180.000 euros en Segre por la recuperada Entrada de Carlos III en Madrid de Lorenzo Quirós

Lorenzo Quirós. Ornato en la Puerta de Guadalajara, 1760. Salida: 30.000 euros. Remate: 150.000 euros

180.000 euros en Segre por la recuperada Entrada de Carlos III en Madrid de Lorenzo Quirós

Buenas ventas en la sala donde destacaron dos remates por 36.000 euros del cuadro de Zacarías González Velázquez y de un casi desconocido portorriqueño Oller y Cestero


 

Hay veces que a uno se le escapan las razonadas razones de algunos coleccionistas, pero no dejan de ser lícitas y perfectamente válidas. Y hay otras en que por mucho que demos vueltas a esas razones las encontramos muy poco convincentes. Algo de eso me sucede con la venta del cuadro de Lorenzo Quirós, Ornato en la Puerta de Guadalajara, 1760 (O/L, 111 x 165 cm; lote 77), que subastaba ayer Segre y del que hablamos extensamente en nuestro artículo de previos (ver). Me explico.

Tres coleccionistas al teléfono intentaban hacerse con una obra que perteneció a una conocida serie, propiedad de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, aunque depositada hoy en el Museo de Historia de Madrid. La pieza, relacionada con la llegada y posterior entrada majestuosa de Carlos III en esa villa, engalanada para la ocasión, estaba perfectamente documentada y perteneció a la colección de Manuel Godoy. Posteriormente se creyó perdida y, de pronto, reaparecía con un atractivo precio de apenas 30.000 euros, aunque fue declarada inexportable. Una joyita.

Y el Estado, al teléfono -para, suponemos, la Academia-, con un presupuesto aparentemente generoso si partimos del precio de salida, pero no adecuado a la realidad de la obra que se subastaba, y escaso a la postre. En la lenta subida de pujas entre los particulares se veía una adecuación más propia a la oportunidad del momento, no así en la respuesta del Estado, que participa siempre con un presupuesto cerrado. Y, en este sentido, ¿no parecería más lógico que, dada la importancia de la obra que se subastaba, fuera con un presupuesto holgado, más allá de los cien o ciento veinte mil euros que debía llevar, para pujar con la casi total seguridad de adjudicárselo, aumentar así la serie y poder depositar la nueva adquisición en un museo como el de Historia de Madrid para contemplación y deleite de todos los que lo quieran visitar?

Resumiendo rápidamente: salida por pujas escritas por 50.000 euros, pujas contra la oferta que defendía la mesa hasta los 65.000 euros, subidas hasta 120.000 euros en que se retira un coleccionista, puja por 130.000 de un segundo y por 140.000 del tercero, y última y definitiva del segundo por 150.000 euros; martillo y baja el telón. A la postre, sentimiento agridulce: alegría por la buena venta, ligeramente más allá de los racionales cálculos previos, pero sensación de tristeza y pena porque no lo ha comprado la Academia. Para cerrar el capítulo de la compra por los 180.855 euros, a casi todos los que nos dedicamos a esto desde hace años nos viene claramente un nombre a la mente (unos cuantos han pensado en el mismo y así lo han dejado por escrito en Twitter, ver), el de un gran coleccionista que ha debido comprarlo, pero por ahora no podemos confirmarlo.

Continuamos. Poco antes la tablita de Lorenzo de Ávila, Virgen de la rosa, c. 1540 (25,5 x 17,5 cm; lote 56), había subido de 8.000 a 11.000 euros, ofrecidos en la sala, y el San Juan Bautista (O/L, 115,5 x 88 cm; 59), de Pedro Orrente, se había adjudicado a un coleccionista al teléfono por los 6.000 euros pedidos.

