Un tablero Indoportugués por 85.000 euros en Alcalá

Un tablero Indoportugués por 85.000 euros en Alcalá

Magníficas ventas en esta sala madrileña, donde una vez más nos demuestran su hegemonía dentro del mercado secundario del arte en nuestro país

 

Cuando una casa de subastas ofrece un catálogo como este, sólo puede pasar una cosa, que vendan y mucho, y así lo hizo. Y es que, la gran mayoría de las piezas que nos mostraban eran de una categoría muy superior a lo que solemos estar acostumbrados. Cansados en muchas ocasiones de catálogos interminables donde los mejores lotes se pierden entre otros muy secundarios. La asistencia a estas licitaciones se convierte en un verdadero placer, donde todo se pone en valor, incluso aquellos menos importantes.

 

La calidad y singularidad de muchas de las obras hizo que se alcanzasen cifras muy superiores a sus estimaciones iniciales. Como el extraordinario tablero indoportugués (949) de ajedrez del tercer cuarto del s. XVI. Ascendiendo sus pujas hasta los 85.000 euros desde los 40.000 en que partía. Este tipo piezas eran realizados por los artesanos de Gujarat para el mercado local o para su exportación a Europa. Convirtiéndose en suma más alta de todas las artes decorativas. Seguido por la espada de presentación (486) en oro de 22 quilates y 18 quilates y diamantes engastados. Un regalo que realizó en 1962 el Reino Saudí a la delegación diplomática española, con motivo de la firma del tratado de amistad Hispano-Saudita. Comenzó en 25.000 euros y alcanzó los 60.000 en uno de los dos teléfonos que se la disputaban.

 

Gran expectación la que levantó el Cristo de plata (346), según el vaciado en bronce de Miguel Ángel,  uno de los quince que se obtuvieron de este, y que el platero italiano Juan Bautista Franconio se trajo a Sevilla desde Roma a finales del s. XVI. Montado sobre una cruz fundida posiblemente en el taller de Andrés Ocampo Guevara (Villacarrillo, Jaén, 1550-Sevilla, 1623), sobre tabla con la Virgen y S. Juan atribuida a Lesmes Fernández del Moral. Vendiéndose al teléfono por los 35.000 en que se había tasado. En plata, también destacó la venta del 465, una sopera con presentador y contraterrina neo-rococó punzonada en Francia por Pierre Fray (padre), París, h. 1850-60, con un considerable peso de 6,020 kg, logró 5.500 euros desde los 4.000 en que partía.

 

La oferta en arte oriental no era demasiado extensa, pero aún así no faltaron algunos lotes interesantes como el 946. Un tibor en porcelana china de la “Familia rosa”, Yongzheng, h. 1730, y que levantó una gran espera, hasta el punto de llegar hasta los 16.000 euros, casi 18 veces en que se había pensado su salida, unos escasos 900 euros. Algo parecido le ocurrió al 998, un bowl en porcelana china de finales del s. XVIII, montado en bronce dorado en época Napoleón III y marcado como “Boin taburet a París”. Comenzó en tan sólo 400 euros y terminó en 3.500 euros.

 

La escultura en mármol fue otro de los grandes atractivos de la jornada, en la que sobresalió la venta, como era de esperar del torso de la Escuela italiana del s. XVI (1038), bajándose el martillo en 20.000 euros, muy lejos de los 13.000 en que partía. Y es que los buenos resultados de este tipo de obras, es una constante en todas aquellas licitaciones en que se ofertan. También italiano, en este caso un León “Medici” (994), del s.XIX en alabastro tallado. Siguiendo el modelo de la “Loggia dei Lanzi” de Flaminio Vacca en Florencia. Rematándose en 3.000 euros, habiendo comenzado en 700. Excelente ejemplar también el 422, un capitel corintio de pilastra, datado el s. I d.C. en Roma, adjudicándose a una previa en la mesa por los 7.000 euros de su salida. A la postventa se ha tenido que esperar en cambio por uno de los pocos ejemplares de esta serie que no habían sido declarados inexportables, me refiero al 1042, por los 15.000 del comienzo, un capitel de la época emiral del s. IX.

 

Otra de las secciones que sorprendieron con subidas notables, fueron los relojes. Como el 311, un modelo con guarnición, destinado al mercado chino, realizado muy posiblemente en Inglaterra en el s. XVIII-XIX. Partía de 1.600 euros y terminó en 6.000. El 983 fue otro ejemplar que suscitó un gran interés, ya sólo en pujas previas comenzó en 8.000 euros, habiéndose tasado en 3.000, acabando finalmente en uno de los teléfonos en 9.000 euros. Se trataba de un reloj imperio en bronce “ormolú” en dos tonos y cincelado en el que se representaba “El carro de Telémaco guiado por Atenea”, un trabajo francés de hacía 1810.

 

El Estado se quedo por la salida de 5.500 euros, la vajilla blasonada bajo corona condal en loza fina esmaltada de Pickman, h. 1858. Recordar que esta, fue encargada a la fábrica por Camilo Feijóo de Sotomayor, con motivo de un banquete que dio en su casa de Viana del Bollo a la reina Isabel II en su visita a Galicia, acompañada del entonces príncipe Alfonso, futuro rey Alfonso XII.

 

Gratísima también la venta del 356, y que atrajo a numerosos compradores a la sala. Una guitarra clásica hecha en 1883, por Vicente Arias (Alcazar de San Juan, 1833-Madrid, 1914). Uno de los más importantes luthiers de su época, llegando a conseguir numerosas distinciones y medallas, como la obtenida en la Exposición Universal de Barcelona de 1888 y la de París. Mariano Santos @AntgOln