Donatello reina en Florencia
La ciudad italiana acoge una de las exposiciones más atractivas de la temporada: Donatello. Il Rinascimento, una ambiciosa propuesta que ahonda en una de las figuras capitales de la historia del arte de todos los tiempos. Con doble sede en el Palazzo Strozzi y el Museo Nazionale del Bargello, ha sido patrocinada por Fondazione CR Firenze en colaboración con los Staatliche Museen de Berlin y el Victoria and Albert Museum de Londres. Podrá verse hasta el 31 de julio y posteriormente viajará a la capital alemana.
Donato di Betto Bardi, conocido tradicionalmente como Donatello (Florencia, 1386-1466), se convirtió muy pronto en una de las figuras capitales del arte de su tiempo. Pintor, pero sobre todo escultor, manejó con soltura el mármol, la terracota, el bronce o la madera, realizando con estos materiales algunas de las mejores creaciones en relieve o bulto redondo del Quatrocento. Su David marmóreo, encargado en 1408 para uno de los contrafuertes del coro del duomo de Florencia, marcó un antes y un después. Ocho años más tarde realizaría la versión en bronce, que, trasladada al Palazzo Vecchio, se convirtió en emblema de la ciudad. A partir de entonces no le faltarían encargos dentro y fuera de su ciudad natal, a la que regresaría al final de su vida, en 1459, para realizar las puertas de la basílica de San Lorenzo y algunos de sus encargos para los Medici.
Para ahondar en su relevancia y en su legado en las siguientes generaciones de artistas, el pasado 19 de marzo se inauguró en Florencia una gran exposición monográfica con doble sede en el Palazzo Strozzi y el Museo Nazionale del Bargello. Titulada Donatello. Il Rinascimento, cuenta con algunas de sus producciones más relevantes, que además entran en diálogo con esculturas, pinturas y dibujos de algunos de sus contemporáneos como Bruneleschi, Mantegna, Bellini o Miguel Ángel y Rafael.
El recorrido se inicia en el Palazzo Strozzi, en el que se despliega, en sentido cronológico y a través de once secciones, un completo recorrido de su trayectoria profesional, desde sus inicios hasta sus últimos años al servicio de la familia Medici. Más allá de reunir buena parte de su producción, lo más interesante son los diálogos que se establecen entre sus creaciones y las de sus contemporáneos. Así, en la primera sala comparten protagonismo su David victorioso (1408-1409) y el Crucificado de Brunelleschi de Santa Maria Novella (hacia 1410); mientras que en la sexta sección, dedicada a sus obras realizadas en Prato, se pueden contemplar la Danza de spiritelli (1434-1438) del artista en colaboración con Michelozzo, hoy propiedad del duomo de dicha localidad, junto al relieve de la Madonna Piot (hacia 1440) del Museo del Louvre.
Este mismo espíritu es el que se advierte en la octava sección, dedicada a sus trabajos entre Florencia y Padua, donde brillan el San Juan Bautista marmóreo de hacia 1442 propiedad del Bargello junto a la Virgen con el Niño (hacia 1490-1495) de Mantegna del Museo Poldi Pezzoli de Milán.
Por su parte, el Bargello, que posee algunas de sus mejores creaciones, entabla diálogos de gran interés entre piezas tan sobresalientes como su San Jorge (hacia 1415-1417) o el David victorioso en bronce (hacia 1435-1440), con imágenes de gran porte de aristas como Andrea del Castagno, del que se muestra su pintura Farinata degli Uberti (1448-1449) de los Uffizi, parte de una serie de personajes ilustres, o el David Victorioso de Desiderio da Settignano (hacia 1462-1464) de la National Gallery de Washington. Aquí culmina además el basto recorrido de la exposición, que cierra con una de sus creaciones más famosas y que más recorrido han tenido en la historia del arte, la Madonna Dudley del Victoria and Albert Museum, que se enfrenta, nada menos, que a la Madonna de la escalera (hacia 1490) de Miguel Ángel de Casa Buonarroti.
Donatello. Il Rinascimento, ha sido comisariada por Francesco Caglioti y podrá verse hasta el 31 de julio en Florencia. Organizada en colaboración con el Staatliche Museen de Berlin y el Victoria and Albert Museum de Londres, viajará posteriormente a la Gemäldegalerie berlinesa.