Mariano Fortuny. Interior con figuras, 1871, detalle. Salida y remate: 70.000 euros
UNA TABLA DE FORTUNY, LA PIEZA ESTRELLA EN BALCLIS
En la maratoniana licitación del día 26 de octubre, se ofrecen también tres excepcionales tablas de Ortoneda del siglo XV y un fantástico panel de Néstor
Casi 600 lotes saldrán a pujas en Balclis en una jornada que se prevé larga e intensa; cantidad frente a calidad, parece leerse. Y aunque en muchos aspectos se puede hacer esa lectura, no conviene despreciar en absoluto algunos lotes que son, verdaderamente, excepcionales.
El primero de ellos, por nombre y calidad, es el óleo sobre tabla de caoba de 27 x 35 cm (lote 1615) de Mariano Fortuny, Interior con figuras, firmado y fechado en Granada, en 1871. Una sencilla escena para su marchante Goupil, muestra dos personajes masculinos sentados, vestidos al modo del siglo XIX, con un gran mastín a sus pies, y una figura femenina (su mujer, Cecilia de Madrazo), que les da la espalda. Pero como en tantas otras ocasiones, en el caso del de Reus no se trata tanto del qué, sino del cómo. Visto de cerca, son pinceladas amplias, con aparente escaso dibujo; visto a cierta distancia, cobran vida, captan la luz y sugieren nuevas fórmulas. En este sentido, me parece muy sintomática la simulación del espacio, creado a base de ligerísimas manchas en el techo y en las paredes, de una modernidad asombrosa. Por esto, y otras muchas cosas, Fortuny es Fortuny.
Expuesto en el Museo de Castres en 1974 y en Barcelona en 1989, y publicado en la monografía de González y Martí, se piden 70.000 euros. Recordemos las dos últimas ventas de cierta importancia: en julio pasado, Christie’s vendió por 32,500 GBP In the garden, Granada (O/L, 49 x 20 cm; est.: 15,000-25,000 GBP; ver), lejos de los 95.000 euros en que se adjudicó en Alcalá en octubre de 2014 su fantástica tablita de 13 x 20 cm, Carnaval en el corso romano (ver). Así que no sería extraño que subiese algunas pujas…
De 1883 se ofrece de nuevo El jugar, pequeña tabla (54,5 x 23 cm; 1617) firmada en 1883 por el joven Joaquín Sorolla. En diciembre pasado (ver) no hubo comprador en esta misma sala que pagase los 55.000 euros pedidos, por lo que ahora sale con un precio mucho más atractivo, 24.000 euros. Mucho más interesante será el espectacular lienzo pegado a tabla de nada menos que 175,4 x 290,5 cm, El jardín de las Hespérides (en reverso con parte superior, 80,1 x 290,5 cm; 1685), un verdadero hito en la producción del canario Néstor. Realizado entre 1908 y 1909 para la decoración del gran salón de fiestas del Casino Internacional de Barcelona, con su estilo modernista-simbolista tan propio e inconfundible, y publicado en abundante literatura, sale al mercado por 70.000 euros. Dado el tamaño, no será fácil su venta, pero es pieza sobresaliente.
También de 1909 conviene citar, aunque sea brevemente, el buen Estudio de montañas. Alrededores de Sitges (O/L, 76,5 x 107 cm; 1775) de un joven de 34 años llamado Joaquín Sunyer. Austero y colorista, su simplificación de las formas capta la mirada, un paso por delante de los clásicos ya de ese momento Mir o Rusiñol; en 35.000 euros comenzarán las pujas. Y de 1924, un mármol con mucha calidad que no debería pasar desapercibido: Adolescente o Ingenua (40,5 x 24,5 x 28 cm; 1652) del casi siempre trascendente José Llimona, por 18.000 euros (versión similar a la del Museu del Modernisme, ver).
Dos sugerencias más del siglo XX, antes de entrar en la pintura antigua. Vean con detalle el lienzo un tanto atípico de José Vela Zanetti, Marineros(65 x 100 cm; 1869), que subirá de los 5.500 euros iniciales, y un Roi (Tm/papel/L, 56 x 38 cm; 1956) de 1962 de Antoni Clavé por 9.000 euros, un precio que hace apenas unos años era absolutamente impensable.
Volviendo al siglo XIX, muy telegráficamente ya, sobresalen dos apuntes de Francisco Pradilla: Mal tiempo (O/L/cartón, 10,6 x 18,5 cm; 1580) por 1.000 euros, y sobre todo Recolección del maíz. País pontino (Italia) (O/cartón, 16,5 x 26 cm; 1583), por 1.800 euros, que deberían subir. Y el Retrato de Juan Bravo Murillo, 1849 (O/L, 100 x 79,3 cm; 1564) de Federico de Madrazo; personaje conocido con calidad más que suficiente, por 12.000 euros.
Para el público mucho más especializado, estamos de enhorabuena por el descubrimiento y la salida al mercado de nada menos que tres tablas de Pascual Ortoneda (c. 1421-1461), documentado en la corona de Aragón: Santo Tomás, san Jaime Apóstol y santa Lucía (temple/T, 194 x 65 cm, aprox. c/u). La única obra segura de su mano es el San Antonio enterrando a san Pedro ermitaño del MNAC (ver), procedente de Embid de la Ribera (Zaragoza), pero en los últimos años Francesca Español Bertrán y Francesc Ruiz i Quesada le han atribuido algunas más; éste último publicará un artículo con estas piezas en la revista Retrotabulum. Semejante hallazgo probablemente hará las delicias de los grandes (y escasos) coleccionistas de estas piezas, que verán con otros ojos los 210.000 euros pedidos.
Apenas hay espacio para mucho más. Merece la pena ver también Apolo y las musas en el monte Parnaso (O/L, 97,5 x 131 cm; 1491), que la casa atribuye al francés Pierre Patel el viejo, por 5.000 euros, aunque estemos lejos de la calidad del fantástico A landscape at evening with travellers and a hunter near classical ruins (ver) vendido en Sotheby’s en julio de 2008 por 937,250 GBP. Estudien el catálogo, porque en 600 lotes, siempre se encuentran oportunidades. Daniel Díaz @Invertirenarte