Una extraordinaria “Magdalena Penitente” de Pedro de Mena eclipsa la licitación de Fernando Durán
Esta interesantísima escultura en madera tallada y policromada atribuida a Pedro de Mena, es sin duda, la estrella de la edición, y es que el lote 688 es una de esas piezas de escultura más importantes que han salido a la venta en nuestro país; se trata de una obra de formato reducido de las estatuas reales del escultor, similar a la expuesta en el Museo Nacional de Escultura de Valladolid cedida por el Museo del Prado con destino a la Casa Profesa de los Jesuitas Madrileños. Es una obra considerada como “la más perfecta expresión del sentimiento místico”, y Angulo la describió como “una de las obras maestras de la plástica universal”, desde aquí nuestra enhorabuena a la sala por ofrecer una escultura de esta calidad y permitirnos su mera contemplación, destaca por la simplicidad de sus formas, por su sencillez y austeridad, decorada con una suave y sobria policromía de colores ocres ataviada esta pobre mujer, con una estera en tela de arpillera atado con una cuerda, con los cabellos caídos en cascada sobre el rostro doloroso, mano derecha abierta sobre el pecho, y la mirada absorta hacia el crucifijo denotando arrepentimiento, destacando la expresión dramática del rostro con un espectacular realismo, digna del maestro granadino Pedro de Mena, en ella se pueden observar la fusión de los modelos de Alonso Cano, la imaginería castellana y la escultura andaluza, convirtiéndose en todo un icono religioso. El tema de la Magdalena penitente ha sido utilizado como símbolo del arrepentimiento de los fieles cristianos, pero no es una temática habitual de la época. El escultor era un hombre muy religioso, influenciado por su maestro Alonso Cano y por Gregorio Fernández de la Escuela Castellana, y en pintura por Zurbarán, Mena supo plasmar en su obra los sentimientos y las emociones de una manera sencilla sin estridencias pero repletas de realismo, cumpliendo la misión de conmover al espectador, despertar sus emociones mediante el patetismo, la gesticulación sin ningún tipo de impronta de exageración, como en este caso, el tratamiento de la figura, el color de su policromía, la gesticulación, la definición de los rasgos del rostro, los ojos están realizados en pasta vidriada para dar más realismo y la impresión de lágrimas y un dolor con mesura, todo va enfocado a conmover al espectador y lo consigue. Su precio de salida se ha fijado en 50.000 euros, cifra que quedará lejos de su remate final, sobre todo, teniendo en cuenta la última referencia en el mercado de este autor en nuestro país, me refiero al “San Pedro de Alcántara” que Alcalá Subastas sacaba a la venta el pasado 14 de diciembre con el lote 981 (leer) y que arrancando de 65.000 euros ascendió hasta los 150.000 en uno de los teléfonos, consiguiendo el segundo remate más alto de este autor después de la “Virgen Dolorosa” vendida por Sotheby`s en 164,500 libras el 2 de julio de 2013 con el lote 99 (leer) y el primero a nivel nacional. El hecho de que su procedencia sea privada y que no haya estado antes en el mercado, su indudable calidad, el interés que está levantando entre los grandes coleccionistas y la espera de que se declare o no inexportable nos hacen intuir que su cifra de remate puede superar a las anteriores. Veremos si el Estado hace su aparición.
Otro interesantísimo lote presentado en esta edición, es el 663, una bonita escultura en marfil, trabajo hispano filipino del ff s XVII, que representa una “Inmaculada Concepción”, destaca por su magnífica talla y su gran tamaño de 44,5 cm de altura, se muestra en pie sobre una peana formada por nubes, y presenta rostro con rasgos orientales como la boca pequeña, ojos rasgados, párpados abultados, que se apartaban de los ideales clásicos de la Europa contemporánea consecuencia del eclecticismo entre oriente y occidente, se ha tasado en unos escasísimos 7.000 euros. Se trata de otra pieza de gran calidad digna de mencionar, lástima la grieta longitudinal que presenta y que puede hacer que su remate no sea tan alto como cabría esperar. Como referencia de una pieza de similar tamaño, me gustaría recordar, los 40.000 euros alcanzados en uno de los teléfonos desde los 25.000 en que había sido tasada inicialmente, una extraordinaria “Virgen con Niño” (lote 249) que licitó Goya subastas en su edición de febrero de 2017, una escultura en marfil tallado y parcialmente dorado de 69 cm contando con la base de alabastro, convirtiéndose en la estrella de aquella subasta. Mariano Santos @AntgOln