El Museo del Prado, en el marco de su Bicentenario, y después de la magnífica muestra de Giacometti inaugurada la pasada semana en la Galería Central del Museo y en las salas de Velázquez, El Greco y Zurbarán, ayer presentó en las salas 39 y 39 A una singular exposición: El Gabinete de Descanso de sus Majestades, que reúne 48 obras, 44 de ellas pinturas, muchas de ellas restauradas con la colaboración de la Fundación Iberdrola España, que han sido seleccionadas por el comisario Pedro J. Martínez Plaza, técnico del Área de Conservación de Pintura del siglo XIX de la primera pinacoteca española, con el objetivo de evocar un espacio con la mayor parte de los cuadros que colgaron de esa sala a partir de 1828. En la estancia anexa, la 39 A, se pueden contemplar los objetos de higiene personal con ese singular mueble del retrete para Fernando VII, realizado en 1830 por Ángel Maeso, el estuche de aseo del monarca hecho en 1825 o los dos orinales de porcelana, uno femenino y otro masculino, producidos en la Real Fábrica de la Moncloa, hacia 1820-1830.