Descripción
Empresario, diplomático y coleccionista, pero no uno cualquiera. Alberto J. Pani formó dos conjuntos plagados de atribuciones incorrectas y uno de ellos lo vendió al Gobierno mexicano. Entre todas sus compras no hubo muchos aciertos, con la notable excepción de un lienzo que continúa desaparecido y que salió en misteriosas circunstancias de nuestro país: La cocina de los brujos de Goya.
Texto: Arturo Colorado Castellary