El coleccionismo según Luís Paulo Montenegro: “un acto de amor y coraje”

El coleccionismo según Luís Paulo Montenegro: “un acto de amor y coraje”

 El coleccionismo según Luís Paulo Montenegro, “un acto de amor y coraje”

*La Sala de Arte de la Fundación Santander presenta por primera vez en España los tesoros del empresario brasileño, que repasa medio siglo de arte dentro del panorama latinoamericano. *Los “bichos” de Lygia Clark, la instalación de Ernesto Neto, recién adquirida, y las composiciones constructivistas de Hélio Oiticica son algunas de las 216 obras que pueden verse en Boadilla del Monte.



 

Su primera compra fue un impulso. Vio la obra en una casa de subastas que visitaba por vez primera y enseguida sintió la necesidad de adquirirla. Era La Índia Carajá de Candido Portinari, que encontró a su dueño casi por casualidad. “Segundos antes de que el subastador golpease el mazo, levanté el brazo para que me adjudicasen la pieza. Creo que cogí a todos los allí presentes por sorpresa, incluso a mí mismo”, confiesa Luís Paulo Montenegro.

Ese primer estímulo fue la chispa que encendió la llama del coleccionismo en un hombre dedicado en exclusiva a la empresa hasta ese momento. Era socio del Grupo IBOPE (Instituto Brasileño de Opinión Pública y Estadísticas), la empresa de la que ahora es vicepresidente y que se ocupa de las encuestas sobre intención de voto en las elecciones presidenciales desde 1945, además de medir las audiencias en la televisión.

Como suele ocurrir a menudo, la pasión por adquirir obras de arte pronto vino acompañado de un sentimiento de compromiso: el de formar un conjunto con un criterio definido. Y, en el caso de las tendencias contemporáneas, actuar como mecenas de los artistas locales.

De esa primera e improvisada compra han pasado ya 19 años, tiempo más que suficiente para que el coleccionista residente en Sao Paulo haya conseguido reunir más de dos centenares de piezas, que ahora comparte con el público español. Un total de 216 obras abandona por primera vez las dependencias de su hogar para mostrarse en el espacio que la Fundación Santander tiene en la ciudad financiera de Boadilla. Una cuidada selección que “condensa lo mejor de la historia del arte de su país durante los últimos 50 años”, según Borja Baselga, director de la Fundación Banco Santander.

Luis Paulo Montenegro posando con obras de Alfredo Volpi.
Alfredo Volpi. "Sin título". Década de 1960.

Artistas brasileños cotizados en el panorama internacional como Lygia Clark, Lygia Pape o Cildo Meireles participan en Visiones de la Tierra / El mundo planeado, una muestra que pone el foco en la vanguardia local, pero que también amplía su mirada hacia Latinoamérica e incluso Europa. De ahí la presencia de Alexander Calder, Warhol, Giacometti o Torres García, que fueron una referencia para las generaciones futuras.

“Coleccionar es un acto de amor y de coraje”, señala el propio Montenegro. Amor hacia el arte de su tiempo, coraje por preservar las raíces de su tierra. No extraña, por tanto, que comenzase interesándose por la pintura figurativa indigenista de Emilio di Cavalcanti, Vicente do Rego Monteiro o el mencionado Portinari, donde confluyen lo popular, lo mestizo y lo africano.

Tomas Sarraceno. "Estratos galácticos". 2015.
Nelson Leirner. "Separación". 2017.

Más tarde, abriría sus horizontes hacia el concretismo, el primer movimiento propiamente abstracto del país. Surgido de manera tímida en la década de los 50 –coincidiendo con el gobierno de Juscelino Kubitschek–, encontró en Alfredo Volpi su mayor referente. Pues el italiano afincado en Brasil fue quien introdujo la abstracción geométrica, que más tarde secundaron Sergio Camargo o Milton Dacosta.

Para contextualizar todas estas obras, Montenegro adquirió también piezas de otros artistas latinos –de Argentina, Venezuela o Cuba, por ejemplo– que completan la muestra y ayudan a cerrar el círculo de este paseo por el arte brasileño. Siempre visto bajo el prisma de un hombre apasionado por el arte y con el coraje para coleccionarlo.

Podrá visitarse hasta el 10 de junio. Sol G. Moreno

Candido Portinari. "Índia Carajá". 1961.
Lygia Pape. "TTÉIA 1C. METÁLICA 7". 2003.