Creciente actividad en el Armory Show 2022
El Palacio de Cristal de los Hudson Yards de Nueva York ha vuelto a convertirse en el escaparate de las galerías líderes de arte contemporáneo a nivel global. Como todos los años, la feria ofrece una presencia privilegiada a las galerías locales, que juntas suponen un auténtico termómetro de una de las capitales culturales más relevantes del mundo. Sin embargo, las galerías internaciones han concluido este evento con muy buenos resultados, y también conviene destacar la presencia española.
Esta edición se ha dividido en seis grupos expositivos. La sección central es la llamada sencillamente Galleries, donde galerías internacionales consolidadas han presentado sus apuestas. Entre ellas destacamos la madrileña Max Estrella, con la polivalente exposición de Jessica Stockholder, Rafael Lozano-Hemmer, Eugenio Ampudia, Daniel Canogar, Markus Linnenbrink y José Val del Omar. La obra Thermal Drift de Lozano-Hemmer ha cautivado a los visitantes por su interactividad, siempre a la vanguardia en el uso de las nuevas tecnologías en el arte. La obra hace de espejo reconociendo el calor corporal del espectador como emisiones de energía térmica en forma de puntos que se mueven lentamente.
La sección Focus, comisariada por Carla Acevedo-Yates, reúne artistas que reflejan los conflictos ideológicos actuales sobre la sostenibilidad, el medio ambiente, las relaciones interpersonales en los ámbitos de la raza, el género y el poder. Como no debe faltar en ninguna feria de arte contemporáneo, la sección Pesents arroja luz sobre galerías emergentes de menos de 10 años de existencia, con obra también de artistas jóvenes de una gran variedad de países.
Para las instalaciones de gran tamaño con potentes mensajes, la feria cuenta con Platforms, comisariada por Tobías Ostrander. Esta sección resume gran parte de la participación de todas las demás. Examina cómo las prácticas revisionistas recientes, que son parte de cambios culturales dramáticos que ocurren en todo el mundo y que están influyendo en el compromiso de los artistas con la forma escultórica.
La sección Solo, dedicada a participaciones de un único artista o (grupo de artistas), ha contado con una presencia española relevante. Se trata de la Galería Senda de Barcelona, cuya obra ha sido destacada por la propia feria y ha cosechado un gran interés por el público con la venta de dos de sus piezas a un museo americano de Kentucky durante el primer día. Senda ha apostado por el colectivo AES+F, autodenominados como grupo de autores basados en Berlín, aunque son artistas rusos en el exilio. Resulta que, tras haber dedicado su carrera a representar a Rusia en acontecimientos artísticos internacionales como la Bienal de Venecia, publicaron un manifiesto titulado Statement on Russia´s invasion of Ukraine, donde denuncian a Putin como genocida y fascista, y se desvinculan completamente de su país.
El proyecto presentado en la galería se titula Mare Mediterraneum y originalmente se pensó para una exposición en un palacio en Nápoles, con un evidente guiño a la porcelana napolitana. La reflexión que propone el colectivo es muy clara, a través del delicado y fino lenguaje de la porcelana esmaltada, reflejan irónicamente la crisis migratoria de Europa. Las esculturas se componen de grupos de veraneantes de diferentes etnias aparentemente felices, con algunas alusiones a la pintura de la escuela de Nápoles. Son piezas que, a primera vista, llaman mucho la atención y apelan a la curiosidad, pero una vez comprendido el mensaje, los sentimientos encontrados y la sutil sacudida de conciencia en el espectador es el último objetivo de las piezas.
Pretende un autoexamen sobre cuál es la postura que tomamos al respecto, y sacar a la luz nuestro común deseo de querer hacer algo para solucionar esta tragedia. Como el mismo grupo explica: ¨El Mediterráneo vuelve a ser epicentro de contradicción ideológica, polarización de la opinión pública y xenofobia¨. Estas paradójicas representaciones hacen de iconos de la época de la Posverdad en la que seguimos inmersos. Las esculturas se complementan con dos cuadros de grandes dimensiones, de las pocas pinturas que ha hecho este grupo, de las cuales, una de ellas fue adquirida el primer día.
Por último, no debemos dejar de mencionar otra de las secciones más importantes de cualquier feria cultural. En este caso se titula Not-for-profit, que reúne a todas las instituciones, fundaciones u organizaciones que, sin fines de lucro, comparten con The Armory Show su objetivo de promover las artes visuales entre los coleccionistas y el público en general por igual. Ana Robledano