Aparece en París el original del ‘Niño con jarrón de rosas’ de Caravaggio
La aparición de un Caravaggio perdido no es cualquier cosa. En España acabamos de ser testigos de la movida que se organiza cada vez que algún nuevo lienzo pretende convertirse en original del maestro: mercado, especialistas, subastas, debates en la red, opiniones de propios y extraños, programas de televisión, expertos en restauración, la intervención de las autoridades… Todo un espectáculo mediático en el que nunca faltan las intervenciones de aquellos a quienes nadie pidió opinión o quieren pasar a la posteridad con el viejo truco de negar autorías con argumentos peregrinos. Pues bien, la historia se repite. TEXTO: Fernando Rayón
Hace aproximadamente un año, una importante familia francesa dijo poseer un lienzo (67,5 x 52,5 cm) de Michelangelo Merisi, más conocido como Caravaggio. Hasta aquí nada sorprendente.
Como primera providencia, encargaron a un historiador que rastreara la procedencia de la tela, algo que suele descartar a muchos candidatos. El caso es que el cuadro procedía de la Colección Napoleón: sí, de Napoleón Bonaparte. Además de figurar en sus inventarios, fue fácil rastrear su procedencia original de la Colección Borghese, emparentada con la Casa Imperial Francesa por matrimonio.
La segunda fase fue compararlo con las numerosas copias existentes de Joven con jarrón de rosas, una de las primeras obras del pintor lombardo, fechable hacia 1592-1593; es decir, en sus primeros años romanos, y conocida hasta ahora solo por copias y derivaciones. Su calidad era indiscutible y, a pesar de que ahora se estén planteando una somera restauración, su estado de conservación tampoco dejaba dudas.
Hoy estamos ya en la última fase: la de los expertos. Tema peliagudo, tratándose de Caravaggio y su corte de italianos. Pues bien, los más importantes ya se han pronunciado favorablemente. Tanto, que el silencioso mercado del arte está revolucionado; con permiso –claro está– del Museo del Louvre, que no dejará escapar la pieza tan fácilmente como el Ministerio de Cultura español.
De momento el cuadro, del que aún no se tiene imagen, no estará presente en la próxima exposición del pintor en el Palazzo Barberini de Roma y, los pocos que lo han visto, no sueltan prenda sobre cuándo será su presentación en sociedad. Lo que también está preparado es un artículo casi definitivo sobre el lienzo. Caravaggio sigue dando sorpresas a sus fanáticos. La bomba está al caer.
