Sorolla y Guerrero no fallan en Alcalá Subastas
La jornada de los días 18 y 19 de diciembre se salda con buenos resultados, tanto para la pintura antigua –la tabla del Maestro de Cervera se vendió por 40.000 euros– como para el arte moderno, con el dominio del pintor valenciano adjudicado por 60.000 euros y de José Guerrero rematado en 40.000 euros. El Estado compró, entre otras obras, el Esopo de Fortuny.
Alcalá Subastas cierra el año con un balance más que positivo, especialmente en su última licitación de la semana pasada. La oferta de piezas tanto clásicas como modernas y contemporáneas era variada, pero había un nombre que es siempre una apuesta segura de todas y cada una de las subastas en las que participa: Sorolla. Y desde luego no defraudó.
El interés por la pintura del valenciano sigue siendo una constante en nuestro país, ya se trate de una de sus típicas escenas de playa, un retrato o una composición menos habitual en su repertorio, como la que ofrecía la casa madrileña el pasado 19 de diciembre.
Árabe con pistola de Joaquín Sorolla es una de las escasas composiciones de tema orientalista del autor, que solo se sumergió en dos ocasiones en este romanticismo finisecular (antes y después de su viaje a Roma).
La pintura estaba datada en 1881, el primer momento en el que el pintor explora el orientalismo, y presentaba un personaje vestido con una túnica blanca cargada de matices apoyado sobre una pared decorada con decenas de azulejos. Estaba firmada en el ángulo inferior izquierdo y salía por 35.000 euros, pero la rareza del tema y la riqueza del dibujo hicieron que escalase hasta prácticamente el doble: 60.000 euros.
Él valenciano y José Guerrero fueron los dos grandes protagonistas de Alcalá la semana pasada. Gracias a su óleo sobre lienzo Cumbre –firmado, fechado y titulado en el reverso–, el pintor granadino alcanzó la segunda posición de remate más caro de la velada cuando un comprador ofreció los 40.000 euros pedidos por el lote 1021, que por cierto era la portada del catálogo.
Volviendo a Sorolla, no fue el único modernista español que triunfó en la casa madrileña. Hermenegildo Anglada-Camarasa y Santiago Rusiñol también se vendieron por encima de su estimación. En el caso de este último, se trataba de un paisaje titulado El Tajo I fechado en 1898 que salía por 40.000 euros. Se vendió por 47.500 euros.
De Anglada-Camarasa se ofrecía un Paisaje de Mallorca fechado entre 1914 y 1936 que ya había sido recogido por el archivo de Fontbona /Miralles. Salía igualmente por 40.000 euros y subió ligeramente hasta los 47.500 euros finales.
Otro autor que destacó con fuerza de esa misma época, pero esta vez de Alcoy, fue Lorenzo Casanova Ruiz, cuya Escena en un interior se remató en 22.500 euros (tras subir desde los 15.000 iniciales). Este pintor comenzó sus estudios en la Escuela de Bellas Artes de San Carlos de Valencia, terminó de formarse en Madrid junto a Daniel Cortina y Federico Madrazo, y fue pensionado en Roma en 1873. Precisamente la tela preciosista ofrecida por Alcalá era de su etapa romana.
Ya en el apartado de pintura clásica, merece la pena destacar la tabla del Maestro de Cervera que mencionamos en el artículo de previos y que ya había sido publicada por Post. Jesús entregando las llaves a san Pedro salía con un precio inicial de 30.000 euros pero terminó rematándose en 40.000 euros.
Conocido también como Maestro de Pere Girard, el autor de esta tabla fue un pintor valenciano documentado en Cataluña en el último cuarto del siglo XV. En 1986 Gudiol y Alcolea propusieron el cambio de nombre a Maestro de Cervera, y más recientemente varios investigadores han querido relacionarlo con la figura de Joan Rúa (pintor vinculado al taller de Joan Reixach).
Otras dos piezas interesantes sobre las que ya habíamos llamado la atención eran el San Elías de Antonio de Pereda, vendida por 25.000 euros; y la miniatura al óleo sobre cobre de Juan Carreño de Miranda, un Retrato de dama que quizá perteneciese a la casa de Medinaceli que se adjudicó igualmente por su salida: 15.000 euros.
Por su parte el Estado adquirió en Alcalá tres obras: el Esopo (copia de Diego Velázquez) de Mariano Fortuny por los 40.000 euros pedidos; un estudio a sanguina de máscaras grotescas de Federico Zuccaro que evoca el proyecto decorativo del autor para el jardín del Palazzo Zucarri de Roma por 12.000 euros; y un retrato de María Luisa de Parma con banda, broche con flor de lis y puro en su mano izquierda por 800 euros.