Licitación con subidas acusadas en algunos lotes de escultura, porcelana y arte oriental. Y en la que los esmaltes de Limoges no obtuvieron los resultados esperados
En una época en la que la escultura no está pasando por su mejor momento. Resulta llamativo que el “San Benito de Palermo” (811) de la Escuela Castellana del s. XVIII alcance los 16.000 euros a una puja al teléfono desde los 6.000 euros en que se tasó inicialmente. También conocido con otros apelativos más explícitos como el Negro, el Africano o el Moro de Palermo, se trata de uno de los escasos ejemplos de personas de color en el santoral cristiano. Este monje nacido en 1526 en San Fratello, en la provincia Italiana de Mesina y de padres cristianos de descendientes esclavos, se le atribuyen numerosos milagros durante su vida. Venerado tras su muerte, no fue beatificado hasta 1743 y canonizado en 1807 por Pío VII. Con la cabeza vuelta hacia el crucifijo de su izquierda, le faltaría en la derecha su atributo característico: un corazón del que salen siete gotas de sangre, haciendo referencia a las virtudes que le adornaron (tres teologales y cuatro cardinales). Buena venta también, aunque fuera en la salida, la del busto de “Santa Úrsula” (810). Un relicario en madera tallada, policromada y sobredorada de la Escuela Española del s. XVI, por el que pagaron al teléfono 5.000 euros.
En el apartado de arte oriental, hubo algunos lotes importantes que se quedaron sin vender, pero en cambio hubo otros con subidas significativas, como el 702. Una seda bordada con hilos en policromía y en el que se representan aves sobre un árbol florido. Realizada en el s. XIX se adjudicó en 3.000 euros, casi diecisiete veces su estimación inicial de tan sólo 180 euros. O como el 733, pareja de colmillos de elefante montados sobre peanas de madera, con una altura total de 160 cm, se remataron en 2.600 euros desde los 1.400 de inicio. El precio más elevado se pagó por el jarrón chino (700) del s. XIX, en porcelana tipo “Celadón” con decoración en relieve, dándose los 4.000 euros en los que se tasó.
Especialmente llamativo de esta licitación fueron las cifras que se pagaron por algunas piezas de porcelana, si bien es cierto que en muchos de los casos los precios de salida eran realmente bajos. Como el 282, una vajilla en porcelana de Vista Alegre, vidriada en blanco con decoración azul cobalto y dorado. Con un total de 132 piezas, ascendió hasta 3.600 euros tras disputársela tres compradores, muy lejos de los 350 euros de inicio. De esa misma fábrica era el 273, un juego de 45 platos llanos con motivos orientalistas, subiendo desde apenas 150 euros a 1.000 euros. Otra vajilla, en este caso en porcelana inglesa de Longton (277), vidriada en blanco con decoración estampada de motivos florales en policromía, se remató en 2.000 euros, multiplicando por cinco su tasación inicial de 400 euros. Buena aceptación tuvieron también los grupos escultóricos en porcelana, como el 287, “Fauno con amorcillos”, de la manufactura napolitana de Capodimonte, siguiendo un modelo original de Clodion, cuya firma figura en la base, s. XIX-XX. Dándose por 1.700 euros desde los 500 de inicio. O el conjunto de cinco amorcillos (311) en porcelana alemana de Meissen del s.XIX, por 1.900 euros habiendo salido en 700.
En cuanto a la plata, tres fueron los lotes más destacados: el 230, jarra con palangana con marcas de Córdoba de la segunda mitad del s. XVIII, el platero Castro y fiel contraste Aranda, comenzó en 2.500 y se bajó el martillo en 3.300 euros a una puja al teléfono. El 231, era una cubertería con la típica decoración francesa de rocalla del s. XIX, de 12 servicios, con un peso de 3,125 kg. Vendiéndose en 2.600 euros muy por encima de los 1.200 en que empezó. Y el 217, un caballo en plata de Ley española 916 del platero López de Madrid, con un peso de 1,800 kg. Las pujas estuvieron muy animadas, comenzó en tan sólo 480 euros y acabó en 1.200.
En cuanto al mobiliario, sobresalió la venta de la singular papelera (747) del s. XVIII-XIX chapeada con concha de tortuga y metal plateado, con decoración reelevada con escenas de la vida de la Virgen y sustentada por una mesa de pie de puente de la misma tipología. Su estimación de salida era de 3.000 euros y ascendió hasta 4.800 euros. Mariano Santos @AntgOln