La Galería Caylus dona una pintura de José de Madrazo a la Real Academia de San Fernando
Esta mañana para celebrar el Día Internacional de los Museos, el salón de actos de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando ha acogido la presentación de las nuevas adquisiciones de la institución, a la que se une la donación realizada por la Galería Caylus – uno de los benefactores institucionales de la Rabasf- del retrato de la actriz María Escribano, pintado por José de Madrazo hacia 1817-1818, que se une al que ya tiene la Academia de su marido, ya viudo, el alcalde-corregidor de Madrid, Manuel García Ruiz de la Prada, en cuya composición del mismo Madrazo figura representada la actriz.
En el acto han participado, junto al director de la Galería Caylus, José Antonio Urbina, el director de la Real Academia de San Fernando, Tomás Marco; el vicedirector tesorero, Alfredo Pérez de Armiñán; el secretario general, José Luis García del Busto; y Hernán Cortés, pintor y académico adjunto del delegado del museo de la institución. Posteriormente se ha realizado la firma protocolaria del acto de donación de la obra de José de Madrazo por parte de José Antonio Urbina y de Tomás Marco.
Del total de las ocho obras presentadas destacan las cuatro pinturas, que complementarán la galería de retratos del siglo XIX de la Academia: Dama con chal rojo de Rafael Tegeo; Mariano Lidón, de José Gutiérrez de la Vega; un retrato del general Prim, de Antonio Esquivel; y la citada María Escribano, segunda esposa del mencionado Ruiz de la Prada. Además en una vitrina se exhiben dos dibujos atribuidos a Abraham Van Diepenbeeck adquiridos en Francia, y dos carteles comprados en Barcelona, uno de Pere Portabella con un motivo mironiano de los años 60 o 70 del pasado siglo, y otro de los años 30 con Buster Keaton como imagen.
La Galería Caylus ha venido colaborando con la Rabasf durante más de dos décadas y algunas de las obras que cuelgan en sus paredes fueron vendidas por dicha galería a la Academia. Ahora han adquirido tres obras más a Caylus. La primera es Dama con chal rojo, del pintor Rafael Tegeo (1798-1856), pintado hacia 1824-1827 y que revela sus dotes como retratista con ecos de Rafael; la segunda obra es un retrato que pintó José Gutiérrez de la Vega (1791-1865) de Mariano Lidón hacia 1847, pianista de cámara y maestro de música del propio Gutiérrez de la Vega; y la tercera es El general Prim, un sobrio retrato realizado por Antonio María Esquivel (1806-1857), en la que representa el prototipo del héroe militar cuando este tenía 35 años, y que se granjeó la admiración de la sociedad civil y del estamento militar. El general Prim eligió a Esquivel, que era pintor de cámara de Isabel II, para que le hiciera al menos un par de retratos, uno ecuestre que se conserva en el Museo del Romanticismo y este pintado en 1849, donde está engalanado con casaca azul, faja de mariscal y con la Cruz Laureada de San Fernando. Esquivel fijó muy bien la imagen de un militar que formaba parte de la sociedad de su tiempo.
Por último, la obra donada, el retrato de la actriz María Escribano, pintado por José de Madrazo (1781-1859) hacia 1817-1818, un año después de que Fernando VII le nombrara su pintor de cámara. En este lienzo se subraya su magisterio como retratista cuando plasma a esta actriz, esposa de su amigo García de la Prada, que a su vez lo era de Goya y de Leandro Fernández Moratín. En esos años, Madrazo retrató por separado al político García de la Prada y a su esposa María Escribano, que desde hoy formará parte de la Colección de la Real Academia de San Fernando, gracias al mecenazgo de Caylus.
