al finalizar las pujas. La otra venta importante en esta sección fue la del lienzo atribuido esta vez al napolitano Francesco de Mura, La educación de la Virgen (O/L, 74 x 98 cm; 31), que casi duplicó su salida, pasado de 4.000 a 7.500 euros, comprado también por un coleccionista en la sala.
Por último, para cerrar este apartado, sorprendieron las subidas de dos piezas: de 2.500 a 4.750 euros la Sagrada Familia con san Juanito (O/L, 164 x 116 cm; 65), de Seguidor de Andrea del Sarto, y la Escena de Resurrección, pequeña tabla de apenas 27 cm de diámetro (76), de Escuela holandesa del siglo XVI, de 1.500 a 3.250 euros.
Terminamos con un breve repaso a la subastada colección del modisto Elio Berhanyer. La pieza más destacada fue, sorprendentemente para mí, la de José Hernández: Ausencia obliga, 1971 (O/L, 130 x 130 cm; 432), con su dibujo milimétrico típico, a medio camino entre el surrealismo y fantasía en la creación de seres; pintado en plena primera madurez, con etiqueta de la galería Iolas-Velasco de 1971, se ofrecía por 8.000 euros y en ese precio se adjudicó. La otra venta importante fue el lienzo de José Caballero, de 1968, de los matéricos ya pero sutilmente expresionista aún: Negro Orestes (Tm/L, 200 x 200 cm; 444); expuesto en la XXXII Bienal de Venecia en 1964, en otras dos exposiciones en 1991 y en 2011, y con etiqueta de la galería Juana Mordó, subió de los atractivos 5.000 euros iniciales hasta los 7.500 euros finales. Daniel Díaz @Invertirenarte