Descripción
Han pasado más de cuatro décadas y Antonio López sigue pintando la Gran Vía, una de las principales arterias de Madrid y eje central por el que discurre gran parte de la vida de la ciudad. La ha retratado en una serie de óleos a diferentes horas del día y la noche, bajo el sol y la lluvia, en un continuo ejercicio de intentar atrapar lo inaprensible gracias al misterio de la luz reflejado en sus edificios.
Por Antonio López