Un pianoforte de Juan del Mármol, lo mejor de la subasta de Goya
Dos años después Juan del Mármol hace aparición en una licitación en nuestro país, después de que lo hiciera en marzo de 2017 en Alcalá Subastas, donde alcanzó los 13.000 euros desde los apenas 1.500 en que se tasó. Una pieza que ya en su momento obtuvo una gran acogida entre los coleccionistas, tanto en la sala como a los teléfonos (leer). Y es que, este constructor sevillano nacido en 1737, es uno de los grandes artífices de pianos y pianofortes, adquiriendo una gran fama en la corte de Carlos III hasta el punto de ser pensionado de forma vitalicia. Discípulo del primer constructor de pianos español, Francisco Pérez Mirabal, cuyos diseños se basaban en los del italiano Bartolomeo Cristófori, inventor de pianofortes a principios del S. XVIII, y cuyo gran avance respecto a otros instrumentos fue una respuesta sonora débil o fuerte, directamente proporcional a la fuerza con la que se oprimen las teclas. Pero realmente, del Mármol se inspiró sobre todo para sus modelos, en los del inglés Johannes Zumpe, instrumentos que empiezan a aparecer en España a partir de 1770. Sus obras se caracterizan por tener cajas realizadas en caoba con decoración de marquetería sencilla en boj y un atril en forma de abanico de tres brazos. Veremos a ver qué ocurre en esta ocasión con este modelo (432) firmado y fechado en Sevilla en 1790, y por el que han pensado un precio de salida de 6.000 euros.
Otra de las piezas más importantes de la licitación es una cómoda estilo Luis XVI realizada h. 1900 (lote 396), siguiendo modelo de Martín Carlin. En la que destacan los paneles en laca y los bronces aplicados, y por la que han estimado un precio de salida de 16.000 euros. Este exitoso ebanista alemán nacido en Friburgo, comenzó a trabajar como maestro ebanista en París el 30 de julio de 1766. Era conocido fundamentalmente por sus elegantes muebles montados en porcelana de Sèvres. Sus obras se consideraban en la época, como los más exquisitos dentro de los estilos de transición y neoclásico, estos fueron distribuidos por los grandes marchantes de la época como Poirier, Darnault y Daguerre, a clientes como María Antonieta y a gran parte de la aristocracia francesa. Muebles suyos están hoy en día en los grandes museos como el Metropolitan Museum of Art. Mariano Santos @AntgOln