Descripción
La llegada a Madrid de Mateo Cerezo en 1654 coincidió con uno de los momentos más brillantes del Siglo de Oro español. A pesar de su breve carrera -falleció con tan solo 29 años- su rápida evolución artística lo convirtió en uno de los pintores más interesantes de su tiempo.
Por Ángel Rodríguez Rebollo