Tal y como ha informado el museo neoyorquino, la casualidad y el buen ojo de una persona anónima han hecho posible la reaparición de una pintura del artista afroamericano en paradero desconocido desde hacía cinco décadas.
Tal y como ha informado el museo neoyorquino, la casualidad y el buen ojo de una persona anónima han hecho posible la reaparición de una pintura del artista afroamericano en paradero desconocido desde hacía cinco décadas.