NUMERO 46, ABRIL-JUNIO 2020

SIN COMPLEJOS

Resulta reconfortante ver que mientras la mayoría vivimos preocupados –y a veces obsesionados– por lo cotidiano, haya personas o colectivos que piensen en un futuro que cada vez está más cerca. La Fundación Norman Foster es una de esas instituciones que fomentan la investigación interdisciplinar para ayudar a las nuevas generaciones. Arquitectos, diseñadores, artistas, filósofos y científicos analizan cuestiones y problemas que necesitan un enfoque prospectivo en varias áreas de conocimiento. Es- tas son algunas de las reflexiones que plantea Foster en la entrevista de este número. No es una cuestión menor.

Los coleccionistas, galeristas y creadores tampoco son profesionales que trabajen encerrados en su mundo o vivan en dimensiones paralelas. Eso ya es el pasado. Son parte fundamental de una sociedad que necesita todo su poder creativo para enfrentar- se al presente y encarar el futuro con nuevas visiones y soluciones diferentes. La educación y la investigación hace tiempo que des- bordaron los colleges y las universidades para desarrollar, junto a los museos, fundaciones o instituciones, proyectos sociales que se conviertan en realidad.
Decía Bill Viola que todo arte es contemporáneo, pero solo lo será si es capaz de estar conectado con la sociedad. Ver a los apóstoles de José María Cano junto a los de El Greco en la sacristía de la catedral de Toledo seguramente sorprenderá, pero sobre todo nos recuerda que el pasado y el presente forman parte de una misma realidad que solo el arte es capaz de conectar y proponer al futuro sin complejos.

Por Fernando Rayón