205.700 euros por el Zóbel en Ansorena

Fernando Zóbel. Esperando mayo (desde Monet), 1978. Salida: 100.000 euros. Remate: 170.000 euros

205.700 euros por el Zóbel en Ansorena

Junto al tapado y el Brueghel joven en pintura antigua, sobresalieron las ventas de Plensa y Sorolla


 

Fernando Zóbel viene a ser hoy día como el rey Midas en la antigüedad. Bueno, todo dentro de nuestras escuálidas cifras, claro. Dado el fuerte interés del coleccionismo asiático en su producción es, en el fondo, sinónimo de liquidez. Y así, poco a poco nuestro patrimonio va exportándose hacia esas zonas, con bastante mayor poder adquisitivo.

Esta vez se trataba de Esperando mayo (desde Monet), 1978 (O/L, 150 x 120 cm; lote 918), pintado en Madrid y procedente del depósito de la madrileña galería Theo. Los 100.000 euros de los que partía en Ansorena todos sabíamos que serían rápidamente superados. Un instante antes del inicio de las pujas, seis teléfonos hablaban en idiomas con distintas partes del mundo mientras dos coleccionistas en la sala esperaban expectantes. Pocos segundos más tarde, tras la cascada ilusionada de miles de euros ofrecidos, se adjudicaba al mejor postor por los 170.000 euros definitivos, que sumadas las comisiones y los impuestos se fue a los 205.700 euros, una cifra esperada, dentro de lo  que cabe, dada su calidad, tamaño, estado de conservación y año.

El otro triunfador del siglo XX fue el catalán Jaume Plensa. Reconozco que la venta del espectacular papel en negros Paisatge II, 1990 (Tm/papel, 205 x 288 cm; 625), a modo de bodegón clásico revisitado, por 42.000 euros a un coleccionista al teléfono me sorprendió. No porque no haya vendido estas piezas en precios similares sino porque hacía tiempo de aquello, y los últimos intentos se habían saldado con fiascos. De su mano también, su bronce Brothers, 1990 (50 x 47 x 47 cm; 624), subió también de 9.000 a 15.000 euros, lo cual parece una confirmación no sólo del interés de los coleccionistas por seguir comprando obra de su mano sino también de la capacidad de la sala para cerrar estas ventas.

Y ya que hablamos de una escultura, citemos otra de las sorpresas de esta edición. Me refiero a los 20.000 euros ofrecidos en un puja por escrito –ligeramente por encima de los 18.000 euros pedidos- por la pieza de madera de Francisco Leiro, Esteo, 1985 (257 x 75 x 43 cm; 581), comprada en la galería Marlborough de Nueva York años ha. Toda una apuesta en estos tiempos que corren por el de Cambados, dicho sea de paso. Algo similar sucedió con las abundantes obras de Víctor Mira que se ofrecían en esta cita, procedentes de una extensa colección particular alemana. Hubo buenas ventas, como los 7.000 euros por Estilita, 1992 (bronce, 200 x 65 x 45 cm; 521), los 6.300 euros por otro bronce titulado también Estilita, 1992 (3/4, 97 x 131 x 38 cm; 522), o los 7.500 euros por Bach cantata, 1989 (Tm/L, 146 x 113,5 cm; 643).

Sigamos avanzando, con dos autores figurativos. De Eduardo Arroyo, su Biombo de gatos, 1990 (Tm/papel, 151 x 102 cm; 610), procedente de la galería Carles Taché de Barcelona, donde se adquirió en 1990, se vendió por los 12.000 euros que se pedían; no está nada mal para ser un collage de papeles… Más interés hubo por parte de los coleccionistas por hacerse con el Bodegón, 1995 (bronce policromado, sin número de edición, 11 x 19,8 x 32,8 cm; 575) de Carmen Laffón, que subió de 2.400 a 3.600 euros en sucesivas pujas; no sucedió lo mismo con su buena Naturaleza muerta en Sanlúcar, 1990 (O/L, 27 x 41 cm; 577), que se ofrecía por 8.000 euros y en esa cifra se adjudicó a una puja previa.

