Descripción
EL AÑO DEL MAESTRO
Como somos un país singular, a nadie le ha extrañado que acabara el Año Greco, sus exposiciones y congresos, y que pasáramos sin solución de continuidad a otra cosa. Parece que ahora toca Cervantes. Pero el cúmulo de ideas nuevas, descubrimientos y hallazgos es tal, que parece necesario, al menos para ser honestos, hacer una recopilación de las exposiciones e investigaciones que se han hecho en foros de todo el mundo y ofrecer sus conclusiones. Como tampoco es bueno esperar años a que se publiquen las actas de los congresos, incluimos en los reportajes de este número un resumen de todas las novedades que han surgido acabado el aniversario del cretense, como algunos cuadros y dibujos desconocidos y los importantes documentos, aparecidos en la Catedral Primada de Toledo, que publicamos en este número y acompañan estas líneas. Pero eso tampoco puede ser todo.
Y no puede serlo porque, si algo hemos aprendido durante los meses pasados, es que el maestro que conocíamos hasta ahora no era exactamente como el real. Sus obras se confundían a menudo con las repeticiones de su taller o incluso con algunas imitaciones y falsificaciones de sus seguidores. Los dos cuadros que publica Leticia Ruiz de Luis Tristán dan idea del nivel que alcanzaron algunos de sus discípulos. Por eso, como ya ocurrió en su día con Rembrandt, se hace necesaria la creación de un grupo de expertos que concluya el catálogo definitivo de Doménico Theotocópoli. Un Greco Research Project que elabore, a partir de los nuevos conocimientos técnicos que proponen Carmen Garrido y Jaime García-Máiquez, una nueva sistemática y un corpus de obras del maestro. Sería un buen remate a un año lleno de éxitos y al trabajo de la Fundación El Greco 2014.
Por Fernando Rayón