Dos ventas importantes quedan por reseñar en lo que a pintura antigua y siglo XIX se refiere. La primera, la esperada subida desde los 15.000 euros de inicio hasta los 36.000 finales del magnífico Retrato de la hija del pintor, c. 1810 (O/L, 64,6 x 51,5 cm; lote 78), de Zacarías González Velázquez; merecía la pena esa subida por la calidad del retrato y la retratada. La segunda, fue la sorpresa de la tarde pues el portorriqueño Francisco Manuel Oller y Cestero no es autor del que hablemos casi todos los días… Y claro, su no especialmente brillante San Francisco de Paula (O/L, 65 x 53 cm; 111), que salía por 4.000 euros, nos pasó a casi todos desapercibido hasta que se disparó gracias a los teléfonos que lo subieron a los sorprendentes 36.000 euros finales. Interesantes, pero menores, fueron también: la subida de la Escena histórica del reino de Aragón, 1878 (O/L, 50,5 x 98 cm; 101), de Francisco Pradilla, de 2.000 a unos más razonables 6.500 euros; la venta por los 8.000 euros pedidos de Veduta de Venecia (O/L, 36 x 76,5 cm; 89), de Antonio Reyna, y los 7.500 euros ofrecidos finalmente por Marina (O/L, 60 x 100 cm; 109), de Baldomero Galofre.

Del siglo XX, quedé muy gratamente sorprendido por la inesperada subida desde 16.000 a los 19.000 euros finales del Bodegón del descubrimiento de América, 1941 (O/L, 62 x 74 cm; lote 189), de Pancho Cossío; comprobar que sigue existiendo interés por la obra de este buen figurativo, aunque actualmente casi olvidado, siempre es una alegría.

Más cercanos ya, en la segunda mitad del siglo XX. 21.000 euros se ofrecieron desde un teléfono por el Desnudo en ocre, 1961 (O/L, 64 x 50 cm; 196) del cubano René Portocarrero; el mismo coleccionista había comprado varios de los lotes anteriores, de autores cubanos (194 por 3.500 euros; 195 por 4.500 euros; y quizá el 198 por 3.500 euros).

La escultura de Martín Chirino, Cabeza. Crónica del S. XX, 2012 (bronce con pátina negra, 6/9, 24 x 14,5 x 22,4 cm; 222), se adjudicó a otro teléfono por los 19.000 euros pedidos. Destacaría, por último, la subida de 15.000 a 18.0000 euros del muy buen lienzo de Manolo Quejido, Espejo 5, 1983 (O/L, 200 x 175 cm; 226) y, en menor medida, de la Dánae, 1984 (O/L, 200 x 200 cm; 234), de Juan Navarro Baldeweg, que subió de 13.000 a 14.000 euros. ¡Y se me olvidaba la compra del Estado! Por 1.900 euros compró para la Residencia de Estudiantes del CSIC el Retrato de la pianista Pilar Bayona, 1935 (O/cartón, 28,5 x 25,5 cm; 187), de Alfonso Buñuel. Y así, como quien no quiere la cosa, Segre se plantó por encima de los quinientos mil euros. Daniel Díaz @Invertirenarte

Lorenzo Quirós. Ornato en la Puerta de Guadalajara, 1760. Salida: 30.000 euros. Remate: 150.000 euros
Pancho Cossío. Bodegón del descubrimiento de América, 1941. Salida: 16.000 euros. Remate: 19.000 euros
Manolo Quejido. Espejo 5, 1983. Salida: 15.000 euros. Remate: 18.000 euros
Zacarías González Velázquez. Retrato de la hija del pintor, c. 1810. Salida: 15.000 euros. Remate: 36.000 euros
René Portocarrero. Desnudo en ocre, 1961. Salida y remate: 21.000 euros
Juan Navarro Baldeweg. Dánae, 1984. Salida: 13.000 euros. Remate: 14.000 euros
Francisco Manuel Oller y Cestero. San Francisco de Paula. Salida: 4.000 euros. Remate: 36.000 euros
Martín Chirino. Cabeza. Crónica del siglo XX, 2012. Salida y remate: 19.000 euros
Alfonso Buñuel. Retrato de la pianista Pilar Bayona, 1935. Salida: 1.800 euros. Remate: 1.900 euros. Comprado por el Estado para la Residencia de Estudiantes