La exposición del Archivo Nacional de Cataluña, enmarcada en el Festival Lumínico de San Cugat, muestra las fotografías que la artista parisina tomó en su viaje a Barcelona y varios enclaves de la costa en 1933. Muchas de estas instantáneas permanecieron en el olvido hasta el año pasado, cuando salió a subasta una caja de negativos encontrada por casualidad en la que se descubrieron.