Giulio Carpioni. Los peregrinos de Emaús, detalle. Salida: 8.000 euros. Remate: 14.000 euros
EL CARPIONI DE 1673, VENDIDO EN ABALARTE POR 14.000 EUROS
La otra venta importante de la sala fue el óleo de Van Loo, que terminó sus pujas en 10.000 euros
Aunque a primera vista el lienzo de Giulio Carpioni (1613-1678) que ofrecía Abalarte no era su pieza estrella para esta larga subasta de tres días, a la postre su óleo con Los peregrinos de Emaús (O/L, 69 x 93 cm; lote 167) consiguió el cetro en la sección de pintura. Firmado y fechado en 1673 –año en que abandona la ciudad de Verona- y con la inscripción al dorso manuscrita de “G C / Doria príncipe” y restos de sello rojo con escudo con las llaves de san Pedro, es una pieza tardía donde al típico y elegante color veneciano, tomado fundamentalmente de Francesco Maffei, se une un cierto clasicismo romano, probablemente de Poussin, que le aleja de otras composiciones suyas más barrocas, como la del museo Thyssen (ver). Procedente de la antigua colección Marqués de Jura Real, el caso es que pronto quedó patente que los 8.000 euros que se pedían serían escasos y dos teléfonos hicieron el resto hasta subir a los 14.000 finales.
Algo similar sucedió con el Retrato de caballero (O/L, 64 x 54 cm; 223) del francés Louis-Michel van Loo, firmado y fechado probablemente en 1768. La calidad, que habla un lenguaje muy claro, terminó imponiéndose y los 4.000 euros pasaron finalmente a 10.000, ofrecidos de nuevo por otro teléfono. En cambio, para la Visitación (O/L, 61 x 82 cm; 138) que la sala adjudicaba a Luca Giordano como modelo para una pieza de mayor tamaño vendida en Sotheby’s, y que ofrecía por 10.000 euros, no hubo interesados…
Importante fue la venta a un teléfono, por los 6.000 euros iniciales, del Martirio de san Andrés (O/L, 128 x 103,5 cm; 662), del círculo de Mattia Pretti. Tampoco sorprendió que Ruinas y personajes con ciudad costera al fondo (O/L, 37 x 99 cm; 58), del círculo de Viviano Codazzi, un óleo con calidad evidente, subiese hasta unos más lógicos 5.500 euros desde los apenas 2.000 iniciales. Y el retrato de Fernando VI (O/L, 103 x 83 cm; 628), de un seguidor de van Loo, se vendió a un coleccionista en sala que ofreció la salida, 3.500 euros. Otros remates que destacaron fueron Jarrón de flores(O/L, 46 x 35 cm; 54), atribuido a Nicolás Baudesson, vendido por la salida, 2.500, y el cobre Adoración de los Reyes Magos (33 x 25 cm; 50), de Escuela Flamenca S. XVII, que pasó de 1.200 a 2.250 euros.
Sin embargo, queda en el regusto un cierto sabor amargo pues los pequeños lienzos adheridos a tabla con las cabezas de San Pedro y San Juan, c. 1805/6 (33,5 x 28 cm; 110) de Vicente López, de los que hablamos especialmente en nuestro artículo de previos (ver), no encontraron comprador que ofreciese los 9.000 euros pedidos. Y es que el siglo XIX sigue su particular viacrucis… Como ejemplo puede servir también que esta vez el lote filipinocompuesto por 54 cartas y cerca de 30 dibujos escritas y realizados por el Teniente de Infantería Eduardo Coello durante su estancia entre 1858 y 1863 en Filipinas (lote 19) no fue especialmente pujado, y apenas subió de 4.000 a 5.500 euros.
En pintura del siglo XX, algunas pinceladas. De Pacho Cossío, su Bodegón, c. 1930 (O/L, 40 x 70 cm; 46) pasó de unos tímidos 2.800 euros de salida hasta 4.500, una puja previa por escrito defendida por la mesa. Lógica fue también la subida del lienzo de Germán Taibo, Marina, 1915 (O/L, 73 x 92 cm; 672), que pasó de 1.300 a 4.250 euros, ofrecidos por un teléfono. Y la del canario Jesús Arencibia, Pescadores (O/L, 167 x 240 cm; 178), de 1.800 a 2.250 euros. Daniel Díaz @Invertirenarte