Un Sebastián Martínez inédito

Un Sebastián Martínez inédito

Las labores de ampliación de los espacios del Museo del Real Monasterio de Poblet han permitido el estudio y atribución de esta pintura de autoría previamente desconocida por el investigador Rafael Mantas Fernández en colaboración con Damiá Amorós i Albareda, conservador de la institución. Este San Antonio con el Niño se convierte así en la última obra que se incorpora al catálogo del pintor del siglo XVII.


El corpus pictórico de Sebastián Martínez Domedel se ha beneficiado de la reciente  incorporación de un lienzo que ocupaba una de las estancias privadas del Real Monasterio de Poblet. Esta abadía cisterciense, que alberga el panteón de los reyes de la Corona de Aragón, se sometió desde 2017 y hasta el año pasado a diversas tareas de ampliación de su espacio expositivo. La posibilidad de incluir un numero muy superior de piezas en la exposición permanente ha propiciado un estudio pormenorizado de varias obras que hasta el momento habían sido pasadas por alto.

Fue gracias a esta coyuntura que el conservador del museo, Damiá Amorós i Albareda se puso en contacto con el investigador de la Universidad de Jaén, Rafael Mantas Fernández, cuya tesis doctoral versó sobre la pintura de Sebastián Martínez Domedel. Mantas pudo estudiar este lienzo que representa el tema de San Antonio de Padua con el Niño para confirmar la autoría. Según ha declarado: “no consideramos otra atribución, ya que el estilo y la presencia de la firma lo identificaban perfectamente”. Las conclusiones de ambos han sido publicadas en el número 25 de la revista Atrio de la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla.

La composición cuenta con los elementos básicos para el reconocimiento de la iconografía. En el margen derecho se haya la figura del santo que interactúa con un Niño Jesús ataviado con una túnica roja y que camina sobre el escritorio del religioso. Sobre esa única pieza de mobiliario reposan otros atributos del santo, como una rama de lirio en flor –que simboliza la pureza del santo– o unas Sagradas Escrituras. El fondo de la composición es neutro y solo se detalla un suelo embaldosado.

A pesar del mal estado de conservación en el que se haya la pieza, y que desvirtúa la calidad de la técnica y las tonalidades originales, se ha podido atribuir con toda firmeza gracias a la presencia de la firma “Sebastianus”. “Hasta ahora había sido pasada por alto por la comunidad de historiadores por la localización de la obra en las estancias privadas del monasterio” precisaba Mantas. Esta rúbrica está presente en otros lienzos notables del autor, como el San Pedro o el Santiago el Mayor pertenecientes al Apostolado custodiado en el Palacio Episcopal de Córdoba.

Sebastián Martínez Domedel, San Antonio de Padua con el Niño, óleo sobre lienzo, 176 x 122 cm. Museo de Poblet, Tarragona.
Detalle de la firma, Sebastián Martínez Domedel, San Antonio de Padua con el Niño, óleo sobre lienzo, 176 x 122 cm. Museo de Poblet, Tarragona.

El museo ha declarado respecto a devolver esta pintura a un estado más cercano al original: estamos trabajando para realizar lo más pronto posible la restauración de esta pieza. Su estado de conservación es muy débil, presenta algunas faltas importantes, un reentelado deficiente y una capa de suciedad importante, pero todo ello asumible para los servicios de restauración que colaboran habitualmente con el Museu del Monestir de Poblet, como es la Unitat de Restauració i Conservació de Tarragona. En estos momentos la pieza se encuentra en la parte privada de la comunidad y este hecho alarga su esperanza de vida, al estar en unas condiciones estables.

Además, la proximidad iconográfica y formal con otras de sus obras, como San Francisco recibiendo la ampolla, también respalda la nueva autoría. El estudio ha podido constatar que se trata de la primera obra conocida de Martínez Domedel con el tema de San Antonio de Padua y el Niño.

Rafael Mantas también ha comentado que “durante mucho tiempo, la figura de este pintor activo en Jaén ha sido pasada por alto, pero a raíz de las últimas investigaciones, está siendo cada vez más tenido en cuenta por la crítica y por el público”. Una de las iniciativas más relevantes fue la exposición Sebastiaus, pintor de Jaén, celebrada en la catedral de Jaén en 2016, donde se presentaron al público la restauración de los Evangelistas de la misma sede. Además, la presencia de varias de sus obras en ferias internacionales –con el caso notable de TEFAF Maastricht, donde la galería Caylus ofreció una Inmaculada Concepción– ha contribuido a su mayor valoración en el mercado.

A la pregunta de si este descubrimiento será incluido en la colección permanente de Poblet, Damiá Amorós asegura: Sin duda alguna. Las ya inauguradas sala del abad Copons y sala del abad Mengucho, los nuevos espacios inaugurados y abiertos en 2019, presentan ya dos piezas procedentes de la reorganización, catalogación y documentación de nuestras piezas: el calvario de Juan de Juanes y el bodegón de Bernardo Polo. Estas solo son algunas de las nuevas adscripciones. Estamos trabajando en algunas más. Además, gracias a la nueva museografía y ampliación se han realizado donaciones al museo.

El conservador también ha expresado lo excepcional de la presencia de una pintura de Sebastián Martínez en las colecciones catalanas y que ha sido un trabajo compartido con Rafael, cosa que creo que repetiremos en alguna pieza más de Poblet.

Mantas Fernández, R., & Amorós i Albareda , D. (2019). Un San Antonio de Padua con el Niño inédito de Sebastián Martínez Domedel en el museo del Monasterio de Poblet. Atrio. Revista De Historia Del Arte, (25), 44-57.