Fallece Tomàs Llorens: historiador, filósofo y director
El jueves murió en Dénia, a los 85 años, uno de las impulsores de los museos españoles modernos. Exdirector del IVAM, del Museo Reina Sofía y del Thyssen-Bornemisza, este crítico de arte y gestor cultural fue además un sabio cercano y humilde que transmitió sus conocimientos en diversas universidades de nuestro país.
Se apagó la voz del profesor, del filósofo, del teórico y crítico de arte. Tomàs Llorens (Almassora, Castellón, 1936) falleció el 10 de junio en su casa, después de toda una vida dedicada a potenciar la museografía de nuestros centros culturales y de formar a decenas de generaciones de historiadores.
Licenciado en Filosofía y Derecho, este gestor cultural valenciano se mantuvo fiel a su compromiso por el arte. Primero formó parte del equipo fundador del IVAM (Institut Valencià d’Art Modern), institución que dirigió entre 1986 y 1988; después fue máximo responsable del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía y, en la década de los noventa, ejerció de conservador jefe en el Thyssen-Bornemisza (de hecho, en la actualidad ocupaba el cargo de director honorario desde 2005).
Con su labor intelectual, no solo contribuyó decisivamente a establecer los cimientos de la historiografía y museografía modernas, sino que además participó de manera activa en movimientos como el Equipo Crónica, donde jugó un papel destacado. En 2007 recibió la Medalla de oro al Mérito en Bellas Artes y seis años después obtuvo el doctorado Honoris Causa por la Universidad de Alicante.
En el ámbito académico, Llorens impartió clases de crítica de arquitectura en la Portsmouth Polytechnic durante más de una década (entre 1972 y 1984). Además, también ejerció como docente de Estética y de Historia del Arte en las universidades de Valencia, Barcelona, Gerona y Alicante. Autor de numerosos artículos, entre ellos «La noche del arte moderno» publicado en el número 18 de ARS Magazine, Llorens dedicó parte de su vida a la investigación del arte de vanguardia.
Entre las exposiciones que ha comisariado en el último museo del que formó parte, destacan Sargent y Sorolla (2007), Matisse (2009) y Hopper (2012). Se jubiló en el año 2006, pero sus ansias por mantenerse al tanto de las novedades artísticas le llevaron a organizar una exposición sobre Alex Katz, que se inaugurará el año que viene en el Museo Thyssen. Ese será su legado póstumo, aunque su herencia, y su recuerdo para aquellos que le conocimos, serán eternos. Sol G. Moreno