Un retrato de Juan de Austria en Dorotheum
La casa de subastas con sede en Viena saca a licitación el próximo 29 de junio un retrato del hermano de Felipe II. Con un precio estimado entre los 6.000 y los 8.000 euros, cifra que animará a instituciones y coleccionistas, muestra al personaje como vencedor de la batalla de Lepanto y seguramente, por la riqueza de su vestimenta, como gobernador de los Países Bajos.
No son muchos los retratos que han llegado hasta nuestros días de don Juan de Austria (Ratisbona, 1547-Namur, 1578)*, máxime aquellos en los que se le representa como uno de los vencedores de la batalla de Lepanto (1571) y gobernador de los territorios de Flandes de la corona española. Precisamente por ello, ha despertado nuestro interés la pintura que pone a la venta la próxima semana Dorotheum con número de lote 11. La obra en cuestión, un óleo sobre tabla de 68 x 51,5 cm, presenta al hermano de Felipe II en un óvalo jaspeado fingido. Don Juan viste un jubón blanco con bordados dorados. Sobre él un busto de armadura ricamente adornado, del que pende una cinta con la insignia del Toisón de oro. Se adorna además con un cuello de puntas flamenco. La identidad del retratado parece estar fuera de dudas no solo por la fisionomía de su rostro, sino también por la inscripción que figura en el óvalo jaspeado en la zona inferior derecha: «Don Ian d’Austria».
La casa de subastas austriaca no propone autoría a la pintura –más allá de considerarlo dentro del círculo de artistas al servicio de los Habsburgo– y señala una cronología en torno a 1590, por lo que se trataría de un retrato póstumo de Juan de Austria, posiblemente destinado a alguna galería de retratos de varones ilustres de la época, en la que figuraría como uno de los vencedores de la batalla de Lepanto –de ahí la armadura– pero también como gobernador de los Países Bajos –por el rico jubón y el cuello de puntas que viste–, cargo que asumió por orden de Felipe II en 1576.
El primer retrato conocido de este personaje fue pintado por Alonso Sánchez Coello hacia 1559-1560, cuando fue reconocido por su hermano y entró a formar parte de la Casa Real. A este momento pertenece el cuadro que hoy se conserva en el Museo Soumaya de Méjico. Pero sin duda, el más conocido es el que posee, procedente de las colecciones reales españolas, el Museo del Prado (ver aquí).
El cuadro de Dorotheum coincide con el del Prado (hacia 1575) en mostrar a don Juan con busto de armadura y cuello de puntas. Sin embargo, la armadura de la pintura madrileña, a diferencia de la obra que nos ocupa, no lleva adorno (sí lo posee, también, la que viste en el cuadro anónimo de Viena en el que aparece como uno de los vencedores de Lepanto). También difiere algo la fisionomía del rostro, con barba y bigote más poblados y rasgos más marcados en el cuadro de Viena. Esta imagen se adecua más con otra pintura atribuida también a Sánchez Coello que dio a conocer en 1994 Ludmila Kagané en el museo de arte de Jabárovsk (Rusia), de dimensiones además muy próximas (62 x 47 cm). Aunque se fechó en la década de 1560, los rasgos del rostro permitirían datarlo con posterioridad a 1575.
Con todo, parece razonable pensar que la subasta del próximo 29 de junio en Viena despertará el interés de instituciones y también de coleccionistas, para hacerse con esta pintura que, además, parte con un precio de salida en 6.000€.
* Además de los conocidos, tanto en estampas como en pintura, deben tenerse en cuenta los que decoraron la Galería de retratos de Felipe II en el palacio de El Pardo o el que pidió en 1571 desde Sevilla Gonzalo Argote de Molina para colocarlo en su «museo».