En el 40 aniversario de ARCOMadrid, tan diferente de otras ediciones, llama la atención el modo de disponer las obras en los diferentes estands de la feria. Y uno de los que más atrae quizás sea el de José de la Mano en el pabellón 7 por el mural Guernica de Agustín Ibarrola (Bilbao), realizado en 1977 como homenaje a Picasso. Esta obra fue un símbolo de la reclamación del cuadro por parte de un grupo de artistas e intelectuales que, por entonces, anhelaban instalarlo en un nuevo museo construido a tal efecto en la villa de Gernika. Ahora el Museo de Bellas Artes de Bilbao ha adquirido, por la que también han ofertado algunos coleccionistas, esta emblemática obra de Ibarrola por 300.000 euros, gracias a una aportación extraordinaria de las tres instituciones fundadoras del museo, Gobierno Vasco, Diputación Foral de Bizkaia y Ayuntamiento de Bilbao.