El legado del expresionismo alemán en la National Gallery de Washington
A través de más de 100 grabados, dibujos, libros ilustrados, carpetas y dos esculturas, el museo norteamericano presenta una visión de la obra de estos artistas expresionistas y su impacto en el siglo XXI. La exposición podrá verse hasta el 27 de mayo de 2024 en el Edificio Oeste de la National Gallery of Arte de Washington.
Insatisfechos con las convenciones y las normas sociales, culturales y políticas de principios del siglo XX, los expresionistas alemanes rechazaron las concepciones académicas de una belleza idealizada y atemporal. En su lugar, optaron por estrategias artísticas atrevidas, formas angulosas, simplificadas y distorsionadas, como respuesta a un mundo cambiante durante las convulsiones del siglo pasado.
El ojo ansioso: el expresionismo alemán y su legado recoge una extensa y variada muestra con piezas que datan de entre 1908 y 2021. Todas ellas, incluidas las recientes adquisiciones y obras que rara vez se han expuesto, proceden de la colección permanente de la National Gallery de Washington D.C. La exhibición introduce a artistas como Erich Heckel, Emil Nolde, Käthe Kollwitz, Egon Schiele y Ernst Ludwig Kirchner, junto a grabados de autores menos conocidos, como Otto Mueller, Paul Gangolf y Walter Gramatté.
El director de la Galería, Kaywin Feldman, explica: «La exposición invita a los visitantes a considerar los paralelismos entre la intensidad de la emoción humana y la experiencia transmitida en la obra de los expresionistas alemanes durante un periodo histórico de transformación a principios del siglo XX y las respuestas actuales a los cambios culturales y políticos que tienen lugar en el mundo de hoy».
Los artistas que trabajaban en Alemania y Austria en las décadas de 1910 y 1920 se preocuparon por reflejar la experiencia humana en medio de rápidas transformaciones sociales, geopolíticas y culturales, y todo ello con la Primera Guerra Mundial como telón de fondo. El ojo ansioso se divide en cuatro secciones temáticas que se centran en los retratos y la vida moderna, la naturaleza, la espiritualidad, el lenguaje corporal y el posterior legado del movimiento.
Estas ideas se exploran, sobre todo, en la última sala de la intervención museográfica, que recoge la obra de artistas posteriores cuyos enfoques similares a la creación de marcas, materiales y sentido de la inmediatez se han empleado para responder a circunstancias y preocupaciones análogas en la actualidad.
El primer espacio presenta retratos y autorretratos centrados en los pensamientos y los estados emocionales del ser más que en la exactitud realista de la apariencia. Estas piezas se inspiran en los conceptos que estaban surgiendo por aquel entonces sobre los estados de ánimos y los rasgos de la personalidad, desarrollados por Carl Jung y Sigmund Freud.
La intensidad emocional se percibe en las diagonales, las líneas temblorosas y los dedos contracturados de la figura de La gran angustia (1918) de Die Grosse Angst, pero también en las marcas excavadas, talladas y arañadas que definen los rasgos faciales en el retrato xilográfico de Fanny Wocke (1916) de Ernst Ludwig Kirchner.
La segunda sala exhibe temas y paisajes religiosos que los artistas persiguieron al buscar refugio en las complejidades y el estrés de la vida cotidiana. Al mismo tiempo cuestionaron la fe y el impacto destructivo e la humanidad en el mundo. Algunas de las obras más destacadas de esta sección son las representaciones de Lovis Corinth y Otto Mueller de la historia del Antiguo Testamento de Adán y Eva en el jardín del Edén, la xilografía rosa y verde de Karl Schmidt-Rotluff de montañas rocosas y la enturbiada vista del puerto de Hamburgo (Alemania) de Emil Nolde.
Por otra parte, en la tercera galería se muestran los diferentes enfoques que los artistas exploraron para representar las relaciones interpersonales, el cuerpo y la sexualidad. Un ejemplo de ello es Autorretrato con esposa (1922), de Walter Gramatté, en el que las tensiones que pueden surgir entre marido y mujer se manifiestan mediante la banda verde que atraviesa horizontalmente la composición.
Asimismo, en contraposición a los tradicionales desnudos idealizados, adoptaron una serie de movimientos corporales y posturas incómodas que se pueden ver en la superficie colorida y fruncida del Desnudo de pie con túnica estampada (1917). de Egon Schiele, o en el modelo arrodillado sobre una alfombra del Desnudo (1913), de Erich Heckel.
Entre las recientes adquisiciones de National Gallery se encuentran Beer Garden (2012-2017), de Nicole Eisenman, que combina el autorretrato con varia figuras caricaturizadas que recuerdan a los grabados de Max Beckmann en la primera sala; y Time… thou ceaseless lackey to eternity (2017), de Orit Hofshi, en la que la artista, de pie en un paisaje asolado por la guerra y el cambio climático, está rodeada de personas desplazadas que buscan refugio y un camino hacia un futuro mejor.