Colografías, ritos afrocubanos y una reivindicación existencial: Belkis Ayón en el Reina Sofía

Colografías, ritos afrocubanos y una reivindicación existencial: Belkis Ayón en el Reina Sofía

Colografías, ritos afrocubanos y una reivindicación existencial: Belkis Ayón en el Reina Sofía

la trayectoria vital de la artista cubana se truncó de forma inesperada el 11 de septiembre de 1999, día en el que se suicidó. Dejaba tras de sí una breve pero prometedora carrera artística marcada por el mito africano Abakuá, que ahora se muestra por primera vez en nuestro país en la tercera planta del edificio Sabatini. La retrospectiva, en la que se han reunido alrededor de 80 obras de gran formato producidas a partir de 1986, podrá visitarse hasta el 18 de abril de 2022.


Su vida fue una constante lucha para expresar lo que sentía a través de sus obras. Desde luego, no lo tuvo fácil por la situación política y social que atravesaba su país, donde nació en 1967. A pesar de ello, en 1993 se convirtió en profesora de grabado de la Academia de San Alejandro y del Instituto Superior de Arte de La Habana. Ese mismo año pudo participar en la XVI Bienal de Venecia y recibió también su primer premio internacional en la Bienal de Artes Gráficas de Maastricht. Este éxito le permitió tener su primera exposición individual, que tituló Siempre vuelvo.

Después de su fallecimiento, el Museo del Barrio de Nueva York organizó en 2017 su primera exposición monográfica fuera de su país: Nkame: Una retrospectiva de la grabadora cubana Belkis Ayón. Ahora, el Museo Reina Sofía toma el testigo de esta para presentar por primera vez en España –y también en Europa– su producción gráfica en una muestra que ha titulado Belkis Ayón. Colografías. Ha sido comisariada por la cubana Cristina Vives, amiga personal de Ayón y que se encargó también de organizar la exposición neoyorquina.

Hablar de la cubana es sinónimo de hablar de colografía, una técnica de grabado poco usual basada en matrices construidas a modo de collages. Ayón la desarrolló al máximo hasta generar un lenguaje artístico único caracterizado por una gran riqueza de matices y texturas. Un género, además, que la distinguió de otros artista contemporáneos cubanos que se decantaron por la performance, las instalaciones o la fotografía para expresarse. A través de sus colografías, de gran formato y con un marcado carácter escenográfico, abordó temas como la censura, la violencia, la intolerancia, la exclusión, las desigualdades o las consecuencias de los férreos mecanismos de control de Cuba, que vivía una profunda crisis marcada por la caída del telón de acero y el colapso del socialismo en Europa.

Gran parte de la producción de Belkis Ayón se centra en su reinterpretación del mito Abakuá, una sociedad secreta masculina afroamericana que surgió en Cuba en 1830 de la mano de los esclavos africanos de Calabar –actual Nigeria– que llegaban al país, que estigmatizó y segregó a la mujer. Sus primeras obras datan de 1985, fueron creadas a color y siguiendo las técnicas más académicas, algo con lo que rompería radicalmente tres años más tarde en la exposición Propuesta a los veinte años celebrada en La Habana. A partir de entonces dominarán su obra los grandes formatos y los colores blanco y negro. Buena muestra ello son sus piezas icónicas La Cena (1988-1991), NIIoro (1991) o el tríptico La consagración I, II y III (1991).

En ellas reproduce pasajes fundamentales del ritual Abakuá donde lo mítico se reinterpreta para mostrar cuestiones éticas o sociales. Así se entiende, por ejemplo, que los rostros de sus figuras parezcan borrones, sin rasgos definidos, y que, en el caso de las mujeres, las bocas desaparezcan de sus caras.

Su madurez creativa llega en la década de los 90, cuando produce colografías de gran formato donde la simbología de sus obras trasciende a lo puramente “cubano” para mostrar mensajes más universales pero también de calado más personal: traición, desobediencia, añoranza por lo perdido, soledad, angustia por lo perdido…; piezas que además adoptan nuevos formatos que tratan de dotarlas de más dinamismo para, en ocasiones, escapar de lo puramente bidimensional. Algunas de ellas se expondrán en 1998, un año antes de su muerte, en una exposición organizada en la Couturier Gallery de los Ángeles titulada Desasosiego/Restlessness.

Belkis Ayón. Colografías podrá verse hasta el 18 de abril de 2022 en la tercera planta del Edificio Sabatini del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía.