La atractiva oferta de pintura antigua de Goya
Unas tablas aragonesas del siglo XVI y unos retratos cuzqueños, lo más destacado de la cita de los días 11 y 12 de diciembre
(Si quiere ver los resultados de la subasta, pulse aquí)
Hacía tiempo que Goya Subastas no nos sorprendía con una oferta tan interesante dedicada en su mayor parte a la pintura antigua, en estos tiempos difíciles donde este tipo de obras tiene una venta complicada, más aún si los nombres de los artífices no están claros. Es muy de valorar por tanto su empeño y alegrarnos por la calidad ofrecida.
El lote más interesante, independientemente del precio final de su venta, nos parece la impresionante pareja de tablas dobles con santos, con decoraciones talladas de tracerías y arcos góticos, que debieron pertenecer a la predela de un importante retablo. Se trata de San Pedro y San Pablo por un lado, y de Santiago y San Antonio Abad por otro (parejas de O/T, 88 x 244 cm; lote 345), de un maestro anónimo de la corona de Aragón, c.1500, y que se ofrecen desde los 60.000 euros. Piezas de esa calidad no suelen verse con mucha frecuencia, todo sea dicho, pero en estas fechas algo de ello se percibe tanto La Suite, con su San Antonio abad de Pedro García de Benabarre (ver) como Alcalá Subastas con su San Pedro de Bartolomé de Castro (ver). La comparación no va descaminada pues si para ellos se piden 45.000 y 9.000 euros respectivamente, estos 15.000 euros por cada uno no parecen en absoluto fuera de mercado…
Avanzando el tiempo, y en pleno siglo XVII ya, sobresale también la pareja de bodegones de Escuela española S.XVII, círculo de Blas de Ledesma. El primero, lote 346, Bodegón con jarrones de flores, limones y paisaje en un tondo (O/L, 107 x 165 cm), y el segundo, el 347, Bodegón con jarrones de flores, granadas y paisaje en un tondo (O/L, 107 x 165 cm). Lienzos sin una calidad extraordinaria, pero muy decorativos y con un magnífico tamaño, sorprenden los 5.000 euros pedidos por cada uno de ellos, que están llamados a subir, sin duda.
Ligeramente más tardíos, debemos mencionar cinco retratos de gran tamaño, con sus cartelas explicativas de la familia Vázquez de Acuña, todos de Escuela cuzqueña del siglo XVIII, salvo el primero de ellos, el Retrato de Don Juan José Vázquez de Acuña (O/L, 200 x 104 cm; 378) que aparece como del XVII-XVIII, por 5.000 euros. El resto serían, por 6.000 euros cada uno: Retrato de Don Matías José Vázquez de Acuña (O/L, 200 x 124 cm; 379); Retrato de Don José Gerónimo Vázquez de Acuña (O/L, 200 x 122 cm; 380); y Retrato de Don Matías Vázquez de Acuña Menacho (O/L, 208 x 130 cm; 382). En cambio, por el Retrato de la señora Doña Francisca Bárbara Vázquez de Acuña, esposa de Don José Gerónimo Vázquez de Acuña (O/L, 200 x 135 cm; 381), se piden 7.000 euros…
Para el siglo XX, aunque la oferta sea ya mucho más convencional debemos mencionar varias piezas. La primera y más interesante, aunque de cara al mercado nacional no sea nada fácil, el lienzo de Elena del Rivero, Cuatro intervalos blanqueados (O/L, 200 x 200 cm; 486), adquirido directamente a la artista por el actual propietario, por 5.000 euros. Es obvio que no estamos antes sus buscadas telas, delicadeza y sugerencia en estado puro, pero este tipo de obras previas tampoco se deben despreciar como trabajos menores; en el fondo, los temas son los mismos aunque desde una perspectiva diferente y más tradicional.
Si buscamos eso precisamente, lo encontraremos en tres obras. La primera, una buena Composición (Tm/T, 120 x 100 cm; 80), firmada en 1962 por Francisco Farreras y que se ofrece por unos atractivos 2.500 euros. La segunda, una inmensa Ventana central, 1973 (A/T, 100 x 300 cm; 84) del Jorge Teixidor más geométrico, por unos nada fáciles hoy día 6.000 euros. Y la tercera, un clásico paisaje de Agustín Redondela, Plaza con figuras, 1970 (O/L, 54 x 65 cm; 73) por 5.000 euros. Daniel Díaz @Invertirenarte
