Un gouache de Togores en Ansorena
Realizado en 1929 durante su época surrealista, y expuesto en el Reina Sofía, saldrá a pujas por 32.000 euros en la cita de los días 22 y 23 de julio
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Tras una breve formación, José de Togores (1893-1970) viaja a París gracias a una beca del Ayuntamiento de Barcelona en 1907, con apenas 14 años; allí conoce a Cézanne y a algunos de los impresionistas y postimpresionistas. En 1909 expone en Bruselas y el gobierno le compra su cuadro El loco de Cerdanyola, en lo que podría decirse que era una prometedora carrera.
Tras la Primera guerra mundial, se instala de nuevo en la capital francesa, donde conoce a Picasso, Braque, Maillol, Jacob… Firma exclusividad en 1921 con el reconocido marchante Daniel-Henri Kahnweiler, y de 1922 a 1926 expone en París, Berlín, Nueva York, Múnich, Düsseldorf y Barcelona, con gran éxito. Y comienza su relación con el surrealismo, fase en la pinta este espléndido gouache sobre papel adherido a lienzo (marouflé) titulado Pintura. Caldes d’Estrac, 1929 (116 x 146 cm; lote 563), que Ansorena ofrece por 32.000 euros. Procedente de la galería Simon y Louise Leiris de París, y más tarde de la colección de Horacio Pérez-Hita, estuvo presente en la muestra en 1995 del Reina Sofía, El surrealismo en España (cat. 184), que viajó luego a Düsseldorf, Viena, Verona y Santiago de Compostela.
Para Victoria Combalía (ver), “De Masson adoptará el dibujo automático. Pero más interesantes son otros cuadros (de 1928-29) en las que las formas abstractas, en grises, rosas, sienas y negros, asemejan ramas, huesos, elementos tubulares, pájaros”. Por eso precisamente se ofrece en un precio alto, pero razonable, y de alguna manera consecuencia de los 15.000 euros pedidos en Segre en septiembre de 2003 por su muy similar pero más simplificada Composición, 1929 (gouache/papel/L, 73 x 116 cm), aunque no encontrara comprador. Desde luego, es una obra de las importantes del autor y un buen coleccionista de su producción debería plantearse su compra.
Ya que estamos en el mundo catalán, de refilón -lo sé- traigo a colación la escultura de Josep Llimoná, Juventud (mármol, 40 x 30 x 20 cm; 772); con un planteamiento modernista aún -un mármol blanco aún poco definido, la juventud, surge de otra materia, casi de la tierra-, se ofrece por 19.000 euros. A cierta distancia, por tanto, de los 22.000 euros de remate en Balclis en mayo de 2010 por Descanso (mármol, 47 cm), y muy lejos ya de los 60.000 en que se adjudicó Meditación o Insomni (mármol, 52 x 40 x 28 cm; ver), en la misma sala pero en diciembre de 2008, tras salir por apenas 9.000 euros.
Si volvemos al mundo parisino, no se pierdan el sencillo papel de Francis Picabia, Dos modelos, c. 1920 (tinta y acuarela sobre papel, 33 x 20 cm; 564), que se ofrece por 21.000 euros. Y de postguerra, me parecen especialmente interesantes tanto Las ondas del eco, 1967 (Tm/plexiglás, 67,5 x 57 cm; 719), de Gustavo Torner, por 9.000 euros, como el Verde-naranja con tres ventanas, c. 1965 (pintura sobre estructura de lienzos y bastidores, 56 x 47 x 5 cm; 720), de la época de los bastidores de Gerardo Rueda, por 2.800 euros.
Si retrocedemos al mundo finisecular, retardatario, la sala ha seleccionado como portada de su catálogo un lienzo de Francisco Pons Arnau, La moza del cántaro, 1928 (O/L, 76 x 70 cm; 223), por 15.000 euros, en cierta línea sorollesca, pues al casarse con su hija María el maestro se convirtió en su suegro. Por 40.000 se ofrece un inmenso Camino de la finca (O/L, 250 x 192 cm; 225), de Eliseo Meifrén; invitado por Eusebio Navarro a Las Palmas de Gran Canarias en 1897, pintó seis grandes lienzos para el comedor de una casa palacio de allí, siendo el que sale a pujas el mayor. Ya que estamos con el paisaje, no se pierdan la tablita de 25 x 33 cm (lote 227) de Darío de Regoyos, Reflets, ville en Castille, 1905, tratando de mostrar los reflejos del cielo en un río castellano; enviada a París para su exposición, fue comprada y ha permanecido allí hasta ahora. Su precio, 13.000 euros.
Por último en Ansorena, me parece especialmente interesante la pareja de lienzos de Eugenio Lucas Villaamil, Bocetos para los techos del salón de la música y del gabinete de la comedia del palacio de Parque Florido, de José Lázaro Galdeano, sede del actual museo estatal. Se trata de dos trabajos sobre lienzo, de 56 x 47 cm (229 y ver), que se ofrecen por 10.000 euros, académicos pero que mantienen una frescura y una soltura que me temo han desaparecido en los techos, más acartonados.
Y de los maestros antiguos, una Virgen en majestad (temple y pan de oro/T, 151,5 x 91 cm; 102), de Joan Reixach, con evidentes daños, por lo que sale a pujas por apenas 5.000 euros. Daniel Díaz @Invertirenarte