Del lenguaje del cambio a la modernidad, por decirlo de algún modo, podemos entresacar también algunos resultados, muy brevemente ya, que muestran tendencia. De Carlos Nadal, su Santa María, 1982 (O/L, 81 x 100 cm; 836), se adjudicó por los 17.000 euros iniciales. Lo mismo sucedió con el lienzo de Óscar Domínguez, Cuadro Chiquito par Chiquita, 1946 (O/L, 12 x 18 cm; 920), pero por los 7.000 euros pedidos. En cambio, como era de esperar sin ser grandísimas ventas, sí hubo una auténtica batalla por hacerse con dos piezas. La primera, de Manolo Hugué, cuyo Picador, 1937 (O/L, 55 x 46 cm; 550), expuesto en cuatro muestras, subió de 4.000 a 8.000 euros. La segunda, un sencillo dibujito tardío de Ángel Ferrant, Figura, 1959 (tinta, carboncillo y lápiz, 27 x 19 cm; 893), que pasó de 450 a nada menos que 3.600 euros.

En el cambio del siglo, Joaquín Sorolla volvió a exhibir su potencia. No estábamos hablando de una pieza superior sino del sencillo pero buen estudio o Boceto para el Dos de mayo de 1808, c. 1884 (O/L, 41 x 49 cm; 70). Conservada la obra final en el museo del Prado, en esta obra retrata al que sería con el tiempo su cuñado, Antonio García del Castillo. Y así, tampoco fue extraño que subiera ligeramente, de los 35.000 euros de inicio a los 37.000 finales. Muchísimo más interés despertó la tabla de Mariano Bertuchi, Compañía de infantería del Ejército del Protectorado en el Rif (O/T, 40 x 58 cm; 74); localizado en Tetuán, y con una placa explicativa que reza «Los Kaides, Mulacemin y Mokademin de la Mehal – la del Rif nº5 como recuerdo y cariño a su Jefe Tte. Coronel Don José Pérez Pérez. En el Rif 19-III-947», se disparó de 9.500 a 22.000 euros.

Llegamos al final del recorrido histórico de los remates, la pintura antigua. Aquí se produjo la segunda mejor venta de la cita, un tapado. Se trata de un lienzo de Escuela italiana, de finales del siglo XVI según la sala, Dama (46,5 x 38 cm; 31), que partía desde los 15.000 euros. Los ecos de Luini eran evidentes, pero algo más seguro debieron ver algunos de los coleccionistas que fueron elevando sus pujas hasta adjudicarse por 70.000 euros.

La otra gran venta de pintura antigua fue a parar a un cobre de Jan Brueghel el joven; su firmado Paisaje con asentamiento en la montaña (O/cobre, 21 x 25,5 cm; 26) subió también de 28.000 a 42.000 euros. Y para terminar, dos tablas de Escuela burgalesa del siglo XV: la Visitación y la Piedad (O/T, 107 x 62 cm; 158 x 82 cm con marco; lotes 18 y 19) subieron de 8.000 a 12.000 euros cada una. Enhorabuena a la sala por sus buenas ventas. ¡Y muy felices Navidades! Daniel Díaz @Invertirenarte

Fernando Zóbel. Esperando mayo (desde Monet), 1978. Salida: 100.000 euros. Remate: 170.000 euros
Carlos Nadal. Santa María, 1982. Salida y remate: 17.000 euros
Escuela italiana, fines siglo XVI. Salida: 15.000 euros. Remate: 70.000 euros
Jaume Plensa. Paisatge II, 1990. Salida: 38.000 euros. Remate: 42.000 euros
Joaquín Sorolla. Boceto para el Dos de mayo de 1808, c. 1884. Salida: 35.000 euros. Remate: 37.000 euros
Jan Brueghel el joven. Paisaje con asentamiento en la montaña. Salida: 28.000 euros. Remate: 42.000 euros
Francisco Leiro. Esteo, 1985. Salida: 18.000 euros. Remate: 20.000 euros
Mariano Bertuchi. Compañía de infantería del Ejército del Protectorado en el Rif. Salida: 9.500 euros. Remate: 22.000 euros