Un dibujo original de El Bosco en Madrid

Un dibujo original de El Bosco en Madrid

Nicolás Cortés Gallery presenta Paisaje infernal, un papel inédito en España que podrá verse en Madrid hasta el lunes. Considerado autógrafo desde 2015 gracias al Bosch Research and Conservation Project (BRCP), este dibujo de Jheronimus van Aken (hacia 1450-1516) se considera una obra temprana y podría ser el punto de partida de su imaginario de pecados y castigos.

Tres detalles de "Paisaje infernal".

 

Descubierto en 2003 y confirmada su autoría por el BRCP desde 2015, ahora se expone por vez primera en España.

Es uno de los pocos dibujos que se conservan autógrafos del maestro, que apenas firmó nueve pinturas, y posee algunos de los elementos típicos de su singular universo. Paisaje infernal llega por primera vez a España y podrá contemplarse solo durante unos días en la galería de Nicolás Cortés.

Aunque no es exactamente una novedad, porque desde 2015 se ha hablado mucho sobre esta nueva atribución –hasta entonces era considerado de círculo de El Bosco–, el dibujo no se había podido ver en nuestro país hasta ahora. Se exhibe sobre una pared de color azul oscuro, en semipenumbra, con marco y cristal, como protagonista indiscutible de la sala (donde comparte espacio con un San Jerónimo de Carducho y una terracota del joven artista Javier López del Espino, que se estrena así en la galería).

El pintor por excelencia del pecado y el infierno parece desplegar todo un repertorio de tormentos y castigos en este dibujo, como la navaja que corta cuerpos humanos, la rueda infernal, las hogueras lejanas o el pozo del abismo que se traga decenas de condenados.

La escena parece una recreación completa del Inframundo con toda su monstruosa maquinaria, muy en la línea de las ideas morales y los miedos enraizados en la Edad Media que le tocó vivir al artista, fallecido en 1516 (probablemente de cólera).

El dibujo ha permanecido en manos privadas durante siglos, por eso no se supo de su existencia hasta 2003, cuando apareció en el mercado extranjero y se ofreció en Sotheby’s Nueva York como «círculo de Hieronymus Bosch». Entonces un coleccionista anónimo lo adquirió con el convencimiento de estar comprando un original del maestro (probablemente es su actual dueño).

En 2015 el Bosch Research and Conservation Project (BRCP) lo catalogó como autógrafo y lo presentó como un «hallazgo extraordinario». Matthijs Ilsink, uno de los expertos de la institución encargada de estudiar, catalogar y revisar el corpus del pintor explicó que se trataba de «una adición de excepcional importancia para El Bosco».

Este descubrimiento de los investigadores flamencos trajo como consecuencia que Paisaje infernal se expusiera por vez primera al público en la muestra que el Museo de Noordbrabants organizó en 2016 con motivo del V centenario de la muerte del artista. En la exposición del Museo del Prado, en cambio, no se incluyó (aunque sí mencionaba de pasada en su catálogo).

Hieronymus Bosch. Paisaje infernal. Antes de 1495. Pluma y tinta parda sobre papel. 259 x 197 mm. Imagen cortesía de Nicolás Cortés Gallery.
Javier López del Espino. San Pablo ermitaño. 2022. Terracota. Imagen cortesía de Nicolás Cortés Gallery.

El dibujo regresa ahora al panorama español como una de las primeras obras de El Bosco, tal vez la más antigua, ya que se fecha con anterioridad al Jardín de las Delicias (1490-1500). Su tamaño, la riqueza de elementos representados y su estado de conservación –quizá porque no ha sido expuesto a la luz solar y se incorporó tempranamente a un álbum– lo convierten en un ejemplar de extrema rareza.

Los informes técnicos aplicados a la hoja revelan que esta pertenece a la segunda mitad del siglo XV y está fabricada con cáñamo, lino y fibra de lino, siguiendo el método más común de fabricación de papel en los Países Bajos durante el siglo en el que vivió El Bosco. Además, el reverso muestra antiguas reparaciones mediante tiras de papel extraídas de libros de contabilidad del siglo XVI con inscripciones en tinta.

La presencia del dibujo en Nicolás Cortés Gallery es, sin duda, una oportunidad perfecta para contemplarlo en directo y estudiarlo con detenimiento, antes de verlo partir hacia Budapest. Allí se expondrá en su Museo de Bellas Artes a partir de abril en Entre el Infierno y el Paraíso. El enigmático mundo de Hieronymus Bosch. Sol G. Moreno