RETRATOS DE LA ALTA SOCIEDAD EN EL RIJKSMUSEUM
El pasado jueves abrió sus puertas en el Rijksmuseum de Amsterdam la exposición Alta Sociedad, que incluye 35 retratos de las personalidades más poderosos: príncipes, aristócratas excéntricos y ciudadanos ricos que encargaron la proyección de su imagen a la posteridad a los grandes pintores de su tiempo: Lucas Cranach el Viejo, Paolo Veronese, Diego de Velázquez, Rembrandt, Joshua Reynolds, Thomas Gainsborough, John Singer Sargent, Édouard Manet o Edvard Munch, entre otros, abarcando desde los siglos XVI al siglo XX. Los préstamos provienen de museos y colecciones privadas de todo el mundo, como París, Londres, Florencia, Viena y Los Ángeles, y la calidad de las pinturas permitirá observar la vida informal de los adinerados.
La muestra, que permanecerá abierta hasta el 3 de junio y que cuenta con el apoyo ING, Blockbusterfonds, FedEx y los patronos del propio museo holandés, se complementa con más de 80 grabados y dibujos de la propia colección del Rijksmuseum que desvelan lo que sucedía detrás de las puertas cerradas: fiestas y bebidas, juegos de azar y encuentros amorosos.
Las piezas centrales son los espectaculares retratos de bodas de Marten Soolmans y de su mujer Oopjen Coppit, que se muestran por primera vez después de su restauración, uno perteneciente al Rikjsmuseum y el otro al Museo del Louvre. La pareja de novios es la única pareja que Rembrandt pintó en tamaño natural, de pie y de cuerpo entero (1634). Y esta exposición puede considerarse la obertura del año Rembrandt, que se celebrará el año próximo con motivo del 350 aniversario de su muerte.
El tratamiento de conservación de los retratos de Rembrandt de Marten Soolmans y Oopjen Coppit ha sido posible gracias de los fondos Irma Theodora / Rijksmuseum, Philips y Cevat Fonds / Rijksmuseum Fonds. Y además dichos retratos fueron adquiridos conjuntamente por el Reino de los Países Bajos y la República de Francia en 2016, con destino a sus dos principales pinacotecas: Rijksmuseum y el Museo del Louvre.
En el recorrido podemos admirar los impresionantes retratos de Enrique el Piadoso, duque de Sajonia, y Catharina, condesa de Mecklenburg por Lucas Cranach el Viejo (1514), el matrimonio Iseppo da Porto y Livia da Porto Thiene con sus hijos por Paolo Veronese (1555), Don Pedro de Barberana y Aparregui de Velázquez (ca. 1631-33), el Retrato de Jane Fleming de Joshua Reynolds (1778/79), El artista de Édouard Manet (1875) y, también, un magnífico retrato vertical de John Singer Sargent, en el que captó al Dr. Pozzi en su casa, ataviado con una bata rojiza, pintado en 1881, sin olvidar los cuadros de Boldini y de Munch.
Casi todos los personajes retratados van lujosamente vestidos, y constituyen una cierta representación y evolución de la moda desde principios del siglo XVI, con pantalones ajustados a la alta costura de finales del siglo XIX. Sin embargo, algunos revelan una excentricidad al posar con ropajes antiguos, por llevar una falda escocesa o estar junto a sus perros o incluso con un león. Los de Veronese son el marido y la mujer con su hijo e hija, respectivamente, y casi siempre las escenas recrean interiores elegantemente decorados, utilizando columnas o cortinas que confieren una atmósfera teatral, incluso con paisajes imaginarios.
Tres de las salas se dedican a las actividades realizadas a puerta cerrada: las fiestas, los juegos de azar, la visita a los burdeles o los encuentros amorosos. En esos espacios se exhiben alrededor de ochenta grabados y dibujos de los fondos del Rijskmuseum, alternando escenas satíricas con otras de humor y muchas de ellas suelen llevar algún mensaje moralizante en las inscripciones. Julián H. Miranda