Un consorcio de centros europeos como el Louvre o el British renovará el Museo Egipcio de El Cairo

Un consorcio de centros europeos como el Louvre o el British renovará el Museo Egipcio de El Cairo

La Unión Europea concibe un proyecto de colaboración con las autoridades egipcias para modernizar la museología y las instalaciones del centro en un tiempo aproximado de tres años. Esta iniciativa cuenta con un presupuesto de 3,1 millones de euros y apoya así la candidatura del museo cairota a Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.



Trono de Tutankamon. Museo Egipcio de El Cairo.

Las vitrinas por fin dejarán de tener polvo. Los clavos oxidados de los que cuelgan los tesoros y joyas de los faraones probablemente se renueven, y es posible que las cartelas escritas a máquina desaparezcan también. La mayor colección de arte egipcio del mundo, alojada en el Museo más visitado de El Cairo, podrá verse con nuevas y mejoradas instalaciones en 2020 gracias a la iniciativa promovida por la Unión Europea.

Este proyecto cuenta con la colaboración del Ministerio de Antigüedades en Egipto y está encaminado a modernizar parte del edificio neoclásico construido por Marcel Dourgnon e inaugurado en la plaza Tahrir en 1902. Incluye, asimismo, un ambicioso Masterplan que busca potenciar la museografía, egiptología y arqueología local, así como la gestión de su vasto patrimonio cultural.

Máscara funeraria de Tutankamon. Museo Egipcio de El Cairo.

El Museo Egipcio de El Cairo abrió sus puertas a principios del siglo XX para enseñar al público parte de los tesoros procedentes de las tierras del Nilo. En origen, el recinto debía albergar cerca de 12.000 objetos, pero las expediciones arqueológicas posteriores fueron sumando piezas a la colección, que llegó a superar las 150.000 obras. La paleta Narmer, la estatua sedente de Kefrén o la máscara funeraria de Tutankamon son solo algunos de los tesoros que se exhiben en este museo, tan caótico y desordenado como el tráfico de las calles que circundan su edificio.

Precisamente para paliar los problemas de espacio, surgió la idea del Gran Museo Egipcio, una construcción de piedra traslúcida ideada hace una década por Heneghan Peng Architects que no termina de ver la luz. Su inauguración, prevista para 2020, se ha ido retrasando debido a vicisitudes como la primavera árabe o el elevado gasto generado durante estos años (ya se han superado los 1.000 millones de dólares).

Antes la inminente apertura de este nuevo museo –supuestamente podremos verlo parcialmente inaugurado en 2019–, se ha querido dar un paso más en las mejoras del centro primigenio y centenario de la plaza Tahrir. «Egipto tiene una rica historia de miles de años y posee una cultura única que ha inspirado al mundo. Estamos orgullosos de tener el privilegio de apoyar la colaboración y el intercambio de experiencias entre Europa y Egipto en las áreas de egiptología, museología y la gestión de patrimonio cultural», mantiene Ivan Surkoš, embajador de la Unión Europea en Egipto y cabeza visible del proyecto que se presentó el lunes. 

Interior del Museo Egipcio de El Cairo.

El plan en cuestión lleva por título «Transforming the Egyptian Museum of Cairo» durará tres años y tiene un presupuesto de 3,1 millones de euros. Se trata de un proyecto que honra a los museos europeos, no olvidemos que se han beneficiado de las excavaciones realizadas en Egipto durante las expediciones europeas de los siglos pasados (el British Museum recibe miles de visitas gracias a la piedra Rosetta, una cifra que se repite en el caso del Ägyptisches Museum und Papyrussammlung de Berlín, sede del célebre busto de Nefertiti).

El Museo Egipcio de Turín lidera el consorcio de centros europeos que participan en el proyecto, al que también se han sumado el Louvre, el Museo Nacional de Antigüedades de Leiden y las mencionadas instituciones de Londres y Berlín. Todos ellos asistirán a su homólogo egipcio en la adopción de nuevos enfoques en museología global, para mejorar su manera de exponer la colección y las exposiciones temporales. El plan de acción se centrará especialmente en la planta baja y en los tesoros de las Tumbas Reales de Tanis. Sol G. Moreno